Pinocho

No es Lenny Bruce haciendo juegos malabares con la sem¨¢ntica y retorci¨¦ndola para dinamitar convenciones, utilizando el sarcasmo como arma de corrosi¨®n, provocando al p¨²blico y enfureciendo a los polic¨ªas que esperaban a que el deslenguado yonqui cruzara el l¨ªmite de la obscenidad verbal para entrullarlo. No es un humorista transgresor. Es un profesional de la pol¨ªtica con potestad legitimada por las urnas para dirigir una naci¨®n. Se llama Mariano Rajoy y lo que ha dicho tiene voluntad de seriedad, no es un chiste surrealista, no le crece la nariz al soltar sus delirantes e impunes mentiras.

Dando ejemplo a los loros de su Gobierno, que repiten hasta lo grotesco la falaz consigna de que la tormenta ha finalizado (la l¨®gica asegura que habr¨¢ un momento en el que dejar¨¢ de llover, pero tambi¨¦n que la mayor¨ªa de los que han sufrido la inundaci¨®n jam¨¢s podr¨¢n recomponer el techo de su casa) y que a partir de ahora hasta los m¨¢s tirados ver¨¢n atenuada su desdicha, ser¨¢n felices y comer¨¢n perdices, Rajoy prescinde de la in¨²til verg¨¹enza, reniega de los agoreros, pesimistas y extremistas que se niegan a brindar con ellos ante el advenimiento del Mes¨ªas. Asegura haber enderezado el rumbo econ¨®mico preservando el Estado del bienestar, tambi¨¦n poseer un sistema como casi nadie en el mundo y que funciona mejor que nunca, que est¨¢ construyendo un ma?ana de seguridades y la inmensa mayor¨ªa de los espa?oles se siente orgullosa de su gran pa¨ªs. Y no le pasa nada por soltar sin sonrojo estas audaces e impresentables mentiras. Y los colegas le aplauden y le jalean como en las farsas m¨¢s cochambrosas.

Si escuchar las satisfechas barbaridades del timonel del reino provoca sensaciones indeseables, tampoco el discurso previsible de los que aspiran a pillar la jefatura de la oposici¨®n invita a so?ar a ning¨²n parado medianamente sensato. C¨®mo no entender que mogoll¨®n de gente hastiada haya votado a los ne¨®fitos de Podemos. No parecen contaminados, todav¨ªa no les ha dado tiempo. Por el momento solo son etarras, castristas y chavistas, jura la calumnia rijosa, la escoria con atributos. Y palestinos, a?adir¨¢n pronto. O sea, exterminables. Sin el menor problema.