La arist¨®crata negra
Entre los aspectos m¨¢s rastreros de la esclavitud destacan, por supuesto, su barbaridad moral y su componente racista, pero quiz¨¢ el eje clave para su sostenimiento durante buena parte de la historia de la humanidad (y a¨²n con flecos) fue que siempre, en cada ¨¦poca, se acabara convirtiendo en fundamento para la econom¨ªa, en figura clave en el nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, en elemento mercantil inabordable por los legisladores si no se quer¨ªa romper con la base monetaria de cada pa¨ªs. Una mezcla de ¨¦tica, sociedad y econom¨ªa, sobre la que adem¨¢s se podr¨ªan hacer pol¨¦micos paralelismos con recientes inclusiones en el c¨¢lculo del PIB de ciertas actividades econ¨®micas, que aborda con profesionalidad y emoci¨®n la pel¨ªcula brit¨¢nica Belle, ambientada en el seno de la aristocracia inglesa del siglo XVIII. Un relato con un excelente equilibrio entre lo social, lo pol¨ªtico, lo judicial, lo afectivo y lo amoroso, que desemboca en la pel¨ªcula perfecta para aquellos que no solo buscan emoci¨®n sentimental sino tambi¨¦n conocimiento hist¨®rico.
BELLE
Direcci¨®n: Amma Asante.
Int¨¦rpretes: Gugu Mbatha-Raw, Tom Wilkinson, Emily Watson, Miranda Richardson, Sarah Gadon.
G¨¦nero: drama. R U, 2013.
Duraci¨®n: 104 minutos.
A simple vista, Belle puede parecer el t¨ªpico producto de ¨¦poca brit¨¢nico, acad¨¦mico, impoluto y g¨¦lido, pero incluso en ese tipo de molde tambi¨¦n se pueden hacer diferenciaciones. Por ejemplo, el hecho se?ero de que la pel¨ªcula est¨¦ protagonizada, escrita y dirigida por Gugu Mbatha-Raw, Misan Sagay y Amma Asante, respectivamente, mujeres negras nacidas en Inglaterra, pero cuyo nombre no deja lugar a dudas respecto de sus or¨ªgenes. Un aspecto que adem¨¢s agradece la historia por su componente de atenci¨®n al hecho de ser mujer, ya sea esclava o libre. Y aunque en alg¨²n momento el tratamiento musical, lo m¨¢s obvio y adocenado de toda la producci¨®n, est¨¦ a punto de arruinar alguna secuencia, la pel¨ªcula, basada adem¨¢s en un hecho real, cumple desde todas sus vertientes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.