¡°Soy poco glamuroso¡±

El autor de la novela Contarlo todo (Mondadori, 2013) se tapa los o¨ªdos con unos buenos auriculares para escuchar m¨²sica cuando escribe. Hasta ahora, cada libro lo redact¨® en ciudades y ordenadores diferentes, y luego de una mudanza, de varias ferias del libro y un viaje a Ayacucho ¡ªen la sierra sur de Per¨²¡ª, tiene ya la estructura de su siguiente novela. En estos d¨ªas el ordenador ya est¨¢ sobre su nuevo escritorio en su piso, en una zona tranquila del distrito de Miraflores, en Lima.

"Soy lo menos glamuroso para esto", comenta Jerem¨ªas Gamboa (Lima, 1975), y muestra los pocos objetos significativos de su rinc¨®n: un par de grabados en blanco y negro de su amigo el artista pl¨¢stico Ramiro Llona y un par de fotos al aire libre de sus tambi¨¦n amigos Dante Pineda y Juan Pablo Arag¨®n, enmarcadas y a color. Una de las obras de Llona se llama justamente Punto de fuga, preparada en 2007 en alusi¨®n al libro de cuentos que public¨® entonces y que hoy tiene edici¨®n latinoamericana. La Feria Internacional del Libro de Lima cerr¨® sus actividades en agosto con la presentaci¨®n del libro, para esa fecha los ejemplares ya se hab¨ªan agotado. Fue uno de los escritores m¨¢s requeridos en el evento.

Ha mostrado el barrio donde
vivi¨® con sus padres hasta
los 24 a?os en un cortometraje de
Luis Miguel Casta?eda

Luego de dos meses en su nuevo piso, tiene ya estantes de color blanco para trasladar su biblioteca ¡ªque est¨¢ en casa de sus padres, en el distrito de San Luis¡ª. Ha colocado el escritorio cerca de una ventana que da a una calle con ¨¢rboles y tr¨¢fico, una excepci¨®n en su ciudad. Cerca, una taza de caf¨¦ y el m¨®vil, al que no presta gran atenci¨®n. Le tiene cari?o a una taza con el personaje del Principito. El narrador ha mostrado el barrio donde vivi¨® con sus padres hasta los 24 a?os en un cortometraje que ya circula en YouTube: La Lima de Gamboa, hecho por Luis Miguel Casta?eda.

Tras promocionar su libro en Argentina en junio y de la Feria del Libro de Lima, ha dictado un taller de cr¨®nica en Cuzco. Visit¨® un par de semanas Ayacucho ¡ªla tierra de su familia¡ª y ha participado, a finales de septiembre, en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires (FILBA), que incluy¨® actividades en paralelo en Montevideo y Santiago de Chile. A Gamboa le toc¨®, adem¨¢s de la capital argentina, Uruguay.

El escritor dedica parte de las ma?anas a responder correos electr¨®nicos, actualiza sus dos muros de Facebook y, aunque su editorial no le ha preguntado cu¨¢ndo presentar¨¢ el original de su tercer libro, al volver de Ayacucho ya ha logrado dise?ar esa nueva historia: una saga que ocurre en la ciudad que se hizo conocida en la d¨¦cada de los ochenta por el surgimiento del grupo terrorista Sendero Luminoso.

Cuando le¨ª Tr¨®pico
de C¨¢ncer me impresion¨® que Miller pod¨ªa escribir donde estuviera,
llevaba su m¨¢quina
a todos lados

Desde principios de a?o los s¨¢bados escribe columnas para el diario El Comercio de Lima. Los primeros meses alud¨ªa a problemas que atraviesan las mujeres en la secci¨®n de Opini¨®n. "Me indignan algunas cosas que les pasan a las mujeres. La idea surgi¨® un d¨ªa conversando con Mariana [su pareja, dramaturga peruana], ning¨²n hombre compart¨ªa su visi¨®n sobre el mundo femenino y alguien ten¨ªa que hacer esto". En otras plante¨® comentarios sobre pol¨ªtica peruana, un campo siempre al margen del bien p¨²blico. Ahora escribe en la secci¨®n de Cultura, un tema que conoce, ya que por varios a?os lo cubri¨® como periodista.

En la columna m¨¢s reciente, por contraste con el mecenazgo del que fue testigo en la FILBA, comenta su sorpresa ante "la enorme y encomiable inversi¨®n del Estado peruano" enviando una comitiva de cerca de 30 escritores a Bogot¨¢, y su ausencia, casi total, en el apoyo a las ferias del libro en ciudades del interior del pa¨ªs. "No cabe duda de que la proyecci¨®n internacional de la literatura peruana tiene un correlato en el interior al que no podemos mantenernos indiferentes", opina. Destaca que en noviembre se celebrar¨¢ la primera feria en Cuzco, el coraz¨®n del sur andino.

En agosto, Gamboa sent¨ªa que si no creaba su espacio de trabajo no iba a concretar su nueva obra. "Estoy con la impresi¨®n de que si no tengo un rinc¨®n no voy a tener libro, aunque el segundo, Contarlo todo, lo termin¨¦ en cualquier lugar. Cuando le¨ª Tr¨®pico de C¨¢ncer me impresion¨® que Miller pod¨ªa escribir donde estuviera, llevaba su m¨¢quina a todos lados".

En estos d¨ªas, no solo tiene pendiente mudar su biblioteca, tambi¨¦n, terminar de acomodar la habitaci¨®n del beb¨¦, Octavia, pues ser¨¢ padre, por primera vez, en pocas semanas.