Una noche dura
Emilio Lled¨®, Elvira Lindo y Luis Garicano trataron de analizar la evoluci¨®n demogr¨¢fica, pero el formato del programa que presenta Ana Pastor impidi¨® comentar con amplitud el tema
Fue una noche dura. Primero lleg¨®?Salvados sobre el comportamiento del Gobierno, de los gobiernos ¡ªautonom¨ªas incluidas¡ª tras tres accidentes terribles: el del vuelo JK5022 de Spanair, el del Yak 42 y el del Alvia de Santiago. Poco m¨¢s que a?adir a lo que mostraron y demostraron las correspondientes asociaciones de v¨ªctimas. No se puede caer m¨¢s bajo: todas las autoridades afectadas y responsables pol¨ªticos eludieron el bulto de manera miserable, y muy especialmente el ministro de Defensa entonces, Federico Trillo, que desde su lamentable comportamiento en el accidente del Yak 42 goza de un exilio dorado al frente de la embajada de Espa?a en el Reino Unido como premio a la indignidad.
Despu¨¦s vino El objetivo, programa que se dedic¨® especialmente a analizar el proceso de envejecimiento de la poblaci¨®n espa?ola, un proceso que en 2015 producir¨¢ m¨¢s fallecimientos que natalicios. El fil¨®sofo Emilio Lled¨®, la escritora Elvira Lindo y el economista Luis Garicano trataron de analizar desde sus respectivas perspectivas la evoluci¨®n demogr¨¢fica, y digo trataron porque el formato del programa que dirige y presenta Ana Pastor les impidi¨® comentar con la amplitud que merec¨ªa el tema.
El programa consiste en espacios breves, montones de estad¨ªsticas, subsecciones varias y muchos palos a tocar, de tal manera que invitar a un personaje espl¨¦ndido como Lled¨® para que opine sobre la vejez es una demostraci¨®n de c¨®mo se puede desperdiciar la sabidur¨ªa acumulada por el profesor en aras de no se sabe qu¨¦. Lo explic¨®, tambi¨¦n muy brevemente, y muy bien, Elvira Lindo: "?Para qu¨¦ queremos tantos viejos sabios si no los vamos a utilizar?". Vivimos la exaltaci¨®n social de la juventud ¡ªincluso de la infancia: no hay nada m¨¢s que ver la publicidad televisiva de los autom¨®viles¡ª al mismo tiempo que les negamos un futuro laboral digno. De igual modo, vivimos en una cultura de la televisi¨®n en la que cinco minutos de charla distendida e inteligente es un exceso.
Luis Garicano, probablemente el ¨²nico que atend¨ªa al diluvio de datos sobre lo que iba a ser Espa?a dentro de 50 a?os, explic¨® lo que ya intu¨ªamos: que las pensiones se reducir¨¢n. Lindo apunt¨® que el descenso de la natalidad estaba directamente relacionado con la falta de expectativas y esperanza de una vida mejor. Lled¨® nos dej¨® una hermosa definici¨®n: "Somos lo que hemos sido. La memoria hist¨®rica es la esencia de la vida", para rematar su breve intervenci¨®n con una rotunda afirmaci¨®n: "La riqueza de un pa¨ªs no est¨¢ en la econom¨ªa sino en la cultura". No se diga m¨¢s.
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