Fuego sobre Clint Eastwood y su taquillera ¡®El francotirador¡¯

Con Eastwood lleg¨® el esc¨¢ndalo. Su ¨²ltima pel¨ªcula, El francotirador, que se estrena en Espa?a el 20 de febrero, se ha convertido en el test de Rorschach de una industria que no se acaba de decidir si el filme es un panfleto patri¨®tico o un alegato sobre las consecuencias de la guerra. Un reflejo de la supremac¨ªa blanca y machista en Hollywood o el retrato de la vida de los soldados estadounidenses. En concreto de uno, Chris Kyle, condecorado con cinco medallas al valor y otros honores por ser el francotirador m¨¢s mort¨ªfero del ej¨¦rcito de los EE UU con 160 muertes confirmadas a sus espaldas. ?Un h¨¦roe o un asesino? ¡°Yo ni tan siquiera la enmarcar¨ªa como una pel¨ªcula de guerra¡±, afirma a este diario Bradley Cooper, su protagonista. ¡°Queda para el espectador tener su propia opini¨®n tras verla. El arte es subjetivo y puede ser interpretado de muchas formas. Pero el mundo es muy peque?o para que, a estas alturas, la gente no sepa diferenciar lo que es propaganda de lo que no¡±.

Los Oscar, acusados de racistas por apoyar este drama en lugar de ¡®Selma¡¯

Mientras las salas se llenaron con un ¨¦xito inesperado para esta producci¨®n, de 51 millones de euros de presupuesto, que en su primer fin de semana recaud¨® 90,47 millones de euros, una de las grandes vallas publicitarias del filme en el coraz¨®n de Los ?ngeles apareci¨® con la palabra ¡°Asesino¡± pintada encima del rostro de Cooper. Y su sorprendente presencia en la lista de candidatos al Oscar, con seis inesperadas selecciones, incluida mejor pel¨ªcula y mejor actor para Cooper, llega rodeada de cr¨ªticas que aseguran que el conservadurismo blanco de esta obra echa a¨²n m¨¢s sal a la herida abierta por la ausencia casi total de contendientes negros en esta edici¨®n de los galardones. Una pol¨¦mica que ha llegado a las redes sociales con sendos mensajes de Michael Moore y de Seth Rogen: el primero llamando ¡°cobardes¡± a los francotiradores y el segundo comparando la pel¨ªcula a esa otra de propaganda nazi que muestra el final de Malditos bastardos. Ambos se tuvieron que retractar (sus palabras fueron sacadas de contexto, dijeron) mientras que la excandidata republicana a la vicepresidencia, Sarah Palin, apoy¨® el filme con un ¡°Dios defienda a las tropas¡±.

Eastwood, de quien a¨²n se recuerdan sus ataques contra Obama en la ¨²ltima convenci¨®n republicana, prefiere calmar el debate recordando que un h¨¦roe es alguien que est¨¢ ¡°ah¨ª cuando se le necesita¡±. En el caso de Kyle, el realizador recuerda que el soldado sirvi¨® a su pa¨ªs ¡°aunque alguna vez dud¨® si estar¨ªa haciendo lo correcto¡±. ¡°Pero quisimos hacer una pel¨ªcula sobre un hombre y no sobre una guerra¡±, a?adi¨® Eastwood sobre un conflicto, el de Irak, con el que nunca estuvo de acuerdo. La pel¨ªcula se basa en la autobiograf¨ªa de Kyle, editada en Espa?a por Editorial Cr¨ªtica. Cooper no se posiciona: ¡°Cualquier veterano, de cualquier guerra, de cualquier pa¨ªs puede sentir una vinculaci¨®n con el filme¡±. Kyle fue asesinado en Estados Unidos en 2013 por un exmarine.

A juzgar por el ¨¦xito, sus palabras han sido prof¨¦ticas. Sorprende m¨¢s, dado el fracaso de otros intentos de llevar la misma guerra a las pantallas. El francotirador se qued¨® con candidaturas que se esperaban para Selma (estreno en Espa?a, el 27 de febrero), filme centrado en una de las mayores protestas por las libertades civiles de Martin Luther King y dirigido por la afroamericana Ava DuVernay. Se habla de racismo en una Academia donde el 93% de sus miembros son blancos; el 76%, hombres, y la edad media supera los 63 a?os.

Como dijo Ellen DeGeneres, hace un a?o, los Oscar s¨®lo pod¨ªan acabar o con la victoria de Doce a?os de esclavitud o ¡°todos siendo unos racistas¡±. Tan s¨®lo 12 meses m¨¢s tarde la pol¨¦mica nace porque los 20 candidatos de las categor¨ªas interpretativas son blancos, algo que no ocurr¨ªa desde 1998. En Internet empezaron a circular fotograf¨ªas de oscarizados negros con carteles que describ¨ªan los papeles por los que ganaron el premio, en su mayor¨ªa ¡°esclavos¡± o ¡°criadas¡±. Como asegura la revista Variety, ya que el 14% de la poblaci¨®n estadounidense es negra, si el cine reflejara la sociedad de los 323 filmes a competici¨®n, 45 tendr¨ªan que haber sido negros. A su vez, un 13% deber¨ªan de ser pel¨ªculas sobre hispanos. Como recuerda la misma publicaci¨®n exigir su lugar entre los candidatos en funci¨®n de su raza es un insulto para los que est¨¢n seleccionados aunque sirve como punto para la reflexi¨®n y para so?ar con una industria que diera m¨¢s oportunidades a la diversidad.