Muere Sergio Blanco, cantante de Sergio y Est¨ªbaliz y Mocedades

Tal vez para las nuevas generaciones de oyentes formaba parte de algo vetusto, pero Sergio Blanco (Bilbao, 1948), que perteneci¨® al d¨²o Sergio y Est¨ªbaliz y al grupo Mocedades, era una de las voces m¨¢s reconocibles de la primera gran ¨¦poca del pop espa?ol, aquella que se desarroll¨® a caballo entre la dictadura de Franco y la llegada de la democracia. Canciones como T¨² volver¨¢s o Piel, junto a su esposa Est¨ªbaliz, o B¨²scame, en Mocedades, fueron una especie de himnos sentimentales para toda una generaci¨®n que vivi¨® dejando atr¨¢s ya para siempre la Espa?a de traje militar y el NODO.

Seg¨²n ha informado a la agencia Efe su hija Allende, el cantante ha fallecido a las 6.30 en el hospital San Camilo de Tres Cantos, en Madrid. Arrastraba una larga enfermedad, a la que combat¨ªa con un tratamiento y que le hab¨ªa obligado a dejar los escenarios con El Consorcio, la formaci¨®n de amigos junto con Est¨ªbaliz, I?aki Uranga o Carlos Zubiaga.

Licenciado en Ingenier¨ªa Industrial, despu¨¦s de haber pasado por las aulas de ingenier¨ªa aeron¨¢utica, su carrera como cantante comenz¨® en 1968 en el grupo Voces y guitarras, junto a Estibaliz Uranga. Fue el antecedente de Mocedades, que fund¨® por entonces Roberto Uranga, quien muri¨® en 2005. Con el conjunto vasco, que basaba su repertorio en el poder¨ªo vocal, grab¨® tres discos y tuvo su mayor ¨¦xito con la canci¨®n B¨²scame.

Pero en 1972 decidi¨® abandonar Mocedades y formar con Est¨ªbaliz Uranga, que tambi¨¦n era miembro del grupo vasco, el d¨²o Sergio y Est¨ªbaliz. Ambos tendr¨ªan que ver c¨®mo sus antiguos compa?eros representaban a Espa?a en el festival de Eurovisi¨®n con Eres t¨², que qued¨® en segundo lugar y ser¨ªa a la postre una de las composiciones en castellano m¨¢s emblem¨¢ticas y exitosas de nuestra historia, llegando a entrar en las listas norteamericanas, aunque pesasen acusaciones de plagio por parte de representantes yugoslavos.

La aventura no les sali¨® tan mal. Sergio y Est¨ªbaliz se convirti¨® r¨¢pidamente en un d¨²o reconocible y con capacidad para tener su propio lugar. En 1975, el mismo a?o en el que ambos se casaron, representaron a Espa?a en Eurovisi¨®n con la canci¨®n T¨² volver¨¢s, que qued¨® en d¨¦cima posici¨®n. A decir verdad, segu¨ªan las mismas huellas de los exitosos Mocedades. Como sus excompa?eros para Eres t¨², el d¨²o cont¨® con el compositor, arreglista y productor Juan Carlos Calder¨®n para lanzar sus primeros grandes elep¨¦s Sergio y Estibaliz y Piel y triunfar con T¨² volver¨¢s. La existencia de Calder¨®n fue fundamental, como tantas veces en aquellos a?os. Con su aire folk y excelente producci¨®n, al estilo de la ¨¦poca anglosajona del Brill Building, T¨² volver¨¢s lleg¨® al n¨²mero uno en Espa?a y resiste el paso del tiempo por su brillo interno.

En 1976, grabaron un disco dedicado a composiciones populares hispanoamericanas llamado Canciones Sudamericanas. Fue una h¨¢bil jugada: se convirtieron en un fen¨®meno de masas en Latinoam¨¦rica tras grabar canciones de Argentina, Per¨² o Colombia. Pero, en el agitado per¨ªodo de los setenta, tambi¨¦n hab¨ªa parte de concienciaci¨®n con las causas de aquel continente que luchaba contra los dictadores. De esta forma, se embarcaron en 1979 en el disco y el espect¨¢culo La Misa campesina nicarag¨¹ense, junto a Miguel Bos¨¦, Elsa Baeza, Ana Bel¨¦n o el tr¨ªo Laredo. Trajo bastante controversia porque las letras, si bien ten¨ªan fondo cat¨®lico, ten¨ªan mensajes guerrilleros e inconformistas, alejados de las directrices del Vaticano que promulgaba amor, paz y conformismo.

No les fue igual de bien con su salto al p¨²blico anglosaj¨®n, que acab¨® en fracaso. Con una est¨¦tica m¨¢s alternativa y cantado en ingl¨¦s, el disco Beans pas¨® sin pena ni gloria. Pero el ¨¦xito no les abandonar¨ªa con Agua, con el que volvieron de nuevo a sus or¨ªgenes y con producci¨®n de Juan Carlos Calder¨®n, y, sobre todo, Cuidado con la noche (1985), que, bajo una sobreproducci¨®n de marcado car¨¢cter ochentero, conten¨ªa dos temas c¨¦lebres para sus seguidores como Cantinero de Cuba y Te quiero y ya.

Tras la tibia acogida de De par en par (1989) y Planeta tierra (1992), el d¨²o desapareci¨® para formar un a?o despu¨¦s, con algunos antiguos componentes de Mocedades, como Amaya e I?aki Uranga (ambos hermanos de Est¨ªbaliz) y con Carlos Zubiaga, el grupo El Consorcio, con el que grabaron siete discos, el ¨²ltimo en 2008 titulado Querido Juan.

Hab¨ªa mucha nostalgia mal entendida en la obra del El Consorcio, una formaci¨®n que miraba s¨®lo a los ojos de una generaci¨®n ya adulta. Pero conviene recordar que hubo una vez una ¨¦poca de pop en Espa?a que nada ten¨ªa que ver ni con la radiof¨®rmula ni los dictados de las tendencias actuales. Fue la ¨¦poca en la que nac¨ªa una nueva sociedad que escuchaba las canciones de Sergio y Est¨ªbaliz o Mocedades para su recreo sentimental. Los mismos a?os en los que lleg¨® la televisi¨®n en color.