Otro ¡®Crash¡¯ de Haggis
El director cae en la tendencia al subrayado en la puesta en escena
Despu¨¦s de Vidas cruzadas, parec¨ªa casi temerario intentar componer una pel¨ªcula sobre existencias m¨¢s o menos paralelas o perpendiculares que compartieran un subtexto com¨²n porque la de Robert Altman parec¨ªa la obra definitiva en la materia. Y, sin embargo, unos a?os despu¨¦s lleg¨® Paul Thomas Anderson con Magnolia y sublim¨® el concepto. Que la que acabase llev¨¢ndose el Oscar a la mejor pel¨ªcula fuera la posterior Crash, aparte de quedar para los anales del desprop¨®sito de los premios, marc¨® para siempre la carrera de Paul Haggis, veterano escritor de televisi¨®n que en apenas dos a?os hab¨ªa visto c¨®mo le llegaba la gloria tras a?os de trabajo en segundo plano con el pol¨¦mico galard¨®n para Crash y su gui¨®n para Million Dollar Baby.
Con una obra irregular desde entonces, solventes libretos para Clint Eastwood (Banderas de nuestros padres, Cartas desde Iwo Jima) y un par de jamesbonds (Casino Royale y 007: Quantum of solace), adem¨¢s de la notable En el valle de Elah y la insufrible Los pr¨®ximos tres d¨ªas, estas como director, Haggis regresa ahora al universo coral de vidas cruzadas con En tercera persona, donde todos los defectos de Crash se agudizan y se manifiestan otros nuevos.
EN TERCERA PERSONA
Direcci¨®n: Paul Haggis.
Int¨¦rpretes: Liam Neeson, Olivia Wilde, Adrien Brody, Mila Kunis, James Franco.
G¨¦nero: drama. EE?UU, 2013.
Duraci¨®n: 137 minutos.
Entre los antiguos: la tendencia al subrayado en la puesta en escena, por otro lado, entre plana y torpe cuando, en realidad, parece jugar al clasicismo, y el excesivo recurso a la casualidad para conjugar las tramas y obtener los giros de gui¨®n. Entre los nuevos: un tremendismo barriobajero alrededor del subtexto com¨²n, las muertes infantiles y los efectos en sus padres; la absoluta falta de verosimilitud en buena parte de las historias, sobre todo en la de Adrien Brody y la gitana rumana; el absurdo comportamiento de demasiados personajes; un abominable toque mis¨®gino, y la m¨¢s cargante utilizaci¨®n en el cine reciente de una banda sonora, obra del reputado Dario Marianelli.
¡°Tu primera novela era cruel y cruda, sin piedad; le¨ªa tus galeradas cubierto en sudor. La segunda, no tanto. La tercera, la cuarta... peores a¨²n. Ahora tienes personajes aleatorios con los que das excusas para tu vida. Das verg¨¹enza¡±, le dice en una secuencia un editor al personaje del escritor interpretado por Liam Neeson. Ya.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.