¡°En Alemania, la financiaci¨®n de la TV p¨²blica no est¨¢ ligada a un Gobierno¡±
El periodista del canal internacional germano explica su visi¨®n del modelo p¨²blico del pa¨ªs
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Un dirigente democristiano de Baviera llam¨® a la redacci¨®n de la cadena p¨²blica alemana ZDF en 2012 para pedir que se cancelara la cobertura de un congreso del Partido Socialdem¨®crata (SPD, su rival). El redactor jefe del medio no dud¨® un minuto en hacer p¨²blicas las presiones. El pol¨ªtico de la CSU, Hans Michael Strepp, tuvo que dimitir. ¡°Fue un gran esc¨¢ndalo¡±, recuerda Carlos Delgado, jefe de programas de televisi¨®n en espa?ol de la Deutsche Welle, el servicio de radiodifusi¨®n internacional de Alemania, vinculado a la ARD, la primera empresa de televisi¨®n p¨²blica del pa¨ªs, que tiene un canal de ¨¢mbito nacional, Das Erste (la Primera, en espa?ol), y varias ofertas regionales.
La otra gran empresa estatal es la ZDF (el segundo canal p¨²blico). Son independientes una de la otra. Viven de un canon que pagan mensualmente los telespectadores. La ZDF alcanz¨® en 2014 una cuota de pantalla del 13,3%; Das Erste el 12,4% (el porcentaje se duplica si se suman las programaciones regionales, seg¨²n el consorcio) y la RTL privada, un 10,3%. En una conversaci¨®n telef¨®nica desde Berl¨ªn, Delgado, de 47 a?os, explica su visi¨®n del modelo p¨²blico alem¨¢n.
Pregunta. ?Qu¨¦ imagen tiene la televisi¨®n p¨²blica entre los alemanes?
Respuesta. Tiene una muy buena fama, sobre todo los canales de noticias. La mayor¨ªa de los ciudadanos los considera una garant¨ªa de fiabilidad y credibilidad. El informativo de la noche, Tagesschau [noticias de televisi¨®n, en espa?ol] tiene los mayores ¨ªndices de audiencia entre los programas de noticias.
P. ?Esa calidad de la que habla justifica que los propietarios de una televisi¨®n tengan que pagar 17,50 euros al mes?
R. Evidentemente, hay una divergencia entre el prestigio de los medios p¨²blicos y la predisposici¨®n a pagar esa cuota. Hay un debate abierto sobre si esa tasa es constitucional. Pero no a gran escala. Hay que tener en cuenta que a ese canon por la televisi¨®n, se une otro por tener un aparato de radio, un ordenador¡ Las televisiones p¨²blicas se han encontrado con el rechazo de sectores como el que ha lanzado las protestas anti Islam en Alemania. Aseguran que los medios alemanes tergiversan las informaciones y optan por otros canales como Russia Today, que emite 24 horas en alem¨¢n. Pero son minor¨ªa, entre la poblaci¨®n general los medios p¨²blicos tienen un enorme prestigio.
¡°El principal informativo de la noche tiene el mayor ¨ªndice de audiencia entre los programas de noticias¡±
P. ?Por qu¨¦ la mayor¨ªa de los alemanes sigue creyendo en la independencia de la televisi¨®n p¨²blica?
R. La financiaci¨®n no est¨¢ ligada a un Gobierno. Un organismo aut¨®nomo recolecta el canon y lo gestiona. Se reparte entre los canales p¨²blicos. Y el presupuesto es muy alto. En el consejo de administraci¨®n est¨¢n representados pol¨ªticos, sindicatos, sociedad civil, l?nder, pero a nadie se le ocurre presionar a un periodista.
P. Cuando el Gobierno cambia, ?qu¨¦ pasa con el consejo, los jefes de informativos, los presentadores de informativos, etc¨¦tera?
R. En Alemania no se cambian las c¨²pulas televisivas cuando cambian los Gobiernos. Si se presiona a las redacciones, suele salir a la luz p¨²blica. No solo est¨¢ el caso del pol¨ªtico de Baviera que tuvo que dimitir tras intentar presionar a un redactor jefe de la ZDF. Los intentos de intimidaci¨®n al diario sensacionalista Bild tambi¨¦n pasaron una fuerte factura a Christian Wulff, que dimiti¨® como presidente de la Rep¨²blica federal en 2012 por ese y otros esc¨¢ndalos [de los que finalmente result¨® absuelto].
P. Su canal provee noticias al exterior, y en su caso en espa?ol. ?Se nota mucho la diferencia entre Alemania y Espa?a y Am¨¦rica Latina?
R. Nunca he trabajado en Espa?a como periodista. Y mi visi¨®n es menos cercana. Pero en el caso de Am¨¦rica Latina, las ofertas de televisi¨®n all¨ª suelen seguir fielmente y descaradamente la l¨ªnea oficial de los gobiernos de turno, lo que nos ha dejado mucho margen para crecer. Por un lado, valoran los productos hechos en Alemania, con un tipo de televisi¨®n m¨¢s austera, y por otro creo que se percibe nuestra independencia del Gobierno.
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