El ¡®Perdidos¡¯ para ni?os
'Gravity Falls' abandera la nueva ola de dibujos televisivos que se toman en serio
Viajes en el tiempo. Y fantasmas de pueblo. Y sirenos espa?oles. Y luchadores de videojuego. Y gnomos que vomitan arco¨ªris. Y manotauros. Y dinosaurios. Y¡ Repasar Gravity Falls es como darle patente de corso a un chaval de cinco a?os para que le diga a uno ¡°las cosas que molan¡±. Pero el chaval responsable de tal lista, Alex Hirsch (Piedmont, California, 1985) tiene 29 a?os y es productor, guionista, dibujante de storyboards y doblador de esta serie de televisi¨®n de Disney Channel con millones de espectadores. Su misi¨®n, contar el veraneo de dos hermanos gemelos (Dipper y Mabel) en compa?¨ªa de su estramb¨®tico t¨ªo Stan con un pueblito americano en el que pasan cosas muy raras. Una premisa que se basa en lo que Hirsch mejor conoce: ¡°Yo tambi¨¦n tengo una hermana gemela [Ariel Hirsch] y de ni?os vivimos algo muy curioso. Pas¨¢bamos los veranos en casa de familiares, en la naturaleza. Cuando est¨¢bamos en casa, nos sac¨¢bamos de quicio. Pero all¨ª, solos y aburridos, encontramos una manera de conocernos y comunicarnos mucho mejor. Y de hacernos los mejores amigos¡±.
Pero Gravity Falls no es una mera serie de capitulillos sueltos con gracietas sobrenaturales. Es una serie con giros de guion, desarrollo profundo de personajes y sus motivaciones, humor tanto de plum¨ªn como de brocha y una gran historia que enhebra todos sus episodios con el fin del mundo como tel¨®n de fondo. De hecho, hay hasta una gran cuenta atr¨¢s en una m¨¢quina apocal¨ªptica que tiene como claro modelo a Perdidos. Gravity Falls es, en resumen, una serie con la misma ambici¨®n que las que pueblan esta edad dorada en la peque?a pantalla hollywoodiense. Y supone un golpe de tim¨®n total a lo que los dibujos animados han ambicionado desde siempre.
Hirsch cree que la revoluci¨®n se ha gestado alrededor de su colega de universidad y de animaci¨®n, Pendleton Ward, creador de Hora de aventuras, la serie animada que ha dinamitado el sector: ¡°Somos parte de una misma generaci¨®n. Nacimos en los 80 y nos criamos en los 90. Y en los 90, aunque ten¨ªas La sirenita, tambi¨¦n ten¨ªas Ren & Stimpy o el anime japon¨¦s. Nos bebimos semejante c¨®ctel de referencias que creo que nuestras series son consecuencia directa de esa infancia¡±.
En esa ni?ez de omn¨ªvoro cultural, uno de los bocados m¨¢s selectos fueron los videojuegos. En el cap¨ªtulo 10 de la primera temporada, Luchadores de Lucha, los gemelos se enfrentan a un musculoso y pixelado gladiador que parece salido del Street Fighter 2 (el juego de peleas que arrasaba en las recreativas en los 90). En Soos y la chica de verdad, el tercero de la segunda temporada, uno de los secundarios de la serie se enamora de la protagonista anime de un videojuego. Cuando se le saca el tema, Hirsch no puede evitar las risas y el lanzarse a describir uno de los momentos m¨¢s frikis de su ni?ez: ¡°Era mucho mejor jugando videojuegos que haciendo amigos [r¨ªe]. A los 12 a?os, la edad de mis protagonistas, dise?¨¦ en papel un videojuego protagonizado por dos gemelos y se lo mand¨¦ a Nintendo. Cuando me lleg¨® el sobre con la respuesta, recuerdo olerlo y mirarlo como si viniera de Dios [r¨ªe]. Lo que pon¨ªa era: ¡®Gracias por su inter¨¦s y enviar su carta a Nintendo Magazine¡±.
Pero no solo hay referencias cruzadas a lo que Hirsch amaba en la infancia. Hay un trabajo evidente de reconstrucci¨®n de su propia vida, la fuente de inspiraci¨®n para este creador: ¡°Me di cuenta de que si hablaba de mi familia, jam¨¢s se me acabar¨ªan las historias. Creo que el arte deber¨ªa inspirarse siempre en las experiencias de la vida¡±. Y hay tambi¨¦n cr¨ªtica social disfrazada de comedia. Dos de los secundarios que pueblan Gravity Falls son una pareja de polic¨ªas (varonil) que act¨²a precisamente como una pareja (rom¨¢ntica). Cuando se le pregunta por si aqu¨ª sugiere una relaci¨®n homosexual para que los chavales que ven la serie la asuman como natural, Hirsch rompe a re¨ªr. Cuando se recupera, dice: ¡°Como alguien de Disney, solo puedo comentar a nivel general. Pero s¨ª dir¨¦ que el mundo de Gravity Falls intenta ser divertido, irreverente y sorprendente. Y dejar un poso de optimismo. Y creo que es ese optimismo lo que nos hace salirnos con la nuestra al arriesgarnos con ciertos temas¡±.
C¨®mo hacer un buen chiste
¡°Pendleton Ward, a quien respeto profundamente, lo dijo mejor que nadie: ¡®Intenta hacer un chiste inteligente. Y, si no te sale, haz uno muy est¨²pido. Porque son los que funcionan¡¯. Y dio en el clavo. Inteligente no significa siempre divertido. A veces hacer un buen chiste es encontrar una situaci¨®n que no tiene que ser interpretada por tu c¨®rtex cerebral. La clave para nosotros es la diversidad. Tener todos los tipos de humor en un solo mundo. Un men¨² completo de comedia. La comedia se entiende desde las tripas. Y probar si un chiste es bueno es muy f¨¢cil. P¨®nselo en una pantalla a 100 personas. Y si nadie se r¨ªe, pues no funciona¡±.
No creer que los ni?os son idiotas parece resumir bien todo lo que Hirsch, y sus colegas de generaci¨®n, quieren hacer con los dibus: ¡°Cuando le plante¨¦ el show a Disney, les expliqu¨¦ que los cap¨ªtulos ser¨ªan de media hora. Normalmente son de 11 minutos porque se asume que un ni?o no es capaz de mantener su atenci¨®n por m¨¢s tiempo y cambiar¨¢ de canal. Pero creo que los chicos son mucho, mucho m¨¢s listos de lo que asumimos. Y si no mira c¨®mo se leyeron los siete libros de Harry Potter¡±. Como despedida, Hirsch, que tiene una voz suave y juvenil, se atreve a demostrar que es realmente ¨¦l quien dobla al T¨ªo Stan, el gran protagonista de la serie junto a la pareja de gemelos, un cincuent¨®n que se gasta una voz cascada y cazallera.
¡ªCuando quieras, preg¨²ntame algo.
¡ª?Qu¨¦ tal ha ido el d¨ªa, T¨ªo Stan?
¡ªPues hoy he madrugado para hablar con un periodista espa?olito y me ha preguntado unas cosas muy raras. No s¨¦. Me quiero volver a la cama.
Y s¨ª. Suena exactamente como el T¨ªo Stan.
Un cerdo para Ariel
Ni un perro, ni un gato, ni un pez, ni un periquito. Ni siquiera el cl¨¢sico h¨¢mster. Lo que Mabel, uno de los gemelos protagonistas de Gravity Falls, quiere como mascota es un cerdo. Y la historia de por qu¨¦ lo quiere es inaudita: "A los 10 a?os, mi hermana comenz¨® a tener una obsesi¨®n. Cuando le preguntabas: ?Qu¨¦ quieres por tu cumple? Siempre contestaba lo mismo: 'Cerdos'. As¨ª que le compr¨¢bamos solo cosas con cerdos: camisetas con cerdos, zapatillas cerdito, papel de pared con cerdos, s¨¢banas con cerdos, mu?ecos de cerditos, cromos de cerdos¡ As¨ª que coleccion¨® tantas cosas as¨ª que ten¨ªa una especie de santuario porcino. Estanter¨ªas llenas de cosas con cerditos. Parec¨ªa que hab¨ªa perdido la cabeza. Lo cierto es que deseaba tener un cerdo como mascota. Pero habiendo tan poco espacio en nuestro piso de California era imposible". Y por eso Hirsch decidi¨® darle a su protagonista el cerdo, para que Ariel Hirsch pudiera tener, al fin, su querida mascota.
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