El aragon¨¦s m¨¢s querido

El 10 de marzo, hubiera cumplido Jos¨¦ Antonio 80 a?os. Y, asombrados del paso del tiempo, a m¨¢s de 50 meses de su muerte, le recordamos a¨²n emocionados al o¨ªr sus canciones, que hablan de un mundo rural en r¨¢pida consunci¨®n, de sentimientos hondos, de penas y esperanzas. Llev¨® la poes¨ªa a miles de personas que, de otro modo, nunca la hubieran conocido. Y su Himno a la Libertad se canta en el mundo hispano con aire de marcha.

Hab¨ªa sido profesor de instituto, adorado por los alumnos; escritor cr¨ªtico y reflexivo (poeta, narrador, columnista, entrevistador), alma desde su fundaci¨®n hasta su cierre de la ya mitificada revista Andal¨¢n (1972-1987), que so?amos desde las rojas arcillas turolenses como un arma de potenciar la democracia y la izquierda, la cultura, el aragonesismo.

Aunque fue reconocido y querido como un gran cantautor, entre los grandes de su generaci¨®n, a¨²n le hizo m¨¢s famoso en toda Espa?a su aparici¨®n en pantalla, serio, calmudo, socarr¨®n, en las televisivas series de Espa?a en la mochila, que no es preciso describir, a¨²n en la retina y el eco. Estuvimos con nuestras esposas en Praga y fue abrumador el saludo de cientos de personas de todo el territorio, por puentes, castillos, iglesias, museos y restaurantes.

En cuanto a su participaci¨®n pol¨ªtica, estuvo brevemente en nuestras Cortes, y luego ocho a?os en el Congreso, trabajando mucho porque en el Grupo Mixto cada uno se cocinaba sus propuestas. Respetado y querido por diputados de todo signo, fue v¨ªctima de escarnios, insultos, desprecios por los peores adalides de la rabia y el odio, de los que solo pudo defenderse con una quevedesca respuesta, que dio la vuelta a nuestro mundo: ¡°?A la mierda!¡±.

Escrib¨ª hace poco que no creo que haya habido nadie tan querido en el largo siglo XX aragon¨¦s como Jos¨¦ Antonio Labordeta. Ya, ya s¨¦: el fervor por Costa, el respeto por Cajal, la admiraci¨®n por Bu?uel. Por eso he dicho querido. El que m¨¢s.

El d¨ªa de san Jos¨¦, con generosa ayuda oficial y privada y el enorme esfuerzo de Juana de Grandes, su viuda, sus tres hijas, un peque?o grupo de sus amigos inauguramos la sede de la fundaci¨®n creada en su memoria, anunciada en un multitudinario concierto en el pasado oto?o. En im¨¢genes que anegan la mirada, muy bellamente dispuestos, est¨¢n su despacho, cado de tantas confidencias y sue?os, las portadas de docenas de libros y discos, las fotos y carteles de recitales inolvidables.

Eloy Fern¨¢ndez Clamente es catedr¨¢tico jubilado de Historia Econ¨®mica y fundador, como Labordeta, de la revista Andal¨¢n. Dirigi¨® la Gran Enciclopedia Aragonesa.