Las estrellas del pop ponen en marcha su ¡®streaming¡¯
Superventas, encabezados por Jay-Z, desaf¨ªan a las grandes plataformas legales de m¨²sica digital
La guerra del streaming ha comenzado. Toda una banda de pesos pesados del mundo del pop, aut¨¦nticos superventas, encabezados por el rapero Jay-Z, se han rebelado en Estados Unidos para desafiar al actual sistema de escucha de m¨²sica sin posibilidad de descarga, controlado por diversas plataformas como Spotify, YouTube, Vevo, Napster, Deezer y XBox Music. En palabras del propio Jay-Z, se trata de un sistema ¡°criminal¡± y por ello ha presentado un nuevo servicio en el que los accionistas son los propios m¨²sicos. Junto a ¨¦l, figura toda una plana mayor del negocio: Beyonc¨¦ (su esposa), Madonna, Alicia Keys, Daft Punk, Jack White, Chris Martin (Coldplay), Kanye West, Nicki Minaj, Rihanna, Deadmau5, Arcade Fire, Calvin Harris, Jason Aldean, J. Cole o Usher.
Los 17 son copropietarios de Tidal, un sistema abierto a todos los creadores que lo deseen y que competir¨¢ contra el sector actual. A diferencia de Spotify, la principal plataforma mundial de streaming, Tidal solo funciona por suscripci¨®n de pago, con una cuota de unos nueve euros al mes, aunque existe una opci¨®n de alta calidad por unos 19 euros. Consta de un cat¨¢logo inicial de 25 millones de canciones, 75.000 v¨ªdeos musicales, listas de reproducci¨®n, identificador de melod¨ªas y recomendaciones de cr¨ªticos musicales.
Se sab¨ªa que el multimillonario rapero, ejecutivo de su propia compa?¨ªa de m¨²sica y merchandising Roc Nation, estaba detr¨¢s de montar algo grande. En enero, compr¨® por 52 millones de euros la empresa sueca Wimp, que le ha dado acceso a la plataforma Tidal, que nace con la filosof¨ªa de que el artista es el centro de todo el negocio, aunque no han dado a¨²n datos de c¨®mo se repartir¨¢ el dinero. ¡°Creemos que preservar el valor de la m¨²sica y asegurar una industria fuerte y saludable para los pr¨®ximos a?os es importante para todos¡±, asegur¨® Alicia Keys durante la presentaci¨®n, el lunes en Nueva York. ¡°Deseamos cambiar para siempre el curso de la historia de la m¨²sica¡±, sentenci¨® Beyonc¨¦.
Por lo pronto, este movimiento de los m¨²sicos supone un ¨®rdago y, en palabras de Jay-Z, ¡°un cambio de reglas¡±. Sin embargo, los que a priori son sus competidores no han mostrado ninguna preocupaci¨®n con Tidal. ¡°Damos la bienvenida a cualquier servicio que d¨¦ la oportunidad a la gente de escuchar m¨²sica en un entorno legal. Vamos a seguir trabajando con cada artista para asegurar que la m¨²sica favorita de nuestros usuarios permanezca con nosotros¡±, reconoce Javier Gayoso, director de Spotify Espa?a. Esta firma no tienen conocimiento de que esos m¨²sicos u otros se vayan de su servicio, como antes han hecho superestrellascomo Taylor Swift, quien se quej¨® de un injusto acuerdo de pago a los creadores, o el propio Jason Aldean. Adem¨¢s, Garth Brooks, Bob Seger, Pete Towshend, Thom Yorke, King Crimson, Tool y, sobre todo, The Beatles suponen ausencias muy pesadas del cat¨¢logo de la plataforma, que tiene 60 millones de usuarios activos mensuales, de los cuales 15 millones son de pago.
Spotify siempre ha mantenido una pol¨ªtica opaca con respecto al dinero que destina a los m¨²sicos. De hecho, llega a distintos acuerdos seg¨²n el sello discogr¨¢fico, que luego reparte los ingresos con sus artistas. Pero Gayoso recuerda que hace tiempo que ya se inform¨® de que abonan los derechos en un porcentaje del 70% de los ingresos totales (publicidad y cuotas de suscripci¨®n). Desde su lanzamiento en Suecia en 2008, Spotify ha proporcionado m¨¢s de 1.861 millones de euros para los propietarios de derechos en todo el mundo, precisa su director en Espa?a: ¡°Ayudamos a que la industria musical crezca en cada pa¨ªs donde nos implantamos¡±.
¡°Est¨¢ muy bien que haya m¨¢s plataformas. Hacen que crezca la tarta. Nuestro gran enemigo es realmente la pirater¨ªa¡±, opina Leo Nascimento, director en Espa?a de Deezer, que en todo el mundo tiene 16 millones de usuarios, de los cuales seis millones pagan. ¡°Nos interesa que la gente se interese por la m¨²sica en el entorno digital. Tenemos mucho que crecer todos. Pero el hecho de que 17 est¨¦n ah¨ª no quiere decir que est¨¦ todo el mundo de la m¨²sica¡±, apostilla. Aunque avisa: ¡°Dentro de dos a?os, la competici¨®n ser¨¢ m¨¢s grande. Ya nos pelearemos m¨¢s tarde, pero ahora lo vemos como un compa?ero de lucha¡±.
A la espera de que esa competici¨®n se vuelva m¨¢s cruenta, la era del streaming ya ha llegado. En Espa?a, seg¨²n el ¨²ltimo informe anual de Promusicae, la patronal nacional de los productores de m¨²sica, que abarca al 90% del sector, este modo de escucha le ha supuesto a las discogr¨¢ficas unos ingresos de 47,2 millones, (un 36,3% m¨¢s que los 34,6 millones obtenidos en el caso de 2013), sustentado en gran medida en un crecimiento en torno al 30% en el n¨²mero de suscriptores. El auge de este tipo de consumo coincide con el estancamiento de las descargas de canciones o ¨¢lbumes en iTunes o la ca¨ªda de las ventas f¨ªsicas.
Desde las discogr¨¢ficas, ven estos movimientos desde la barrera. Las fuentes consultadas por EL PA?S dejan un claro mensaje: cuanta m¨¢s competencia haya entre las plataformas de streaming, m¨¢s calidad tendr¨¢n sus productos, esto es, las canciones de sus m¨²sicos. El futuro, que cada d¨ªa llega m¨¢s r¨¢pido en el mundo digital y en especial en el de la m¨²sica, dir¨¢ qu¨¦ papel jugar¨¢n los m¨²sicos: si el de creadores, como hasta ahora, o tambi¨¦n el de gestores, tal y como quieren Jay-Z y todo su s¨¦quito.
Babelia
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