Seguimos los pasos de The Beatles a los 50 a?os de su gira en Espa?a
La banda brit¨¢nica que emula a los fabulosos de Liverpool aterriza en Madrid para recrear al detalle la hist¨®rica gira beatle en Espa?a
Aquel d¨ªa tambi¨¦n hac¨ªa un sol de justicia en Madrid, aunque ni Europa estaba pendiente de Grecia ni en Estados Unidos estaban legalizados los matrimonios homosexuales ni en Espa?a hab¨ªa democracia. Todo era muy distinto pero tres cosas siguen medio siglo despu¨¦s imbatiblemente iguales: el sol de justicia madrile?o de verano, la reina Isabel II al frente de la monarqu¨ªa brit¨¢nica y los Beatles. La banda m¨¢s famosa y planetaria sigue siendo la m¨¢s famosa y planetaria, tanto que incluso cuatro asombrosos imitadores que responden al nombre de The Bootleg Beatles generan expectaci¨®n suficiente como para que su visita a Espa?a, emulando aquella hist¨®rica de los Fab Four en 1965, no pase desapercibida. Como hicieron John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr, estos dobles tocar¨¢n en la madrile?a plaza de Las Ventas el jueves 2 de julio con Los Pekenikes ¨Clos mismos teloneros que tuvieron medio siglo atr¨¢s los Beatles- y el viernes 3 en el?Sant Jordi Club de Barcelona con Los S¨ªrex ¨Cque tambi¨¦n les acompa?aron en su d¨ªa-. El recurso de la nostalgia en la m¨²sica rock sigue siendo poderoso pero cuando se trata de los Beatles es mucho m¨¢s que eso: es inexplicable.?
Llegada a Madrid (14.30 hora espa?ola)
El r¨¦gimen franquista procur¨® que la presencia de ¡°los melenudos¡±, tal y como fueron calificados d¨ªas antes de su llegada, tuviese la menor resonancia posible entre la juventud espa?ola, pero eso no quit¨® para que su primera (y a la postre ¨²nica) gira fuera cubierta por la prensa oficial. En Barajas estuvieron las c¨¢maras del NO-DO para recibir a los Fab Four.
Certificados por los propios Paul McCartney y Ringo Star como la mejor banda de versiones de sus canciones en todo el ancho globo, The Bootleg Beatles aterrizan en el aeropuerto Madrid-Barajas, recientemente bautizado Adolfo Suarez en honor a un presidente que por la que ¨¦poca en que llegaron los verdaderos Beatles a Espa?a era una utop¨ªa. Sonrientes y bajo ese sol de justicia a m¨¢s de 38 grados, saludan al bajar del avi¨®n.
Estos chicos, tambi¨¦n conocidos cari?osamente en Reino Unido como The Fake Beatles (Los Beatles falsos), recrean la misma imagen de la llegada a Barcelona de los aut¨¦nticos Beatles. Como hace 50 a?os hicieron Paul, John, George y Ringo, posan en la escalerilla del avi¨®n con capotes toreros.
En el aeropuerto (14.45 h.)
Cuando los Beatles aterrizaron en Espa?a, la prensa inglesa publicaba la noticia de que iban a ser investidos como Miembros del Imperio Brit¨¢nico. John se opuso y Paul dijo con su habitual iron¨ªa y pragmatismo: ¡°Nos dan cuarenta libras al a?o y adem¨¢s podemos entrar gratis en la galer¨ªa de la catedral de St. Paul¡±. La fiebre beatle estaba en todo su apogeo tras la grabaci¨®n de Help! Al disco le acompa?¨® una pel¨ªcula que se convirti¨® en un cl¨¢sico. En Madrid, las fans esperaban a sus "melenudos" con fervor. Si Elvis Presley, al que conocieron en 1965, cre¨® el fen¨®meno fan, los Beatles lo llevaron a la suma potencia. En palabras de Lennon: "Antes de The Beatles, todo era distinto; despu¨¦s de The Beatles, nada fue igual¡±.
Con pintas m¨¢s actualizadas y sin ser Miembros del Imperio Brit¨¢nico, The Bootleg Beatles salen del aeropuerto Adolfo Su¨¢rez por la Terminal 4. En el a?o 2015, ya con el verano comenzado, el tr¨¢nsito de pasajeros es imparable. Si bien no esperan fans como hace 50 a?os, la gente no ha podido evitar fotografiarse con estos cuatro tipos que llevan en activo m¨¢s a?os de lo que estuvieron los propios Beatles. El origen de esta banda de versiones data de 1979 y, con cambios de formaci¨®n, llevan d¨¦cadas defendiendo con arrojo el cancionero del grupo de pop m¨¢s grande la historia. A decir verdad, el que hace de John Lennon est¨¢ bastante conseguido, a¨²n luciendo en sus brazos numerosos tatuajes. Por cierto, no es casualidad: todos llevan gafas de sol menos el que hace de Paul McCartney, como sucedi¨® hace 50 a?os.
Camino del hotel (15.00 h.)
Hace medio siglo, un Cadillac condujo a los Beatles al hotel F¨¦nix en la plaza de Col¨®n. Dicen que entonces John Lennon ven¨ªa muerto de sue?o y quer¨ªa llegar al hotel a tumbarse un rato. En esta ocasi¨®n, una furgoneta bien equipada transporta a estos Beatles de sustituci¨®n al mismo hotel. Nuestro John Lennon actual, lejos de tener sue?o y el m¨¢s activo, dice: ¡°Mola mucho c¨®mo nos est¨¢n tratando¡±. Este fin de semana actuaron en el festival de Glastonbury. ¡°Despu¨¦s de nosotros toc¨® The Who, como si estuvi¨¦semos en los sesenta¡±, apunta la r¨¦plica sonriente de George Harrison.
En el viaje, con el atasco madrile?o de rigor, que parece otro asunto imbatible al paso del tiempo, quieren saber c¨®mo era Espa?a cuando los Beatles tocaron hace 50 a?os, con un r¨¦gimen militar que llen¨® los alrededores de la plaza de Las Ventas de grises, que ridiculiz¨® en sus informaciones a una formaci¨®n que representaba el ansia de cambio con sonidos contagiosos. "Te das cuenta lo importante que fueron cuando ves c¨®mo representaron tan bien la libertad", afirma el baterista que hace de Ringo. "En el lugar m¨¢s parecido que nosotros hemos tocado ha sido en Rusia", cuenta Harrison number 2. De hecho, este grupo fue el primer grupo de rock del oeste que toc¨® en la por entonces Uni¨®n Sovi¨¦tica, con un total de 60 conciertos ante m¨¢s de 250.000 espectadores en 1982.
Cada uno de estos beatles falsos aprovecha para decir cu¨¢l es su canci¨®n preferida de la banda de las bandas. Como si fueran ellos mismos pero sin serlo, el que hace de Lennon dice Revolution #9, McCartney se?ala Take to ride, Harrison apunta Help! y Ringo afirma que Julia.
En el hotel (16.00 h.)
En un acto organizado por el Instituto Sherry en el hotel F¨¦nix, el alcalde de J¨¦rez, Miguel Primo de Rivera, dirigi¨® unas palabras a los Beatles en su hist¨®rica visita. A fin de cuentas, esos m¨²sicos acababan de ser nombrados Miembros del Imperio Brit¨¢nico, motivo por el cual el ministro de la Gobernaci¨®n, Camilo Alonso, decidi¨® dar el permiso para sus conciertos en Madrid y Barcelona.
Los Bootleg Beatles llegan a un hotel F¨¦nix llamado hoy Gran Meli¨¢ y reformado por completo desde 1989. Sin embargo, se conservan las habitaciones donde descansaron los Beatles y que llevan sus nombres. Por ejemplo, una placa dorada certifica que hoy la suite 426 es la suite John. El hombre que hace las veces de Brian Eistein, es decir de m¨¢nager del grupo o quinto beatle con permiso del productor George Martin, se llama Neil. Ya est¨¢ m¨¢s relajado. En el aeropuerto, en un ataque de euforia, hab¨ªa pedido abandonar el aeropuerto por la sala de autoridades, lugar reservado para pol¨ªticos de alto rango y grandes celebridades.?
Rueda de prensa (16.45 h.)
La prensa tom¨® aquellos peinados de los Beatles como objeto de burla y aprovech¨® la ocasi¨®n para lanzar preguntas relacionadas con Espa?a, al m¨¢s puro estilo de personaje de Alfredo Landa. "?Les gusta Espa?a?", "?Les gusta la tortilla?", "?Conocen los toros?", "?Por qu¨¦ llevan esos pelos tan largos?"... estas fueron algunas de las preguntas formuladas. De hecho, tras el encuentro con los medios, se les llev¨® a conocer un tablao flamenco, donde aprovecharon para firmar vasijas de vino. Todo muy made in Spain.
Medio siglo despu¨¦s, esta recreaci¨®n al detalle de los Beatles dan otra rueda de prensa con una traductora de origen asi¨¢tico. Las preguntas se refieren a su papel como embajadores de los fabulosos de Liverpool a nivel mundial, aunque no falta, en plan broma, aquella de "por qu¨¦ tienen los pelos tan largos". El Ringo Starr en funciones reconoce lo complicado de imitar al bater¨ªa de los Beatles por su "lenguaje corporal extraordinario". Tambi¨¦n dice que lo m¨¢s dif¨ªcil es llevar las canciones del disco Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band al directo por la cantidad de arreglos. Y eso que The Bootleg Beatles cuentan con una orquesta de cuerda y metal en escena, por lo que son capaces de interpretar una gran variedad de temas. En la rueda de prensa, est¨¢n los miembros de Los Pekenikes,reunidos para la ocasi¨®n y que el jueves compartir¨¢n escenario en Las Ventas como hicieron medio siglo antes con los Beatles originales.
El espect¨¢culo de The Bootleg Beatles intenta llevar al espectador a un viaje al pasado. Para eso, utilizan instrumentos originales desde la bater¨ªa Ludwig de Ringo, las guitarras Gretsch y Rickenbacker o los amplificadores de v¨¢lvulas VOX para reproducir un sonido similar al de los sesenta, aunque conviene recordar que el que se escuch¨® en Las Ventas hace 50 a?os fue de una calidad paup¨¦rrima. Adem¨¢s, el show incluye un amplio vestuario, encargado a los mismos dise?adores que confeccionaron el de los Beatles entre 1963 y 1970, con cinco looks fieles a las etapas de los Fab Four. De esta forma, seg¨²n el repertorio que toquen, salen vestidos con el estilo de los Beatles en los conciertos de The Cavern, en su legendaria actuaci¨®n en el Shea Stadium, con los trajes de Stg. Pepper's Lonely Hearts Club Band, los del Magical Mystery Tour o vestidos como el concierto de la azotea de Apple en 1969, el ¨²ltimo que dieron en su vida. Lo que lleva a una ¨²ltima conclusi¨®n: si los Beatles no hubiesen existido, habr¨ªa que haberlos inventado. Porque el mundo, esto es un hecho imbatible, no hubiese girado igual sin sus canciones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.