Perro perreo

He cogido un trancazo de esos de sudorinas y tiritonas sucesivas tal que en los ¡°circuitos de sensaciones¡± de los spas de barrio, solo que en seco y sin pillar hongos donde yo te diga, que yo sepa. S¨ª, constipada en pleno julio, qu¨¦ pasa, a ver si porque siempre me toca quedarme de guardia en el curro mientras otros vacacionan, que dir¨ªan los reporteros de Telecinco, no va a poder una sacar su ego, perd¨®n, yo m¨¢s ¨ªntimo contando sus gripes con pelos y se?ales en la mejor tradici¨®n de los columnistas patrios. Venga, ahora es cuando salta el gracioso de turno con que eso me pasa por dormir con el culo al aire. Pues no, obseso. Y eso que, como saben hasta los becarios, ahora tengo el ¨¢rea de penalti en perfecto estado de revista femenina. En qu¨¦ hora cont¨¦ lo del l¨¢ser asesino, por cierto: desde entonces nadie me mira ya a los ojos por mucho que me los ah¨²me.

Pero no, no es eso. Qu¨¦ m¨¢s quisiera una que liberarse del pudor y dormir a lorzas sueltas. Ingl¨¦s no, pero a las ni?as de mi quinta nos inculcaron que hab¨ªa que acostarse con las ingles a cubierto y todos los arreos puestos, o se nos caer¨ªa la impedimenta como castigo divino. Y fuimos nosotras y nos lo cre¨ªmos. As¨ª que aqu¨ª nos tienes, pasado el ecuador de la vida, durmiendo encofradas de corvas a cuello, con las ballenas de los sostenes tatuadas a fuego en el lomo y las turgencias por los suelos.

Yo creo que pill¨¦ este catarro tonto del mismo bochornazo que pas¨¦ la otra noche. Me sacaron unas vecinas casadas a orinar fuera de casa en una cena de chicas rollo Sexo en Azuqueca de Henares y, no me preguntes c¨®mo, acabamos en una de esas salas de ritmos latinos de pol¨ªgono que, por lo visto, ahora son lo m¨¢s en el mercado de recolocaci¨®n de seminuevos / as. Iba yo tan sobrada, puesta hasta arriba de tinto de verano y creyendo dominar el rollo salsa/merengue cuando, en vez de La bilirrubina que pon¨ªan en mis tiempos, oigo una org¨ªa de d¨¢melo, c¨®gelo, t¨®malo, papacito, mamacita, caliente, fr¨ªo, todo eso que t¨² tienes m¨ªo que sonrojar¨ªa a la cabra de la Legi¨®n puesta hasta las astas de hierba de la buena.

De primeras me qued¨¦ helada, sin saber si denunciar al local por apolog¨ªa del sexismo o subirme a la barra. Pero luego me entr¨® tal calent¨®n interno que me puse a perrear como la m¨¢s ¨ªdem y casi me tienen que sacar a rastras. Una noche para olvidar, insisto. Si no fuera porque estaba por all¨ª el socorrista de la piscina comunitaria en una despedida de soltero. ?Pues no va el t¨ªo y me hace un Periscope cant¨¢ndole ¡°Mami, vamos a hacerlo f¨¢cil, deja que te coma enterita, que solo quiero ser tu amante¡± a mi vecina Maricarmen mientras le daba lo suyo por la espalda, y lo sube al Twitter de la urba? Llevo desde entonces con m¨¢s cara de gilipollas que el ¨ªdem de Marieta, la canci¨®n de Krahe. Y es que No todo va a ser follar, que dec¨ªa el finado. Ya no hay estetas.