Rafael Amargo muestra su ¡®Poeta en Nueva York¡¯ en la Alhambra

En un enclave de lujo, con el barrio del Albaic¨ªn de fondo y el atardecer poni¨¦ndose sobre la Alhambra?, bail¨® Rafael Amargo (Valderrubio, Granada, 1975) en el Teatro del Generalife. El core¨®grafo trajo a su tierra el espect¨¢culo mejor valorado por la cr¨ªtica, Poeta en Nueva York, un tributo al poeta de la misma ciudad Federico Garc¨ªa Lorca cuya obra cumple este a?o el 75 aniversario. Amargo y su compa?¨ªa pisaron el teatro la noche del lunes para dar la bienvenida al tradicional ciclo de verano Lorca y Granada, que celebra su XIV edici¨®n. Tras 25 a?os de ausencia de su ciudad, el artista regres¨® para bailar por primera vez en un gran escenario granadino.

Horas antes del espect¨¢culo, Rafael Amargo hablaba relajado con la confianza de quien se sabe en casa: "Prepararme aqu¨ª es una cuesti¨®n mucho m¨¢s espiritual. Venir a tu tierra tiene ese pellizco". El bailar¨ªn estaba tranquilo porque le ampara la buena cr¨ªtica. Poeta en Nueva York lleva represent¨¢ndose desde 2002, cuando tuvo una gran acogida en el teatro madrile?o Lope de Vega, Desde entonces, la compa?¨ªa Amargo ha viajado por todo el mundo. Barcelona, Nueva York, Buenos Aires o Mosc¨² son algunos de los escenarios por los que han pasado 20.000? espectadores.

La noche del lunes, la del estreno, llen¨® las gradas de abanicos. La venta anticipada de entradas tuvo un ¨¦xito m¨¢s grande que en anteriores ediciones del ciclo Lorca y Granada. A tan solo un d¨ªa de la inauguraci¨®n, el n¨²mero de localidades despachadas aument¨® un 30% con respecto a la edici¨®n anterior, seg¨²n los datos de los organizadores.

Tras la puesta de sol comenz¨® la obra con los versos de Lorca a los que precedieron un derroche de flamenco de Amargo y 20 bailarines. El primer baile fue el de la boda gitana, el preferido por el core¨®grafo seg¨²n confesaba horas antes. "Es la m¨¢s bonita porque la bailo con la madre de mis hijos. Ella hace de novia, yo de novio, y nos seguimos casando en la ficci¨®n cada d¨ªa", contaba con una sonrisa de su exmujer. Poeta en Nueva York lleg¨® a Granada con aire renovado, con coreograf¨ªas y vestuarios muy cambiados al de otras veces, y te?ido de estilos contempor¨¢neos como el jazz y la m¨²sica latina. El taconeo y las palmas retumbaron en el antiguo retiro de los reyes nazar¨ªes y, cuando el elenco se movi¨® sigiloso y sin m¨²sica como parte de la escenograf¨ªa, hasta los grillos se escucharon del bosque de la Alhambra.

La puesta en escena, con un montaje audiovisual muy cuidado, estuvo a cargo de Juan Esterlich y el propio artista. Los cantantes Edith Salazar y Eduardo Cort¨¦s se ocuparon de ponerle ritmo a la m¨²sica. Los poemas, muy presentes en toda la obra, fueron narrados por Marisa Paredes, Cayetana Guill¨¦n Cuervo y Juan Crosas. En el baile, los veteranos Mar¨ªa La Coneja y Toni Maya le pusieron acento a la noche.

Entretanto, un cielo de estrellas desped¨ªa el divertido baile final con ritmos cubanos, con frases en ingl¨¦s con acento andaluz y vestuario colorido. "Tengo 40 a?os y vuelvo a mis ra¨ªces por la puerta grande. Hoy para m¨ª es comenzar el segundo tiempo de este partido que es mi vida", dijo el artista. En la primera noche lorquiana, tras los cr¨¦ditos como en una pel¨ªcula de cine, todos salieron al escenario: su equipo, sus amigos, su familia. "Los que me vieron crecer", dijo un Amargo emocionado sin poder contener las l¨¢grimas.