Muere en Estepona la cantante y presentadora brit¨¢nica Cilla Black

La cantante y presentadora Cilla Black, uno de los rostros m¨¢s populares y queridos entre el p¨²blico del Reino Unido, ha fallecido este domingo en su residencia estival de Estepona a los 72 a?os. La artista que en sus inicios compartiera escenario con los Beatles hasta devenir, tras cinco d¨¦cadas de carrera, en una suerte de tesoro nacional, ha muerto por causas naturales, seg¨²n la conclusi¨®n preliminar de la polic¨ªa espa?ola, que deber¨¢ esperar a los resultados de la autopsia para ser ratificada.

Black, cuyo nombre real era Priscilla White, fue una estrella musical de los sesenta que, con el paso del tiempo, acab¨® recicl¨¢ndose en el mundillo de la televisi¨®n, donde present¨® programas de entretenimiento l¨ªderes de audiencia como Surprise Surprise o Blind Date, este ¨²ltimo durante dieciocho a?os. Su dilatada singladura la hizo merecedora el a?o pasado de un Bafta honor¨ªfico (el Oscar brit¨¢nico) y del premio de la Royal Television Society a toda una carrera, sumados a la emisi¨®n de un telefilme sobre su vida en el canal ITV que le procur¨® nuevas ofertas laborales. Tuvo que rechazarlas todas a causa de una salud muy resentida y del des¨¢nimo por su sordera y los dolores de la artritis.

¡°Voy a envejecer de forma vergonzosa¡±, declaraba abatida, en una entrevista a principios de este a?o, quien hab¨ªa sido una de las artistas m¨¢s luminosas del mundo del espect¨¢culo de las islas. Nacida en Liverpool en 1943, se cambi¨® el nombre para iniciar su carrera musical en el hoy m¨ªtico Cavern Club de su ciudad, donde comparti¨® veladas con un grupo que acabar¨ªa haciendo historia bajo el nombre de The Beatles. Su amigo Richard Starkey ¨Cconocido para el mundo como Ringo Starr- le present¨® al entonces manager de los Fab Four, Brian Epstein, quien accedi¨® a representar a Cilla Black e hizo de ella una estrella.

Dos temas encaramados al n¨²mero uno de las listas en 1963 (Anyone Who Had a Heart y You?re My World) propulsaron una carrera que acab¨® convenciendo a la BBC para brindar a Black su propio show en la televisi¨®n p¨²blica (en 1968). El ¨¢mbito musical y el de la peque?a pantalla se entremezclaron desde entonces, con preeminencia del segundo, en la carrera de Black, que fue gestionada por el marido de la cantante, Bobby Willis. Cilla y Bobby se hab¨ªan conocido en las noches de los clubs de Liverpool cuando ella ten¨ªa solo 17 a?os y permanecieron juntos hasta el fallecimiento de Willis, en 1999. Uno de los cuatro hijos de la pareja asumi¨® entonces las tareas de representante de su madre, incombustible hasta tiempos muy recientes, cuando los estragos de la enfermedad le apartaron de la luz p¨²blica, donde era asidua.

En un pa¨ªs donde los tabloides son tan asiduos a airear las sombras de los personajes p¨²blicos, Cilla Back nunca mereci¨® un solo titular negativo. Simp¨¢tica y pr¨®xima, luciendo ya en una edad avanzada sus largu¨ªsimas y todav¨ªa estupendas piernas: as¨ª la proyectaron siempre unos medios que un¨¢nimemente trataron con respeto su reciente y forzoso retiro. ¡°Fue una dama extraordinaria¡±, han proclamado figuras del espect¨¢culo como Joan Collins, de la televisi¨®n y la prensa escrita, incluso de la pol¨ªtica, ante la inesperada noticia de su muerte.