Tarde magistral y memorable de Diego Urdiales en la feria de Logro?o

El diestro Diego Urdiales protagoniz¨® en su tierra, Logro?o, una tarde memorable, no s¨®lo por las tres orejas que cort¨®, que le permitieron salir a hombros, sino por la lecci¨®n magistral de toreo puro y excelso que ofreci¨®.

Con tres cuartos de entrada, se lidiaron tres toros -primero, segundo y tercero- de Las Ramblas, y otros tantos -cuarto, quinto y sexto- de Jandilla, bien presentados y de variado comportamiento. El noble primero se acab¨® pronto; soso y blando el segundo; con peligro sordo el tercero; noble y con fijeza el cuarto; soso y parado el quinto, y tardo y aquerenciado el sexto.

Diego Urdiales: pinchazo y casi entera (oreja), y estocada delantera de efecto r¨¢pido (dos orejas). Jos¨¦ Mar¨ªa Manzanares: casi media y estocada trasera y tendida (silencio), y estocada arriba (silencio), y Jos¨¦ Garrido, que sustitu¨ªa a Enrique Ponce: estocada trasera (oreja), y estocada desprendida (ovaci¨®n tras aviso).

Llegaba Urdiales a su tierra, La Rioja, con ganas de refrendar su gran a?o, marcado, sobre todo, por la grandiosa faena protagonizada en Bilbao, uno de los hitos m¨¢s importantes en este 2015, y que hizo que sus paisanos le obligaran a saludar una ovaci¨®n nada m¨¢s romperse el pase¨ªllo.

Esas palmas debieron motivar a¨²n m¨¢s a Urdiales a salir al ruedo a por todas, a plasmar su excelsa tauromaquia, de tanta pureza como sabor a?ejo. Y no tard¨® en surgir, pues el saludo de capote a su primero fue exquisito, sali¨¦ndose a los medios y cargando la suerte.

Se le ve¨ªa relajado al de Arnedo, algo que se advirti¨® en el brindis a Curro Romero, testigo de una faena de gusto, desmayo y aroma cl¨¢sico a un toro muy noble, pero que se acab¨® pronto, y al que cort¨® una merecida oreja.

Pero lo mejor estaba a¨²n por llegar. Ocurri¨® en el cuarto, un toro paradito de salida, que sali¨® suelto en varas, pero que ya en el capote apunt¨® mucha calidad.

Urdiales brind¨® al p¨²blico e inici¨® faena dobl¨¢ndose con mucha torer¨ªa para sacarse al animal a los medios. Se coloc¨® el riojano por el derecho para recetar una primera tanda simplemente sensacional, con la muleta siempre puesta y los pases ligados por abajo con rotundidad. En la segunda tanda surgi¨® la hondura, el gusto, la plasticidad, cualidades que ya hicieron rugir la plaza, arrebatada en una tercera tanda inmensa, con un gran pase de pecho como broche.

Por el izquierdo hubo tambi¨¦n tres tandas de exquisita interpretaci¨®n, soberbias, muy poderosas. Faena inmensa, de magia, misterio y solemnidad, siempre a m¨¢s, estructurada en muy poquito espacio, y al son de los acordes del pasodoble Puerta Grande.

La espada fue de efecto fulminante, cay¨® el toro sin puntilla, y dio paso a una fuerte petici¨®n de las dos orejas, que el presidente concedi¨®, y Urdiales pase¨® feliz bajo un clima de total frenes¨ª.

Manzanares no tuvo lote, pero tampoco a ¨¦l se le vio demasiado animado. Su primero fue un toro soso al que tore¨® sin alma, fuera de encaje, sin verlo claro, lo que provoc¨® los silbidos de cierto sector de la plaza. En el quinto, Manzanares tore¨® muy bien de capote, a la postre, lo ¨²nico destacado de la faena, con muchas probaturas y ning¨²n ajuste.

Garrido tuvo en primer lugar un rebrincado, muy informal, que desarroll¨® peligro sordo. El extreme?o mostr¨® valor, jug¨® muy bien las mu?ecas, sobre todo la izquierda, por donde sac¨® muletazos impensables; aunque lo mejor fue el aguante imp¨¢vido ante los parones y miradas de su oponente, que llev¨® la emoci¨®n al tendido, que lo premi¨® con una justa oreja.

El sexto fue un toro con marcada querencia a tablas, adem¨¢s de andar muy justito de fuerzas. Garrido le busc¨® las vueltas, le cambi¨® los terrenos, aunque sin lograr una tanda limpia. Acab¨® en plan tremendista entre los pitones, y demostr¨® la actitud y disposici¨®n con la que vino a Logro?o, cuya afici¨®n lo despidi¨® con una gran ovaci¨®n.

Oreja para Sergio Gal¨¢n en Salamanca

El rejoneador Sergio Gal¨¢n se qued¨® a un paso de salir por la puerta grande de la plaza de toros de La Glorieta, en Salamanca, despu¨¦s de una gran faena que puso en pie a la afici¨®n, aunque s¨®lo logr¨® una oreja y petici¨®n de la segunda. Hermoso de Mendoza y Miguel Moura no consiguieron trofeos, pero s¨ª fueron despedidos con el respeto y el cari?o del p¨²blico en la ¨²ltima corrida de la feria de San Mateo.

Con tres cuartos de entrada, se lidiaron toros de la ganader¨ªa de Herederos de ?ngel S¨¢nchez y S¨¢nchez, que en general dieron un buen juego.

Pablo Hermoso de Mendoza, silencio y ovaci¨®n; Sergio Gal¨¢n, ovaci¨®n y oreja con petici¨®n, y Miguel Moura, ovaci¨®n y ovaci¨®n.