Las v¨ªctimas de Ciudad Ju¨¢rez se levantan contra sus verdugos

En su pieza de video-arte Apoohcalypse Now, el mexicano Artemio Narro sincronizaba a la perfecci¨®n el mon¨®logo de Marlon Brando como coronel Kurtz en el Apocalypse Now (1979) de Francis Ford Coppola con candorosas im¨¢genes del osito Winnie the Pooh sacadas de una animaci¨®n Disney. Una ejemplar muestra tanto de la madera provocadora de este creador inquieto como de la importancia que lo cinematogr¨¢fico ha tenido en su obra siempre imprevisible, sostenidamente insidiosa. Lleg¨®, no obstante, el d¨ªa en que Narro se hart¨® de los circuitos del arte contempor¨¢neo, decidi¨® cerrar toda vinculaci¨®n con las galer¨ªas que gestionaban su obra, se empe?¨® en abandonarlo todo... y, de la noche a la ma?ana, se hizo director de cine. Para ello, organiz¨® una subasta de arte con obras aportadas por sus amigos -entre ellos, varios artistas espa?oles como Antonio de la Rosa o Maite Cajaraville- y, con los 120.000 d¨®lares reunidos, compr¨® el equipo necesario y autofinanci¨® su primer largo, Me quedo contigo, una pel¨ªcula agresiva en su trasfondo y exquisita en sus formas que se ha presentado en la secci¨®n Panorama Fant¨¤stic de Sitges y que este s¨¢bado podr¨¢ verse tambi¨¦n, con la presencia del autor, en La Casa Encendida de Madrid.

¡°Tanto Antonio de la Rosa como yo hab¨ªamos estado trabajando en Ciudad Ju¨¢rez y, aunque la pel¨ªcula se rod¨® en Monterrey, quisimos que, en el punto de partida de todo el proyecto, estuviera nuestra intenci¨®n de darle la vuelta al escabroso tema de los feminicidios¡±, se?ala el director. En Me quedo contigo, una chica espa?ola que viaja a M¨¦xico para encontrarse con su novio acaba pasando, ante la incomparecencia de este, una larga noche de crueldad en compa?¨ªa de un grupo de chicas que desarrollar¨¢ un brutal ritual de tortura consagrado a un arquet¨ªpico machito del norte mexicano. ¡°El cine puede ser una herramienta pol¨ªtica, pero la nueva generaci¨®n de cineastas mexicanos no lo est¨¢ aprovechando como tal. Hacen un cine clasemediano y porno miserable que a m¨ª me irrita mucho. Se habla de la violencia desde el prisma de las clases sociales, como si solo las clases bajas fueran violentas, cuando, en realidad, las clases poderosas tambi¨¦n son hiperviolentas. Adem¨¢s, el cine mexicano es un gueto bien cerrado y a m¨ª me ha tocado ser un advenedizo. Como ven¨ªa del arte, muchos cr¨ªticos y jurados consideraban que esto no era una pel¨ªcula, sino una performance¡±, se?ala un Artemio Narro, que se enorgullece de que, pese al veto del sector de la exhibici¨®n y el repudio manifiesto de muchos cr¨ªticos, su pel¨ªcula se ha ido con premio de todos los festivales mexicanos en los que ha sido presentada.

En la pel¨ªcula aparece una estrella del calibre de Diego Luna, amigo personal del director, pero eso tambi¨¦n incluye una carga envenenada contra el statu quo de su cinematograf¨ªa nacional: ¡°Da la impresi¨®n de que, si no tienes a un famoso, no puedes hacer tu pel¨ªcula. As¨ª pues, la presencia de Diego Luna me sirve para transmitir ese mensaje: tenemos al famoso, pero no nos interesa. Aqu¨ª est¨¢ Diego Luna, pero no lo usamos: le faltamos el respeto y solo lo tenemos en 28 segundos de nuestra pel¨ªcula¡±. Para Artemio Narro, su pel¨ªcula se mueve entre la comedia pija que encarnaba Clueless. Fuera de onda y el Funny Games de Michael Haneke: ¡°Ten¨ªa muy claro el tipo de lenguaje visual que quer¨ªa usar, con tomas muy abiertas, sin planos subjetivos. Quer¨ªa que fuera una pel¨ªcula inc¨®moda y un poco tediosa desde el primer momento. Buscaba algo cansado y molesto, sin arcos dram¨¢ticos, sin primer, segundo, ni tercer acto. Incluso sin protagonista: aqu¨ª lo importante es el instante de esas vidas que captura la pel¨ªcula y, sobre todo, la idea de grupo o, m¨¢s bien, de manada¡±.

El frenes¨ª creativo del artista no ha encontrado su plena satisfacci¨®n en el largo proceso de elaboraci¨®n que conlleva hacer una pel¨ªcula. Por eso, a partir de ahora, ha decidido no renunciar por completo al arte contempor¨¢neo -¡°a pesar de que me siento como si estuviese partiendo de cero¡±- e ir alternando su doble faceta de artista y cineasta. ¡°Estoy trabajando en dos nuevos proyectos cinematogr¨¢ficos. El primero ser¨¢ una comedia psicod¨¦lica alrededor del asesinato del candidato a la presidencia Colosio en 1994. Ser¨¢ una pel¨ªcula que, de paso, aprovechar¨¢ para burlarse de las road movies mexicanas como Y tu mam¨¢, tambi¨¦n. La otra ser¨¢ una secuela de Me quedo contigo, planteada a partir del problema de si una historia as¨ª puede tener segunda parte¡±.