Josep Borrell y Eduardo Arroyo se disputar¨¢n una plaza en la RAE
El pol¨ªtico socialista y el artista optan a la silla K, cuya ¨²ltima titular fue Ana Mar¨ªa Matute
El pol¨ªtico socialista Josep Borrell, ministro de Obras P¨²blicas con Felipe Gonz¨¢lez de 1991 a 1996 y presidente del Parlamento Europeo entre 2004 y 2007, y el artista Eduardo Arroyo se disputar¨¢n el sill¨®n K de la Real Academia Espa?ola, cuya ¨²ltima titular fue la escritora Ana Mar¨ªa Matute, fallecida en 2014. Junto a ambos, la lexic¨®grafa y catedr¨¢tica Mar¨ªa Paz Battaner es la ¨²nica candidata presentada para otro sill¨®n vacante, el s, que ocup¨® el catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa Jos¨¦ Luis Pinillos, muerto en 2013.
Hay una tercera vacante que se cubrir¨¢ pr¨®ximamente, la M,que estaba en posesi¨®n del poeta Carlos Bouso?o, fallecido el 24 de octubre pasado.
Las votaciones para ambas plazas han sido fijadas para el pr¨®ximo 3 de diciembre, ya que al pleno anterior varios acad¨¦micos no podr¨¢n asistir, pues acudir¨¢n al congreso de la Asociaci¨®n de Academias de la Lengua Espa?ola en M¨¦xico, que se celebra del 22 al 25 de noviembre.
La candidatura de Josep Borrell (La Pobla de Segur, Lleida, 1947) ha recibido el respaldo de los acad¨¦micos Jos¨¦ B. Terceiro, Luis Mar¨ªa Anson y Carme Riera, seg¨²n han confirmado fuentes de la instituci¨®n, mientras que la de Eduardo Arroyo (Madrid, 1937) cuenta con el aval de Juan Luis Cebri¨¢n, Francisco Rico y Salvador Guti¨¦rrez, precisan las mismas fuentes.
La catedr¨¢tica de Filolog¨ªa Espa?ola de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona Mar¨ªa Paz Battaner (Salamanca, 1938) tiene el apoyo de Ignacio Bosque, Margarita Salas y Miguel S¨¢enz.
El plazo de presentaci¨®n de candidaturas para la vacante a la que opta Battaner finaliz¨® el pasado s¨¢bado, por lo que es muy probable que la lexic¨®grafa se convierta en la octava mujer en la Real Academia Espa?ola y la und¨¦cima en los tres siglos de historia de la instituci¨®n.
La proclamaci¨®n oficial de su candidatura se producir¨¢ en el pleno del pr¨®ximo jueves. Battaner ha dirigido proyectos lexicogr¨¢ficos en Spes Editorial, fue decana de la Facultad de Traducci¨®n e Interpretaci¨®n de la Pompeu Fabra y asesora ling¨¹¨ªstica de Televisi¨®n Espa?ola en el programa Hablando claro.
Las cuentas de Catalu?a
En el caso del sill¨®n K, al que optan Borrell y Arroyo, el plazo de presentaci¨®n de candidaturas finaliza el pr¨®ximo lunes y la proclamaci¨®n oficial llegar¨¢ tres d¨ªas despu¨¦s. Por lo tanto, a¨²n hay tiempo para que surja un nuevo aspirante, aunque parece bastante improbable.
Josep Borrell lleg¨® a la pol¨ªtica a finales de los a?os setenta. En 1991, fue nombrado ministro de Obras P¨²blicas, Transportes y Medio Ambiente por el entonces presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez. En 2004, fue cabeza de lista a las elecciones europeas de su partido y el 20 de julio de ese a?o fue elegido presidente del Parlamento Europeo, cargo que ocup¨® durante un trienio.
Es ingeniero aeron¨¢utico y doctor en Ciencias Econ¨®micas y ha publicado varias obras, la ¨²ltima de ellas, la exitosa Las cuentas y los cuentos de la independencia, junto a Joan Llorach, en la que se rebaten algunas de las ideas de los independentistas en Catalu?a.
El exministro no ser¨ªa el primer pol¨ªtico que llegase a la Academia, como demuestran los ejemplos de Emilio Castelar, Antonio Maura y Niceto Alcal¨¢-Zamora.
Si Eduardo Arroyo, uno de los padres del pop art espa?ol, fuese el elegido, ser¨ªa una novedad la presencia de un representante de las Bellas Artes en la casa en su actual composici¨®n.
A lo largo de su trayectoria, Arroyo, galardonado con el Premio Nacional de Artes Pl¨¢sticas en 1982, ha sido pintor, escultor, ceramista y escen¨®grafo. Pertenece a la generaci¨®n de artistas e intelectuales espa?oles que se march¨® a Par¨ªs asfixiados por el franquismo. ?l lo hizo en 1958, con apenas 21 a?os, con el t¨ªtulo de periodismo bajo el brazo.
Sin embargo, en la capital francesa, donde vivi¨® 23 a?os, se decant¨® por la pintura figurativa. No regres¨® a Espa?a hasta despu¨¦s de la muerte del dictador. Hoy, sus obras cuelgan de las paredes de los principales museos espa?oles. Como escritor ha publicado, entre otros vol¨²menes, Treinta y cinco a?os despu¨¦s, Panama Al Brown, 1902-1951 y una autobiograf¨ªa, Sardinas en aceite.
En cuanto al proceso de las votaciones, la RAE recuerda en su web que en la primera se tienen en cuenta los votos de los acad¨¦micos asistentes al pleno y los votos que hayan llegado por correo de los ausentes. Son necesarios dos tercios del total para ser elegido. Si en ese caso no hay fumata blanca, los Estatutos de la RAE establecen que se proceda a una segunda votaci¨®n en la que, l¨®gicamente, los votos por correo que se enviaron para la primera quedan desechados, y de nuevo se precisan dos tercios. Si tampoco hubiera un elegido en este caso, se ir¨ªa a una tercera votaci¨®n en la que ya es solo necesaria la mitad m¨¢s uno de los votos. En cualquier caso, la RAE prev¨¦ que si a la tercera el aspirante no consigue los apoyos precisos, la plaza quedar¨ªa vacante.
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