Fernando Vallejo: ¡°El cristianismo y el Islam son una empresa criminal¡±
El escritor colombiano ajusta cuentas con el presente en '?Llegaron!', un texto sobre su historia. Con humor, con sa?a y con voz propia, lanza dardos a Dios y a su pa¨ªs
![El escritor colombiano Fernando Vallejo con su perra Brusca.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/IIKRWKAQL6VMD7DZAYNPKZEGDU.jpg?auth=92522145e3bda99f57f8f18c52ca82220b7ed5c929d33184afaa79f507572104&width=414)
Hay libros que se escriben para morir en el punto final. Otros forman un interrogante. Y s¨®lo unos pocos se elevan entre exclamaciones. Este es el caso de??Llegaron!, la ¨²ltima y exuberante obra de Fernando Vallejo (Medell¨ªn, 1942), que ahora publica la editorial Alfaguara. Su historia es la de su autor, su familia y, sobre todo, los recuerdos de infancia en la colombiana finca de Santa Anita, junto a sus abuelos. Pero lejos de quedarse en un paseo por un tiempo perdido, el texto sirve para un ajuste de cuentas con el presente. Ese universo amorfo e inagotable al que el narrador pasa a cuchillo p¨¢gina tras p¨¢gina. Desde Colombia hasta Dios. A veces lo hace con humor, otras con sa?a, pero siempre con voz propia. Una primera persona (el autor detesta el uso del narrador omnisciente) que, sentada en un avi¨®n con destino desconocido, rememora la vida y muerte de los suyos, se muestra a s¨ª mismo sin pudor y hace estallar con su torrencial estilo todo lo que toca.
¡ªHablo como pienso y escribo como hablo.
Vallejo vive en la Ciudad de M¨¦xico. All¨ª, en la frondosa avenida de ?msterdam, pasea cada d¨ªa a su perra, Brusca. Es un hombre elegante, de talante bondadoso, pero que, en su conversaci¨®n, guarda siempre una navaja bien afilada. Preguntarle es verla brillar. Salvaje y tropical.
Tambi¨¦n es una empresa criminal eso que llaman pomposamente el islam: mahometanos asesinos y rezanderos
PREGUNTA. El libro se abre y cierra con exclamaciones. ?Hay algo as¨ª como un ritmo exclamativo?
RESPUESTA. Exacto. Con exclamaciones. Solo que antit¨¦ticas. La de entrada es ¡°?Llegaron!¡±. Y la de salida ¡°?Se fueron!¡±. Claro que llegamos, claro que nos fuimos, como llegamos todos y nos habremos de ir todos. La literatura se escribe en prosa y la prosa antes que nada es ritmo. Pero del bueno. No los octos¨ªlabos asonantes y sonsonetudos de Garc¨ªa Lorca. Esto que le digo es uno de los grandes descubrimientos m¨ªos, hecho despu¨¦s del agua tibia, que se lo debo a M¨¦xico, ya cumplidos mis 27 a?os, pues en Medell¨ªn nos ba?¨¢bamos siempre con agua fr¨ªa.
P. Su estilo es enormemente fluido. ?C¨®mo trabaja un texto?
R. Lavando platos y paseando a mi perra, Brusca, por el camell¨®n de la avenida de ?msterdam de la Ciudad de M¨¦xico para que haga en p¨²blico sus necesidades porque en privado, en la casa, no le gusta a la maldita. O mejor dicho bendita, porque la amo.
P. ?Se identifica con la voz central del libro?
R. Mil por mil. Cien por cien. Ciento por ciento.
P. ?Es un viaje por sus recuerdos?
R. S¨ª. Un viaje en avi¨®n tratando de ganarle la carrera a mi m¨¦dico, el doctor Alzh¨¦imer.
P. ?Le gusta viajar en avi¨®n?
R. Mucho. Ah¨ª o cuando lavo platos se me ocurren los libros. Viajo en clase turista y lavo platos m¨¢s que por falta de dinero por humildad. A m¨ª que no me venga el papa Francisco a d¨¢rselas de humilde, que ¨¦l no lava platos y viaja en jet privado. Ah, no, perd¨®n, calumnio, miento. Lava patas.
P. El libro tiene mucho humor. ?C¨®mo se consigue?
R. Esa es una interpretaci¨®n errada. Yo nunca escribo en burla: siempre en serio.
P. A la Iglesia le dedica constantes dardos. Por ejemplo: ¡°Dios, como Pablo Escobar, no mata por mano propia, ?l no se ensucia: para eso tiene sus sicarios¡±. ?Le falta humor a la religi¨®n?
Los pol¨ªticos son corruptos; los dictadores, corruptos; los tiranos, corruptos; los reyes, z¨¢nganos y corruptos...
R. Seg¨²n Marx, la religi¨®n es el opio del pueblo. ?Qu¨¦ va! Ojal¨¢. Me la fumar¨ªa enterita. La religi¨®n es una plaga. Todas, empezando por el cristianismo y el mahometismo, a las que hoy pertenece la mitad del g¨¦nero humano. El cristianismo no es una civilizaci¨®n, es una empresa criminal, y lo mismo eso que llaman pomposamente el islam: mahometanos asesinos y rezanderos. No hay Dios, Bergoglio, y nunca ha habido un Cristo de carne y hueso, sacado de una costilla de Ad¨¢n o de un chorro de luz de las entra?as de la Virgen fecundada luminosamente por el Esp¨ªritu Santo. A la religi¨®n no le falta humor, lo que le falta es castigo.
P. Cuando ataca, lo hace con nombre y apellidos. Putin, Sarkozy y hasta Santos (¡°m¨¢s est¨²pido que una pel¨ªcula de avi¨®n¡±)¡ ?Le gusta la pol¨¦mica?
R. Yo con nadie polemizo. No soporto que me contradigan.
P. Dice usted de los colombianos que son ¡°chusma carn¨ªvora y paridora, cristiana y futbolera¡±. ?Existe posibilidad de que usted se reconcilie con Colombia?
R. Nunca me he peleado con esa mala patria. Simplemente, le ajusto cuentas cada vez que puedo.
P. ?Es Santa Anita su infancia, la otra Colombia?
R. As¨ª es. La m¨¢s hermosa.
P. Dice su protagonista sobre Colombia: ¡°Ya s¨¦ que por maldici¨®n eterna habr¨¦ de volver a morir a ese moridero¡±. ?Lo cree usted?
R. Estoy seguro, porque como yo soy el que voy a decidir mi muerte¡ A m¨ª no me va a matar Diosito con un c¨¢ncer de p¨¢ncreas o mand¨¢ndome un sicario. No le pienso dar gusto a ese Viejo.
P. ¡°El Homo sapiens es una f¨¢brica de mierda¡±. ?No le gusta el g¨¦nero humano?
![El escritor colombiano, en su casa en la Ciudad de M¨¦xico.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/QWACPS4DE256YVYPTYELNNYSJE.jpg?auth=7f2c06874c53a85802d2c49281d3fadb6fa621b2810759862efbab3a6894955c&width=414)
R. Me gusta que haya dicho ¡°g¨¦nero humano¡± y no ¡°raza humana¡± como muchos ignorantes traduciendo del ingl¨¦s the human race; o ¡°especie humana¡± como dicen los escrupulosos aduciendo que la del Homo sapiens es una especie y no un g¨¦nero. S¨ª, reparones, pero en t¨¦rminos biol¨®gicos, no de lenguaje. Las lenguas son caprichosas. Y la espa?ola ni se diga. Este es un idioma loco.
P. ?De d¨®nde le viene el inter¨¦s por la gram¨¢tica?
R. De Colombia, que est¨¢ loca. Durante 50 a?os la gobernaron presidentes gram¨¢ticos del partido conservador, que cre¨ªan en Dios y viv¨ªan en guerra permanente contra el que y los gerundios galicados. Y que no se le pod¨ªa quitar la preposici¨®n a a las ciudades ni a los pa¨ªses cuando eran complemento directo. ¡°Mas independiz¨® Catalu?a¡±. ?Qu¨¦ horror! Eso es incorrect¨ªsimo. Debe ser: ¡°Mas independiz¨® a Catalu?a¡±. Cuando se consume esta separaci¨®n vuelvo a Espa?a. Antes ni muerto.
P. No se f¨ªa de los pol¨ªticos, o eso parece. ?Pero se puede vivir sin ellos?
R. Los pol¨ªticos son corruptos; los dictadores, corruptos; los tiranos, corruptos; los reyes, z¨¢nganos y corruptos; los curas, maricas y corruptos; el Papa, farsante y corrupto; los ayatol¨¢s, asesinos y corruptos; Castro, traidor y corrupto; Berlusconi, pederasta y corrupto; Putin, asesino y corrupto¡ Y as¨ª. Y todos ellos carn¨ªvoros.?Hideputas!, les habr¨ªa dicho don Quijote.
P. Colombia, la Iglesia, la podredumbre pol¨ªtica, la muerte¡ ?Se puede decir que forman parte de sus obsesiones?
R. La Iglesia y los pol¨ªticos son ro?as incurables. Y Colombia, una mala patria. Esta es la hora en que no acabo de ajustarle las cuentas.
P. ?C¨®mo ve Colombia ahora? ?Y M¨¦xico?
R. Igual de jodidos. Casi como Espa?a. En ese par de paisuchitos la gente se reproduce como animales, y se come a los animales. ¡°?No se reproduzcan como conejos!¡±, dijo Bergoglio. ?Ah, s¨ª! ?Y la enc¨ªclica Humanae vitae de su predecesor Pablo VI en que este Papa prohib¨ªa el sexo no solo por fuera del matrimonio sino tambi¨¦n dentro de ¨¦l cuando no estaba destinado a la reproducci¨®n? As¨ª que si usted quiere tener 20 coitos en su vida tiene que tener 20 hijos. Mi pap¨¢ y mi mam¨¢ fabricaron 24. En la portada de??Llegaron! puede ver usted unos cuantos de ellos. Ah¨ª estoy yo con gafitas. Mi pap¨¢, manejando. Mi mam¨¢, con su benjamincito en brazos.
Toda mi familia tiene cuentas pendientes conmigo que no acaban de saldar. De libro en libro se las voy cobrando
P. Dentro del libro hay otro libro: ¡®La libreta de los muertos¡¯. ?Los cuenta y recuerda usted?
R. Voy en el 858, que se dicen r¨¢pido pero que me costaron una vida y a?os de esfuerzos de la memoria. Son los que vi por lo menos una vez, pero en persona (no en el peri¨®dico o por televisi¨®n), y que s¨¦ con certeza que se murieron. Me dicen que Bu?uel llevaba una libreta as¨ª. La llevar¨ªa, pero no como la m¨ªa, ni de lejos: en la m¨ªa hay putas, gigol¨®s, travestis, pol¨ªticos, atracadores, ladrones, sicarios. Y dos papas: Giovanni Battista Montini, alias Pablo VI, y Karol Wojtyla, alias Juan Pablo II. A uno lo vi con la capa al viento, a 20 metros, en la plaza de Bol¨ªvar de Bogot¨¢; y al otro pasando en papam¨®vil por la avenida de los Insurgentes de la Ciudad de M¨¦xico, tambi¨¦n a tiro de piedra. No sabe la alegr¨ªa con que los anot¨¦.
P. La muerte es una constante en su texto. ?Le produce miedo? ?Angustia? ?Sensaci¨®n de absurdo? ?Soledad?
R. Terror, porque dejar¨ªa a mi perra, Brusca, hu¨¦rfana.
P. ?Es usted un hombre familiar? En el libro le da mucha importancia a la familia.
R. Toda mi familia tiene cuentas pendientes conmigo que no acaban de saldar. De libro en libro se las voy cobrando.
P. ¡°Vivo para contener el caos¡±, dice su protagonista. ?Es la literatura una forma de poner orden en las cosas?
R. No. Por el contrario. Nada de orden. Que se acabe la humanidad y volvamos al caos, que el orden cuesta mucho, inmenso esfuerzo, no paga el sacrificio.
P. ?Cu¨¢ndo sabe que ha terminado un libro? ?Cu¨¢ndo lo supo de este?
R. Cuando llego a la p¨¢gina 180. M¨¢s es mucho y menos poco.
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