Virginia Maestro, una reinvenci¨®n ¡®retro-pop¡¯ optimista
La cantante da un giro a su carrera al abandonar un gran sello discogr¨¢fico y tirar por su cuenta con una propuesta de aires cl¨¢sicos
Las suaves ma?anas de Malasa?a juegan al despiste. Nada queda de sus agitadas noches cuando los comercios abren sus puertas, y la gente comienza con sus obligaciones. Un calor impropio de estas fechas envuelve el Lolina Vintage Caf¨¦, lugar de encuentro para los habituales del barrio, donde los estilosos emprendedores trabajando con sus MacBook, se mimetizan con los coloridos estampados de las paredes, y el mobiliario de postguerra. ¡°Me gusta jugar con los contrastes, me divierte cuando las melod¨ªas son muy alegres y las letras muy ca?eras¡±, afirma Virginia Maestro (Linares, 1982), a la que no le queda zumo de melocot¨®n y decide pedir un poco de agua para sobreponerse a este desubicado d¨ªa primaveral. ¡°El sonido del disco es muy actual, porque tiene mucha influencia retro, pero suena moderno¡±, a?ade.
Al igual que el establecimiento, ella es ecl¨¦ctica y atemporal, y define su estilo como retro-pop. No tiene problemas en confesar que pas¨® de cantar canciones de los Panchos en el sal¨®n de su casa, a coleccionar vinilos de los Beatles, Lynyrd Skynyrd y Billie Holiday entre otros, que le fueron acercando poco a poco a la m¨²sica anglosajona, y a la Am¨¦rica m¨¢s cincuentera. Su debilidad por la cultura estadounidense viene de entonces, pero fue la serie Nashville, la culpable de que sintiera la necesidad de viajar hasta all¨ª para subirse al escenario del Bluebird Cafe, local peque?ito y con mucha magia, donde fue descubierta Taylor Swift. Ni corta ni perezosa, Maestro decidi¨® comprarse el billete de avi¨®n, y movi¨® cielo y tierra para conseguir una gira por la ciudad. ¡°Fue una experiencia muy bonita y extraordinaria, me volv¨ª con la moral muy alta, y de hecho estoy planeando m¨¢s cosas por all¨ª¡±, asegura.
Ha dejado Labuat atr¨¢s, y acaba de publicar su cuarto ¨¢lbum, Blue Bird. Un trabajo detallista financiado mediante un crowdfunding, que super¨® ampliamente la cifra inicial que se ped¨ªa siendo un ¨¦xito rotundo. Su ruptura con Sony Music ha sido un punto de inflexi¨®n en su carrera. Maestro, que se dio a conocer en el programa Operaci¨®n Triunfo, ha pasado de estar escoltada por una gran compa?¨ªa a verse sola frente al peligro, asumiendo todas las funciones de los distintos departamentos que forman una discogr¨¢fica. ¡°Me gusta que todo empiece y termine en m¨ª, cada decisi¨®n, ya sea art¨ªstica, log¨ªstica o de producci¨®n¡±, se?ala. Y reconoce que lidiar con la presi¨®n y la responsabilidad que implican ser su propio jefe ha sido de las cosas m¨¢s complicadas.
En Blue Bird las melod¨ªas son optimistas, hay una mezcla de oscuridad y colorido, dependiendo de si est¨¢s en la estrofa o en el estribillo. La elecci¨®n de los temas no fue f¨¢cil. Se junt¨® con casi setenta borradores y acab¨® decant¨¢ndose por las canciones m¨¢s pasionales, que dejaban mejor constancia de los cambios importantes por los que ha pasado durante este ¨²ltimo a?o. ¡°La sensaci¨®n de crear es de lo m¨¢s placentera, me proporciona unas dosis muy grandes de felicidad y de emoci¨®n¡±, afirma. Para ella, componer y estar encima de un escenario es lo mejor de dedicarse a la m¨²sica, adem¨¢s de una necesidad. La promoci¨®n del disco le deja poco tiempo, pero aprovecha cualquier hueco para coger la guitarra y escribir. Dice que ha vuelto a componer en castellano, siempre bajo los fraseos de la m¨²sica americana, y que le ha influido mucho conocer a varios escritores, leer mucha poes¨ªa, y escribir por puro placer. ¡°Tengo la sensaci¨®n de haberme encontrado en el castellano sin pudores¡±, apunta.
Virginia Maestro defender¨¢ su nueva propuesta este s¨¢bado 28 en la sala El Sol de Madrid y asegura que s¨®lo puede dar gracias por el giro que ha tomado su vida profesional. A pesar de que al principio sintiera cierto v¨¦rtigo, hoy ¨²nicamente ve el lado positivo: ¡°Ha sido un gran aprendizaje, creo que durante este a?o y medio he crecido mucho en lo profesional y en lo personal¡±. Ahora maneja los hilos de una carrera que le emociona, pone las miras en el continente americano, y, dice, no quiere morirse sin cantar con Coque Malla.
Babelia
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