Telepol¨ªticos
La presencia en 'El hormiguero' de Pedro S¨¢nchez 24 horas despu¨¦s del debate en la misma cadena demuestra que la televisi¨®n y los pol¨ªticos se alimentan mutuamente
La presencia en El hormiguero de Pedro S¨¢nchez 24 horas despu¨¦s del debate en la misma cadena demuestra que la televisi¨®n y los pol¨ªticos son complementarios, se alimentan mutuamente. El electrodom¨¦stico ha encontrado un fil¨®n en las declaraciones program¨¢ticas y los aspirantes a la Moncloa consideran ineludible su presencia permanente en el televisor. Del berlanguiano "siente un pobre a su mesa" hemos pasado al "siente un pol¨ªtico en su plat¨®". Supongo que es un salto cualitativo.
Con la presentaci¨®n de Pablo Motos del l¨ªder socialista, "ha venido a divertirse", quedaban claras las aspiraciones del programa. El problema es que el concepto de diversi¨®n de Pedro S¨¢nchez, probablemente, no es compartido multitudinariamente. Fue una exhibici¨®n de la capacidad de un presidenciable de hablar a pi?¨®n fijo: no se sali¨® de su guion electoral ni por un momento. Prometi¨® todo lo que, a su juicio, resultaba atractivo para su electorado: ley de igualdad salarial entre hombres y mujeres, reforma de la Constituci¨®n, denuncia de los acuerdos con la Santa Sede... lo que haga falta. L¨¢stima que en todos los a?os en los que gobern¨® su partido no lo hicieran, es m¨¢s, si unos condecoran a las V¨ªrgenes, otras se pusieron la mantilla para asistir a alguna beatificaci¨®n por m¨¢s que constitucionalmente el Estado sea aconfesional. Debe de ser la diferencia entre el dicho y el hecho.
Dio la correspondiente le?a a los adversarios ("el que no asistiera Rajoy al debate es un desprecio a la ciudadan¨ªa", "Podemos son las Juventudes Comunistas" y "Ciudadanos, las Nuevas Generaciones del PP"), se mostr¨® coherentemente contradictorio al se?alar que los debates no son un combate de boxeo con ganadores y perdedores para luego afirmar que hab¨ªa ganado y asisti¨® educadamente a un juego de magia y al funcionamiento de una impresora 3D que trabaja con chocolate.
Una sugerencia: en el pr¨®ximo enfrentamiento entre pol¨ªticos, que el p¨²blico act¨²e como actuaban los espectadores del Rocky Horror Show: declamando a gritos las promesas. Ya nos las sabemos todas.
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