La naturaleza en aforismos
La especie que m¨¢s mata a sus semejantes es tambi¨¦n la que mejores poemas escribe
El tiempo no ha existido siempre. Naci¨® con la emergencia de la realidad hace unos 13.700 millones de a?os. Durante una primera edad del universo todo lo que existe persiste con el permiso de las leyes fundamentales de la f¨ªsica. No hace falta m¨¢s. Es la materia inerte. Por ejemplo: no existen estrellas c¨²bicas porque no son estables. Pero llega un d¨ªa en el que aparece el primer ser vivo y la estabilidad deja de ser suficiente. Se inaugura entonces una segunda edad del universo y en ella, adem¨¢s de estabilidad, se necesita adaptabilidad. Es la materia viva. Por ejemplo: los animales y las plantas necesitan agua, as¨ª que si les falta la buscan y si les sobra se la sacan de encima. Pero llega un d¨ªa en el que emerge una mente capaz de descubrir, de aprender y de crear y para ello no basta la estabilidad ni la adaptabilidad. Se inaugura entonces la tercera edad del universo: es la materia culta donde la cultura ya no es una cuesti¨®n de estabilidad o de adaptabilidad sino, sobre todo, una cuesti¨®n de creatividad. El equilibrio es entonces un estado de referencia: lo vivo huye del equilibrio y si una mente no se desequilibra para crear, entonces se desequilibra por no crear. Las tres edades de la materia, la inerte, la viva y la culta se integran as¨ª en la complej¨ªsima amalgama de la condici¨®n humana. Entonces, para bien o para mal, lo natural y lo cultural se funden y confunden.
1. Cultura es conocimiento adquirido por v¨ªa no gen¨¦tica.
2. Natural es todo lo que no es cultural.
3. Conocerse (a uno mismo) es distinguir (en uno mismo) lo natural de lo cultural.
4. Lo natural se usa como adjetivo suavizante de lo cultural (medicina natural, cocina natural, arquitectura natural, puerto natural, derecho natural, filosof¨ªa natural, historia natural¡).
5. Truco omnipresente en la historia universal de la infamia: hacer pasar reglas humanas por reglas fundamentales de la naturaleza o por reglas reveladas por una divinidad.
6. Natural es una palabra f¨¢cilmente parasitable por enfadosos menudillos ortogr¨¢ficos: sobrenatural, desnatural, antinatural, contranatural, innatural¡
7. El gozo por la naturaleza, que todos llevamos dentro, quiz¨¢ sea un vestigio ancestral de cuando viv¨ªamos inmersos en ella.
8. Existe la selecci¨®n cultural de ideas naturales (por ejemplo, el biomimetismo) y la selecci¨®n natural de ideas culturales (por ejemplo, el arte que trasciende en la historia).
9. La naturaleza amaga soluciones de problemas que ni siquiera se han planteado todav¨ªa.
10. En la naturaleza, la estrategia contraria a una buena estrategia puede ser tambi¨¦n una buena estrategia (especialista vs generalista, camuflarse vs exhibirse, actividad vs pasividad, mucha prole vs poca prole, sedentarismo vs nomadismo, blindaje vs agilidad¡).
11. Natural no es sin¨®nimo de saludable como bien ilustra una simple infusi¨®n de Conium maculatum (la cicuta).
12. No existen plantas t¨®xicas, solo dosis t¨®xicas.
13. Lo natural tranquiliza por evocaci¨®n directa (playa natural), lo naturalizado por evocaci¨®n pr¨®xima (playa naturalizada) y lo naturista por evocaci¨®n lejana (playa naturista).
14. Un paisaje natural que no incluya al ser humano quiz¨¢ no sea tan natural.
15. La especie que m¨¢s individuos mata de su propia especie es tambi¨¦n la especie que mejores poemas escribe.
16. La naturaleza es la parte exterior de nuestro interior m¨¢s ¨ªntimo.
17. La observaci¨®n de la naturaleza nos da las primeras pautas sobre lo bello y sobre lo inteligible.
18. Suena un estampido, un animal se desploma y un cazador se felicita por su amor a la naturaleza.
19. A¨²n no he logrado descifrar la expresi¨®n de un cazador que mira a c¨¢mara junto a una pieza cobrada que ya no mira a ninguna parte.
20. Puedo comprender mejor a un cazador furtivo que mata para comer que a un cazador deportivo que paga para matar.
21. Dos palabras bastan para montar una contradicci¨®n, por ejemplo: cazador deportivo.
22. Si la naturaleza es la respuesta, ?cu¨¢l es la pregunta?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.