Granada, el misterio de una ciudad musical

El mundo est¨¢ lleno de ciudades m¨¢gicas. Luego est¨¢ Granada, cuyo embrujo va m¨¢s all¨¢ y deja una huella que permanece en el tiempo. Un embrujo que cautiv¨® a poetas y a pintores y al que tampoco escapan los m¨²sicos, sumidos en una constante renovaci¨®n generacional desde que Miguel R¨ªos se subi¨® por primera vez a un escenario. El embrujo que ejerce la ciudad sobre los artistas es un misterio y ese misterio es el punto de partida de En Granada es posible, el sentido homenaje que las hermanas Mart¨ªn -Cristina y Mar¨ªa Jos¨¦- han rendido a la m¨²sica de su cuidad en forma de documental. "Han sido cuatro a?os muy duros", asegura Cristina, que confiesa que en algunos momentos el sue?o se convirti¨® en pesadilla. Han sido a?os de perseverancia para convencer a los grandes nombres de la cuidad de que merec¨ªa la pena contar sus historias y compartir un mismo escenario. "Al final lo conseguimos", apunta la realizadora. "Aunque por desgracia en ese tiempo muri¨® Enrique Morente".

El punto de partida de esta aventura es El ¨²ltimo vals, el documental de Scorsese que retrata el concierto despedida de The Band, una pel¨ªcula legendaria que las hermanas Mart¨ªn ve¨ªan de ni?as junto a su padre. "Nuestro padre siempre nos dec¨ªa que ten¨ªamos que hacer algo as¨ª, pero el proyecto fue creciendo". Y creci¨® tanto que casi nadie, a pesar de las viejas rencillas, se resisti¨® a participar. "Es un trabajo enternecedor", asegura Miguel R¨ªos desde Madrid. ¡°Su esfuerzo por mostrar esa realidad resulta heroico¡±, a?ade el cantante, que reconoce que nunca pens¨® que aquella idea fuese a salir adelante. ¡°Es tremendo, han juntado a gente que llevaba a?os sin hablarse¡±, admite Juan Alberto de Ni?os Mutantes.

El trabajo de Cristina y Mar¨ªa Jos¨¦ es un viaje por la historia musical granadina con testimonios y canciones de todos sus grandes protagonistas en distintos rincones de la ciudad, pero el punto de partida es una pregunta que busca las causas a la aparici¨®n de tantos artistas en una ciudad tan peque?a. Una pregunta que se convierte en un enigma con distintas teor¨ªas. El cantante de Lagartija Nick lo achaca al agua y a su mineralizaci¨®n en una de las escenas del documental. "Es una gran explicaci¨®n", bromea Juan Alberto. "Yo creo que tiene que ver con los bares en los que los j¨®venes nos hemos podido juntar con los m¨²sicos que admir¨¢bamos y ver que era posible dedicarse a esto", a?ade.

Cada uno tiene su respuesta a ese misterio musical que lleva dando grandes artistas desde Miguel R¨ªos a Lori Meyers pasando por 091, Los Planetas o Lagartija Nick. Aunque ahora haya buen ambiente entre los m¨²sicos, la colaboraci¨®n entre bandas no est¨¢ entre las causas, es m¨¢s bien un fen¨®meno reciente que ha tardado a?os en cuajar. "Antes hab¨ªa m¨¢s envidias y cada uno miraba a lo suyo", apunta Miguel R¨ªos. "Eso ahora ya no es as¨ª, aunque cuando est¨¢bamos empezando not¨¢bamos las miradas asesinas de los m¨¢s mayores¡±, a?ade el cantante de Ni?os Mutantes.

Tras la explosi¨®n de Miguel R¨ªos, hubo unos a?os sombr¨ªos hasta la aparici¨®n de 091, aquellos chavales con pintas raras que no triunfaron pero que dejaron su semilla en la ciudad y que dieron paso a otros proyectos. El sonido de 091, que cautiv¨® a otro enamorado de Granada como Joe Strummer, permiti¨® que la m¨²sica en la ciudad se desarrollase al margen de la Movida madrile?a. La m¨²sica granadina evolucion¨® a su manera y a la sombra del punk creci¨® la siguiente generaci¨®n, que en los noventa consolid¨® la m¨²sica indie en la ciudad. Ha pasado medio siglo desde que Miguel R¨ªos abriese el camino y la rueda sigue girando, cada poco tiempo aparece otro grupo dispuesto a subirse a un escenario para seguir la aventura, como en el caso de Sole¨¢ Morente, que el a?o pasado public¨® un disco acompa?ada de Los Planetas y Lagartija Nick . ¡°Granada tiene cosas muy buenas, pero a los que vivimos aqu¨ª nos cuesta verlas¡±, se?ala Cristina. ¡°Nos ha gustado poder hacer este homenaje a la ciudad para que en el futuro quede este testimonio¡±, a?ade. Han sido cuatro a?os de esfuerzo derribando puertas y cerrando heridas pero, como apunta Miguel R¨ªos, la historia merec¨ªa ser contada. Granada ya tiene su ¨²ltimo vals.