Contra la narrativa oficial
Roy denuncia con pasi¨®n, datos y valent¨ªa c¨ªvica extraordinaria los desmanes de los poderosos contra los m¨¢s d¨¦biles
?Por qu¨¦ a Arundhati Roy, famosa mundialmente por una ¨²nica novela, El dios de las peque?as cosas, en los telediarios de su pa¨ªs se la denomina terrorista de guante blanco o traidora y se organizan, orquestadas por los partidos fundamentalistas hind¨²es, manifestaciones a la puerta de su casa pidiendo que sea arrestada? ?Porque defiende, como en libros anteriores, a los afectados por la construcci¨®n de grandes presas, esos cientos de miles de personas expulsadas de sus selvas y monta?as y luego hacinadas en los barrios de chabolas que rodean las grandes ciudades de India, o porque denuncia la detonaci¨®n de bombas nucleares en el desierto de Rajast¨¢n en un alegato contra el belicismo desaforado y la falta de imaginaci¨®n ¨¦tica? ?Porque no se contenta, como hacen muchos otros intelectuales, con la narrativa oficial en materia econ¨®mica, pol¨ªtica o social y busca, casi a la desesperada, incoherencias, contradicciones y mentiras? ?Porque se indigna con el hecho de que a Soni Sori, una maestra adivasi (miembro de una tribu o un pueblo situado fuera del sistema de castas), est¨¦ en la c¨¢rcel despu¨¦s de que la torturaran introduci¨¦ndole piedras en la vagina para que confesara que era un correo mao¨ªsta y a quien lo hizo, un superintendente de la polic¨ªa, le fuera concedida la m¨¢xima distinci¨®n presidencial por su valor? ?Porque destapa las pruebas falsas que se usaron para acusar y luego colgar a Afzal Guru como uno de los responsables de haber asaltado el Parlamento y haber provocado varios muertos en el a?o 2001? ?Porque demuestra la fr¨¢gil o inexistente frontera entre medios de comunicaci¨®n indios e intereses industriales, algo que convierte a los primeros en manipuladores al servicio de los segundos? ?Porque se enfurece por el papel que las grandes fundaciones internacionales y las ONG globales tienen en la propaganda subrepticia de los valores m¨¢s salvajes del libre mercado y en la construcci¨®n de una conciencia colectiva acr¨ªtica, lo que les lleva a subvencionar ferias del libro, congresos acad¨¦micos o exposiciones de arte contempor¨¢neo de las que son expulsados los disidentes? ?Porque habla con rabia de los cientos de miles de suicidios que hay cada a?o de campesinos que no pueden afrontar sus microdeudas, esa perversi¨®n bancaria que ha hallado en la pobreza un nuevo caladero para el enriquecimiento de unos pocos y una plataforma para encumbrar con premios como el Nobel a sus inventores? ?Porque no se explica la raz¨®n de que los movimientos feministas y de derechos humanos liberales dejen fuera de su marco de acci¨®n a millones de personas que pertenecen a zonas de la sociedad alejadas de los focos (intocables o ind¨ªgenas, por ejemplo)? ?Porque no se olvida de los miles de fosas comunes de Cachemira o de los centenares de miles de encarcelados o masacrados (eviscerados, quemados, mutilados) por haber cometido el delito de seguir arando sus campos en lugares donde ej¨¦rcitos de milicianos organizados por el Gobierno y pagados por las grandes empresas limpian el terreno para crear zonas econ¨®micas especiales?
Espectros del capitalismo habla de todo eso y de muchas m¨¢s cosas con pasi¨®n, datos contundentes y una valent¨ªa c¨ªvica extraordinaria. Arundhati Roy se pone del lado de los que denomina ¡°esp¨ªritus del inframundo¡±, ¡°fantasmas¡± o¡°poltergeist¡± y en contra de los pol¨ªticos y empresarios delincuentes que compran comit¨¦s de expertos, acciones en los mercados de la revoluci¨®n e ideas de todos los colores (democr¨¢ticas, fascistas: eso es lo de menos) para sostener un sistema capitalista que necesita algo m¨¢s que guerras y consumo para perpetuarse. ?Es o no es para pedir que metan indefinidamente entre rejas a su autora?
Espectros del capitalismo. Arundhati Roy. Traducci¨®n de Carmen del Valle. Capitan Swing. Madrid, 2015. 112 p¨¢ginas. 15 euros
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