Eva Yerbabuena: ¡°Nunca he tenido miedo de dejar de ser flamenca¡±
La bailarina estrena en Jerez 'Apariencias', "un punto de inflexi¨®n" en su carrera
¡°Este espect¨¢culo es un punto de inflexi¨®n en mi carrera¡±, expone Eva Yerbabuena (Eva Garrido, Fr¨¢ncfort, Alemania, 1970) nada m¨¢s comenzar la conversaci¨®n, horas antes del estreno de su nuevo trabajo, Apariencias, que inaugur¨® el pasado viernes la vig¨¦sima edici¨®n del Festival de Jerez. Se trata de su d¨¦cima obra desde que debutara con su propia compa?¨ªa en 1998 con Eva, hasta su ¨²ltima creaci¨®n, ?Ay!, estrenada en el londinense Sadler?s Wells en 2013. Una carrera reconocida internacionalmente, que fue merecedora muy pronto del Premio Nacional de Danza (2001) cuando apenas hab¨ªa presentado sus primeras producciones.
Si se echa la vista atr¨¢s en un repaso por esas obras, es f¨¢cil observar que todas y cada una de ellas resultan ser producto de una b¨²squeda, si no una introspecci¨®n, que nunca es la misma, pero que, en todos los casos, parte de la manifiesta inquietud intelectual de su creadora. ¡°?Qu¨¦ es lo que te provoca indagar?¡±, se pregunta la bailaora. ¡°?La felicidad y la estabilidad? Lo dudo¡±, se responde. ¡°La necesidad de indagar viene de algo que te est¨¢ doliendo, que te hace dudar, que te parece injusto¡ En esos momentos hay una necesidad, por lo menos, de preguntarte¡±.
Y de preguntas se puebla este Apariencias desde la misma sinopsis con que la artista presenta su obra: "?Es necesario un conflicto para crear?¡± o ?nos sentimos invisibles si no creamos¡± son algunas de las cuestiones que se plantea, pero ¨Cse?ala- no son las ¨²nicas: ¡°la obra toda est¨¢ llena de preguntas que espero ir contestando con el paso del tiempo¡±.
En la traslaci¨®n de todas sus inquietudes, la bailaora reconoce que ha podido utilizar herramientas que pueden ser ajenas al arte que le es propio, pero que lo ha hecho ¡°porque nunca he tenido el miedo de dejar de ser flamenca¡±. Sin embargo, y ante el estreno de esta nueva obra, manifiesta sus dudas y no se muestra segura de si esas herramientas pueden desnaturalizar el car¨¢cter flamenco de la obra. ¡°Se ver¨¢ despu¨¦s del estreno¡±, afirmaba antes de su presentaci¨®n.
Las indagaciones de Yerbabuena se han realizado siempre desde un arte que a ella le ha parecido siempre ¡°algo muy contempor¨¢neo, por la sencilla raz¨®n de que a los seres m¨¢s contempor¨¢neos los vuelve locos¡±. Sin embargo, advierte que en este momento precisa despojarse de todo aquello que le hace ser considerada flamenca para ver cu¨¢les son sus propias necesidades y hasta d¨®nde y hacia d¨®nde la llevan.
Despu¨¦s del espect¨¢culo ?Ay!, que ha sido el ¨²nico de su carrera en el que Yerbabuena ha bailado sola, en Apariencias la core¨®grafa vuelve a contar con un cuerpo de baile exclusivamente masculino del que se siente muy orgullosa y que se antoja especialmente escogido: dos contrastados artistas, Christian Lozano y David Coria, solista del Ballet Flamenco de Andaluc¨ªa, junto a un debutante en la compa?¨ªa, ?ngel Fari?a y un superviviente de otros trabajos, Fernando Jim¨¦nez.
A ellos les toca la responsabilidad de trasladar la est¨¦tica en forma de coreograf¨ªa de una creadora exigente consigo misma y con los dem¨¢s. Tambi¨¦n juega un importante papel la percusi¨®n de Antonio Coronel, de un acorde tono inquietante, o la participaci¨®n de la cantante originaria de Guinea Bisau Alana Sink?y, que traslada la preocupaci¨®n de Eva por los problemas de la negritud. Junto a ella, las voces flamencas de Jos¨¦ Valencia y Alfredo Tejada, con una cuidada selecci¨®n de cantes. La direcci¨®n y creaci¨®n musical vuelve a estar en las manos del guitarrista Paco Jarana, imprescindible y siempre brillante veh¨ªculo de la est¨¦tica e inquietudes de Yerbabuena.
Las dudas y la denuncia encuentran su espacio en un espect¨¢culo donde Eva baila petenera con mant¨®n antes de un juego de mascaras ambiguo y cambiante en el que los bailaores dejan huella de su personalidad. En el final, la bailaora vuelve a la sole¨¢, el baile por el que siempre se la recuerda y m¨¢s se le reclama.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.