El Carnegie Hall, en los jardines de Espa?a
El director Pablo Heras-Casado y el pianista Javier Perianes, los dos espa?oles de mayor proyecci¨®n internacional en la m¨²sica cl¨¢sica, tocan en Nueva York a Falla y Turina
Hay dos nombres espa?oles en especial estado de gracia en el panorama de la m¨²sica cl¨¢sica, dos hombres de menos de 40 a?os, nacidos de familias sin v¨ªnculo con este arte, y con una imparable? proyecci¨®n internacional. Nunca hab¨ªan actuado juntos hasta el jueves por la noches y el suelo que fue testigo fue el del Carnegie Hall de Nueva York. El pianista Javier Perianes (Nerva, Huelva, 1978), Premio Nacional de M¨²sica de 2012, y el director de orquesta Pablo Heras Casado (Granada, 1977) ofrecieron un concierto de repertorio ¨ªntegramente espa?ol junto con la cantante de flamenco Marina Heredia, quien acabado el concierto, tras los aplausos, sali¨® de nuevo al escenario para cantar a capella y arrancar varios ol¨¦s en distintos acentos.
El repertorio, ¨ªntegramente espa?ol, inclu¨ªa El amor brujo y Los Jardines de Espa?a, de Manuel de Falla; La oraci¨®n del torero, de Joaqu¨ªn Turina; y Vistas al mar, de Eduardo Toldr¨¤. Estas dos ¨²ltimas eran territorio inexplorado para la orquesta de St Luke y Pablo Heras-Casado cuenta con ilusi¨®n c¨®mo se la ense?¨®. ¡°Cuando empezaron a leer la primera obra, y empezaron a meterse en ese territorio sonoro, y en ese color, mucha gente ven¨ªa a la pausa del ensayo a decirme que les parec¨ªa una maravilla. Y eso, trasladado luego el p¨²blico, creo yo que es tambi¨¦n la misi¨®n del artista, favorecer a transmisi¨®n de un legado, no solamente hacer un concierto bonito y que salgan buenas cr¨ªticas¡±, dec¨ªa el director un rato antes de la actuaci¨®n.
Viene del dirigir un Rigoletto en el MET de Nueva York y a la Filarm¨®nica de Viena. Dice que no es religioso, pero s¨ª espiritual, y que el Carnegie, esa sala de conciertos financiada por Andrew Carnegie, una de las grandes fortunas del siglo XIX de Estados Unidos, siempre crea una atm¨®sfera especial. ¡°Para m¨ª esto es un templo, son 125 a?os en pie y ya naci¨® como un mito, con Chaikovski inaugurando y, a partir de ah¨ª, ha pasado toda la historia de la m¨²sica. Yo creo que los espacios guardan algo en sus paredes y, cuando te subes a ese escenario, sientes esa emoci¨®n¡±.
Primera vez en Nueva York
Perianes lo pis¨® por primera vez en 2004, cuanto era una veintea?ero, en un recital de piano solo en la sala peque?a. Perianes llega a Nueva York previo paso por Boston, dentro de una suerte de gira americana que le llevar¨¢ tambi¨¦n a Chicago o Atlanta. Se conmemora, adem¨¢s, el centenario de las Noches de los jardines de Espa?a. ¡°Es la obra paradigm¨¢tica que tenemos los pianistas espa?oles con orquesta¡±, dice Perianes. Han dejado su sello en ella pianistas como Alicia de la Rocha, Josep Colom, Rafael Orzoco o Esteban S¨¢nchez y otros no espa?oles como Daniel Barenboim.
¡°La particularidad que tiene es que no es de concierto normal para orquesta porque el piano es una parte m¨¢s de la orquesta que a veces colorea con el sonido cosas que hacen otros instrumentistas, a veces acompa?a o act¨²a de solista, pero no es un concierto como el de Beethoven o Mozart, donde el piano hace el papel de solista fundamental¡±, a?ade, algo que a su juicio, no le resta magia alguna a la obra, una mezcla de folclore espa?ol y color de la m¨²sica francesa.
Perianes tambi¨¦n ha dejado su sello en Falla, el ¨¢lbum dedicado al granadino fue nominado a los Grammy Latino en 2012. Del pianista dijo el cr¨ªtico Enrique Franco, hace 16 a?os, que era ¡°un m¨²sico grande, tocado por la gracia¡± con un arte ¡°limpio, expresivo, amoroso, de bien sonar y bien cantar¡±. En su camerino, un par de horas del concierto, no ve grandes cambios respecto a la ¨¦poca en la que era una promesa: ¡°Creo que solo cambia mi edad porque creo que mi ilusi¨®n permanece intacta, dir¨ªa incluso que siento m¨¢s pasi¨®n, soy m¨¢s consciente de lo que esto viviendo¡±.
Babelia
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