Los sue?os nost¨¢lgicos de Richard Linklater
El director texano, h¨¦roe en Austin, estrena en el festival SXSW su filme ¡®Everybody Wants Some¡¯ y un documental sobre su carrera
Seg¨²n Ethan Hawke, las pel¨ªculas de Richard Linklater ¡°son ideas que, de alguna manera, todo el mundo tiene¡±. ¡°Cuando vi Slacker pens¨¦: ¡®Yo he tenido esa idea¡¯; Antes del amanecer: ¡®Quiero hacer una pel¨ªcula conmigo y una chica hablando¡¯; Dazed and Confused: ¡®Quiero hacer una pel¨ªcula sobre graduarse en el instituto¡±, enumera el actor, aunque sabe que al director, y buen amigo, no le gusta mucho o¨ªrlo. ¡°Son todas cosas obvias de las que la gente habla, pero tambi¨¦n son imposibles de convertir en una pel¨ªcula. Y Rick lo ha hecho¡±, concluye Hawke en Dream is destiny, el documental sobre Linkater, un recorrido cronol¨®gico y sentimental a su carrera, estrenado este fin de semana en el festival SXSW de Austin.
Ese es el secreto y el ¨¦xito de Linklater, que se ha pasado 20 a?os convirtiendo la vida en pel¨ªculas. No es tarea f¨¢cil, como vuelve a confirmar este documental que ha dirigido Louis Black, ¨ªntimo amigo del director y cofundador del SXSW, pero Linklater lo ha conseguido. Desde Slacker, cuyo acierto fue retratar a una audiencia que a¨²n no se hab¨ªa visto en la pantalla, a la ¨²ltima, Everybody Wants Some, en la que apela con mucho humor ¡ªde sonora carcajada¡ª a la nostalgia m¨¢s pura, la que vive ¨¦l, a sus 56 a?os, de su vida universitaria; y con la que inaugur¨® por fin su querido festival de Austin.
A Linklater en Austin todo el mundo le llama Rick. No solo sus amigos y paisanos texanos, como Ethan Hawke, Matthew McConaughey y Louis Black, tambi¨¦n el p¨²blico. ¡°Rick, ?qu¨¦ consejo dar¨ªas a alguien que quiere triunfar en el cine, pero no salir de Austin?¡±, le pregunt¨® el viernes un espectador tras el pase de Everybody Wants Some. Linklater es un h¨¦roe local en la capital de Texas. Precisamente, porque a finales de los ochenta se mud¨® a Austin en vez de a Nueva York o Los ?ngeles cuando el sue?o de ser jugador de b¨¦isbol profesional se vino abajo y decidi¨® que quer¨ªa ser director de cine y no novelista. Tampoco se fue a Hollywood cuando Hollywood llam¨® a su puerta tras quedarse sorprendido con Slacker. Aunque s¨ª hizo su siguiente filme, Dazed and Confused, apoyado por la industria, que le abandon¨® cuando vio el resultado: un retrato de la juventud sin ning¨²n tipo de filtro, con buena m¨²sica y muchas drogas.
Everybody Wants Some es ¡°secuela espiritual¡± de Dazed and Confused, seg¨²n Linklater. Aquella ocurr¨ªa en el instituto, esta en la universidad. Pero tambi¨¦n es una continuaci¨®n l¨®gica de Boyhood, su pel¨ªcula m¨¢s aplaudida rodada a lo largo de 12 a?os. En ella, el protagonista, Mason, crec¨ªa delante de nuestros ojos y en la ¨²ltima escena conduc¨ªa hacia la universidad, hacia la vida adulta. En Everybody Wants Some, aunque situada en 1980, el personaje principal, Jake, llega en coche a la que ser¨¢ su residencia universitaria, compartida con su equipo de b¨¦isbol. Linklater era Mason y tambi¨¦n es Jake. Linklater ¡°pone un pedazo de ¨¦l en todas sus pel¨ªculas¡±, como dice Hawke en el documental. Y obliga al espectador a ponerlo tambi¨¦n. A reconocerse en Mason, en Jake o en Celine y Jesse en cualquier fase de su tr¨ªptico del amor, Antes del amanecer, Antes del atardecer y Antes del anochecer.
Linklater decidi¨® ser director de cine porque descubri¨® que era el mejor medio para encontrarse y expresarse, pero tambi¨¦n para ¡°contar historias reales de personas reales¡±. Poco le ha importado lo que Hollywood piense de ¨¦l porque para ¨¦l no es m¨¢s que una herramienta. ¡°Lo llaman ¡®industria de los sue?os¡¯, pero si te acercas no hay sue?os y prefiero pasar mi tiempo so?ando sobre historias¡±, dice en el documental titulado no por casualidad Dream is destiny (El sue?o es el destino). Linklater so?¨® que quer¨ªa ser director y sus sue?os fueron alcanzados por su destino.
En estas m¨¢s de dos d¨¦cadas de carrera, se ha dedicado a perfeccionar sus habilidades t¨¦cnicas hasta ser capaz de reproducir en pantalla esas ideas universales, no simples, de las que habla Hawke. Como lo son las que hay detr¨¢s de Everybody Wants Some. ¡°Me parece que podr¨ªa ser mi pel¨ªcula n¨²mero dos por el esp¨ªritu joven, pero he podido aportar mucha m¨¢s experiencia¡±, reconoce.
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