Alondra Bentley eleva el vuelo

Cuando era peque?a, en esas cosas de ni?os, Alondra Bentley dudaba entre ser astronauta o ser artista en el futuro. L¨®gicamente, gan¨® la segunda. Con una madre pintora y un padre poeta, el espacio le quedaba todav¨ªa m¨¢s lejos que al resto. Durante mucho tiempo pens¨® que se dedicar¨ªa a las artes pl¨¢sticas, pero finalmente su campo de expresi¨®n fue la m¨²sica. Su cuarto disco, Resolutions (Gran Derby Records), ha sido uno de los mejor recibidos de los ¨²ltimos meses en la escena indie espa?ola (obtuvo dos nominaciones en los Premios de la M¨²sica Independiente). En ¨¦l ha vuelto a dejar una colecci¨®n de canciones delicadas y deliciosas, aunque con un ropaje algo distinto: si antes mandaba la guitarra ac¨²stica, ahora lo hacen los teclados, sintetizadores y arreglos de cuerda. Su sonido es menos folk y m¨¢s pop. ¡°Me he salido de mi zona de confort y me he sentido m¨¢s yo que nunca; eso es raro. No he hecho algo f¨¢cil¡±, cuenta la cantante angloespa?ola (naci¨® en Lancaster y a los cinco a?os se fue a vivir a Murcia con su familia).

El deseo de cambio estaba en su cabeza, pero faltaba alguien que tradujera eso en canciones rematadas. ¡°Mi forma de escribir es muy intuitiva y f¨¢cilmente pod¨ªa haber acabado haciendo algo muy distinto¡±, confiesa. Esa persona fue el productor estadounidense Matthew E. White, responsable tambi¨¦n, junto a su comunidad de m¨²sicos, Spacebomb, de uno de los ¨¢lbumes m¨¢s cautivadores del a?o pasado, el de la debutante Natalie Prass (de t¨ªtulo hom¨®nimo).

Bentley y White se conocieron en 2014 en un concierto de ¨¦l en Ourense (tiene dos reconocidos discos), ella le pidi¨® su colaboraci¨®n y ah¨ª comenz¨® un extenso intercambio de ideas que termin¨® con la cantante cruzando el Atl¨¢ntico para grabar. ¡°Generalmente, el productor te ve, te escucha y tiene muy claro qu¨¦ quiere hacer con cada tema. Pero Matthew hizo algo que no hab¨ªan hecho antes conmigo: me interrog¨® a diario durante meses para conocer que buscaba yo en cada canci¨®n, a qu¨¦ quer¨ªa sonar. ?l tambi¨¦n se sali¨® de su zona de confort. Definimos tanto las cosas en los meses previos que en el estudio todo fue rapid¨ªsimo¡±, explica despu¨¦s de interpretar un par de temas para EL PA?S.

Tras este cambio de registro, ?qu¨¦ sensaciones tiene cuando escucha sus trabajos anteriores? ¡°No lo suelo hacer. Para nada reniego de ellos, pero me gusta la sensaci¨®n de evoluci¨®n¡±, afirma. Tanto que, conquistada su nueva zona de confort, ya se le empieza a pasar por la cabeza ¡°buscar otra¡± para la pr¨®xima grabaci¨®n. Una predisposici¨®n al movimiento que nada tiene que ver con el ¡°torpe¡± encasillamiento en el que se vio envuelta al inicio de su carrera cuando fue incluida en el grupo de ¡°chicas con guitarra¡±, junto con Russian Red o Anni b Sweet. ¡°Esa generalizaci¨®n provoc¨® cansancio y aburrimiento. Me molest¨® un poco porque no me sent¨ªa c¨®moda¡±, se?ala.

Alondra L¨®pez Bentley (su nombre de DNI) quiere ser solo cantante, pero ¨²nicamente puede ejercer de ello a media jornada, despu¨¦s de ense?ar ingl¨¦s a peque?os de 3 y 4 a?os a trav¨¦s de los cuentos, la danza o la m¨²sica (su tercer ¨¢lbum es solo para ni?os). ¡°Me encanta pero me agota¡±, reconoce. ¡°Resolutions lo escrib¨ª enfrent¨¢ndome al cansancio de llegar a casa y tener muy pocas horas para lo que realmente es prioritario para m¨ª. En Espa?a es muy dif¨ªcil vivir de tu carrera art¨ªstica. La gente tiende a no contar las penurias que pasa por dedicarse a su arte porque parece que eso desmerece o hace que seas menos profesional, pero es importante explicar c¨®mo es tu d¨ªa a d¨ªa. Aqu¨ª no hay clase media musical: est¨¢ el mainstream y luego los que seguimos en el circuito independiente, pero yo no me considero underground. Aparezco en grandes medios y toco en el extranjero¡±.

Su sonrisa perfecta y su voz suave no esconden el fastidio por un panorama espa?ol que no termina de entender. ¡°La m¨²sica se identifica con la fiesta, la noche y salir de festivales, y todo lo que no sea eso no tiene cabida. Te dicen que tu proyecto no es para festivales y yo respondo que depende, que fuera se hacen de todo tipo¡±, a?ade. Alondra, como el tipo de ave del que toma su nombre, reivindica la m¨²sica tambi¨¦n como un ejercicio diurno.