Fangoria, electropop contra el paso del tiempo

A Fangoria le result¨® extra?o que los invitaran a participar en un concierto b¨¢sico, los recitales ¨ªntimos que organiza Los 40 Principales por su medio siglo. El calificativo b¨¢sico, por descontado (y nada m¨¢s que hay que verlos encima de un escenario) no va con ellos. La emisora musical, sin embargo, les ofreci¨® la posibilidad de hacerlo. Una negativa era impensable. Teniendo en cuenta que casi toda la trayectoria de Olvido Gara y Nacho Canut ha estado ligada de alguna manera a la cadena, ten¨ªan que estar, s¨ª o s¨ª, en las celebraciones de su aniversario. "Significa que sigues vigente despu¨¦s de much¨ªsimos a?os. Independientemente de los a?os que hayan pasado para Los 40, tu tambi¨¦n sigues ah¨ª". Y este mi¨¦rcoles, por fin, el d¨²o fue el rey de los festejos. Ofrecieron un recital en el C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid en un concierto plagado de himnos imperecederos de toda su carrera, uni¨¦ndose as¨ª a la lista de artistas que han participado en estos eventos, como Alejandro Sanz, Estopa y Birdy.

El espect¨¢culo, en la jerga de Olvido Gara ¡°peque?a reuni¨®n de amiguitas de Instagram¡±, puesto que el p¨²blico consigui¨® las entradas por la red social, fue construido como un relato con mucha Historia. La de sus canciones. Con No s¨¦ que me das, del disco Naturaleza muerta, que son¨® a mitad del concierto, se estrenaron en Los 40 principales all¨¢ por el 2001, cont¨® Alaska. Tras una temporada ¡°en el infierno¡±, volvieron a pisar fuerte en las ondas gracias a Geometr¨ªa polisentimental, un tema de su ¨²ltimo trabajo, publicado en febrero, Canciones para robots rom¨¢nticos. De ese ¨¢lbum adelantaron tambi¨¦n su pr¨®ximo sencillo, Fiesta en el infierno.

Qued¨® claro, adem¨¢s, que la barrera generacional no va con ellos. Gran responsabilidad en captar a sus seguidores m¨¢s j¨®venes la ha tenido Los 40. "Mucha gente nos ha descubierto por la radio. Gente que no es de mi generaci¨®n, y eso es muy significativo. Mi experiencia es que cada vez que alg¨²n disco nuestro ha sonado en la radio, nos ha encontrado p¨²blico nuevo", se?ala la artista. "La gente que ya te conoce se molesta en buscarte, en seguirte... Pero el que no, solo te puede descubrir en las ondas", a?ade.

Ese p¨²blico menos veterano tambi¨¦n estaba all¨ª coreando a pleno pulm¨®n a la par que Alaska. Ella, sin perder una chispa de su majestuosa pose orgullosa y distante, enton¨® las letras de despecho y desgarradoras decepciones amorosas. Cuestion¨® a su infiel amante en C¨®mo pudiste hacerme esto a m¨ª, exclam¨® Que desfachatez, se pas¨® un buen rato Retorciendo palabras de amor, pidi¨® encontrar Un hombre de verdad y se lament¨® de su suerte en Miro la vida pasar. Entretanto, sac¨® su lado m¨¢s ochenteramente oscuro (y de paso, el de todo el p¨²blico), a golpe de nostalgia. Version¨® Quiero ser santa, de Par¨¢lisis Permanente y resucit¨® a Dinarama con Perlas ensangrentadas.

Dramas y comedias, del ¨¢lbum Cuatricom¨ªa (2013) y detr¨¢s Disco Sally, canci¨®n del ¨²ltimo disco que homenajea a Studio 54, simularon ser los ¨²ltimos coletazos. Pero no. Se echaban en falta canciones, y lo sab¨ªan. El espect¨¢culo habr¨ªa quedado incompleto sin el broche final. Los bises retrocedieron de nuevo en el tiempo. ¡°Como somos unos discos Sallys, nos acordamos de estos 50 a?os de Los 40. Y estas canciones fueron carne de ca?¨®n de esos conciertos de domingo por la ma?ana que organizaba la emisora hace mucho tiempo¡±, brome¨® Olvido para dar paso, ya s¨ª, al ep¨ªlogo del concierto. Sonaron entonces dos hitos de la Movida de sello Dinarama rescatados por Fangoria: Ni t¨² ni nadie y A qui¨¦n le importa. Porque Fangoria es as¨ª, y as¨ª seguir¨¢.