New Order exhibe su clasicismo en la ¨²ltima noche del S¨®nar

Puntuales como el t¨¦. A las 22:30h de ayer noche New Order se reencontraron con el S¨®nar abriendo la ¨²ltima noche en su escenario m¨¢s grande. Nada m¨¢s salir a escena ya saludaron al personal e inmediatamente comenzaron su recital con ¡°Ceremony¡± para seguir con ¡°Crystal¡±, inicio de un repertorio que estaba previsto se nutriese en buena medida de su ¨²ltimo disco, ¡°Complete Music¡±. Con un espect¨¢culo eficiente aunque no deslumbrante, la banda continu¨® con ¡°Restless¡±, dando vida a un festival que en la tarde de ayer realiz¨® su balance de edici¨®n.

Y los n¨²meros han avalado al proyecto, que este a?o ha alcanzado las 115.000 visitas, lo que supone que cada d¨ªa han visitado el tramo diurno 45.000 personas y 69.000 el nocturno. El festival se felicit¨® por la marcha de su proyecto Sonar+D, que este a?o alcanzaba su cuarta edici¨®n. Planteado como lugar de encuentro entre empresa, tecnolog¨ªa y creaci¨®n, la direcci¨®n del festival manifest¨® haber logrado el formato id¨®neo para el +D, que tambi¨¦n ha sido avalado por cifras notables, tales como 4.700 acreditados de 2.600 empresas procedentes de unos 60 pa¨ªses. Todo parece indicar que la v¨ªa abierta por el Sonar m¨¢s all¨¢ de los escenarios se ha confirmado como una apuesta tan novedosa como original, tal y como en su d¨ªa lo fue el propio festival. Por cierto, esta edici¨®n ha mantenido la mayor¨ªa de visitantes extranjeros, que suman un 53% de la asistencia, proviniendo de 101 pa¨ªses. A todo esto el Sonar anunci¨® que este a?o contar¨¢ con dos nuevas ciudades, concretamente Estambul y Hong Kong, lo que sostiene el crecimiento internacional de la marca.

Los ingleses siguen siendo los extranjeros m¨¢s presentes en el festival, que en cuanto a p¨²blico acoge visitantes de 101 pa¨ªses que supone un 53% del total

Por lo que hace a la tarde de ayer dos fueron los aspectos que destacaron: la lluvia y el ruido. Siendo el Sonar un festival que apenas se ha mojado en 23 a?os, el chaparr¨®n que cay¨® a media tarde result¨® noticioso. Nada ocurri¨®, ya que al haber c¨¦sped artificial y suelo de piedra no apareci¨® el barro tan caracter¨ªstico de Glastonbury. El p¨²blico se limit¨® a guarecerse en las carpas del Village y dem¨¢s espacios cubiertos del festival y la lluvia, cuando ya hab¨ªa amainado, sirvi¨® para que los c¨¢maras que sirven la se?al a las pantallas, realizasen est¨¦ticos desenfocados que tomaban el ya entonces sirimiri como motivo est¨¦tico. Ning¨²n concierto hubo de ser cancelado a causa de la tormenta.

Por lo que hace al ruido, ¨¦ste se articul¨® de diferentes maneras. Con Oneothrix Point Never, que realiz¨® un directo arrasador por agresivo, se articul¨® entorno al death metal cruzado con la electr¨®nica. Daniel Lopatin (Oneothrix) usaba la voz a trav¨¦s de un micro que la distorsionaba, y junto a un guitarrista organiz¨® un caos letal. Mucho m¨¢s matem¨¢tico y ordenado result¨® Alva Noto, art¨ªfice de una electr¨®nica quir¨²rgica, limpia, caracterizada por las texturas de sus sonidos. M¨¢s tarde actu¨® junto a Ryoji Ikeda, con quien firma el proyecto Cyclo, y all¨ª, gracias al japon¨¦s, la cuadratura electr¨®nica de Alva Noto se polucion¨® con ruido. Sonar y ruido, unos cl¨¢sicos anuales.