Invasi¨®n ¡®heavy-metal¡¯ en un pueblo gallego

Imaginen a un grupo de chavales que quieren llevar a su pueblo a su banda favorita. Esos eran Iv¨¢n P¨¦rez e Iv¨¢n M¨¦ndez, el pueblo era Viveiro y el grupo de hardcore Sick of it all. Despu¨¦s de hacer un proyecto y presentarlo al Ayuntamiento y dar mucho la tabarra, el 18 de noviembre de 2006 la banda toc¨® (entrada gratuita) "detr¨¢s del campo de f¨²tbol nuevo", seg¨²n el cartel. Era la primera edici¨®n del Resurrection Fest, un festival que, 11 a?os despu¨¦s, se ha consolidado como uno de los m¨¢s destacados de Europa en su g¨¦nero (rock, metal, punk y hardcore), ha pasado a tener tres escenarios y cuatro d¨ªas de programaci¨®n. En esta edici¨®n esperan a 80.000 personas y a Iron Maiden como cabeza de cartel.

"Ni de co?a cre¨ª que esto fuera a ser as¨ª. De hecho, pens¨¦ que la primera edici¨®n ser¨ªa la ¨²ltima, y ni siquiera cuando hab¨ªan pasado tres a?os se me ocurri¨® que esto fuera a llegar aqu¨ª", cuenta M¨¦ndez (Viveiro, 1986), director desde ese primer cartel en 2006 con siete bandas (Sick of it all, Walls of Jericho, Twenty Fighters, Anal Hard, Ofensiva, The Band Apart y Sound of Silence). Ahora, el festival ocupa todo su tiempo, "a m¨ª y a todo el equipo"; se profesionalizaron y el Resurrection se convirti¨® en un trabajo. M¨¦ndez bromea con que hac¨ªa sus "buenas pr¨¢cticas" con el evento mientras estudiaba Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas.

"Poquito a poco", entona M¨¦ndez. No ten¨ªan medios, ni econ¨®micos ni materiales, para hacerlo crecer. Fueron a?adiendo d¨ªas y escenarios y mientras, los vecinos, anta?o reacios a lo desconocido, fueron adapt¨¢ndose a esa marea que llegaba una vez al a?o y que cada vez era mayor. "Lo esperan ahora todo el a?o, es el evento musical m¨¢s grande de Galicia y genera un impacto econ¨®mico enorme", apunta M¨¦ndez. Para esta edici¨®n se prev¨¦n 6,15 millones de euros de ingresos, 300 puestos de trabajo directos y 500 indirectos.

La comarca de La Mari?a Occidental bulle d¨ªas antes y d¨ªas despu¨¦s. "Hay muchos que se vienen una semana antes, incluso las bandas. Todo est¨¢ agotado y muchos vecinos alquilan sus propias casas y sus parcelas para los que llegan". Adem¨¢s de los hoteles, las pensiones y los pueblos de alrededor, el Resurrection tiene cuatro zonas de acampada, tres de ellas gratuitas, y la otra, una especie de camping VIP dentro del recinto del festival.

P¨²blico joven, ni?os incluidos

Asegura M¨¦ndez que el Resurrection no tiene el t¨ªpico perfil de heavy metal: sino que comprende una franja de edad entre los 18 y los 35 a?os, algo m¨¢s masculino que femenino (55-45%) y sobre todo espa?ol. "Aunque hay mucho p¨²blico internacional, de Portugal y Francia sobre todo. Y luego Sudam¨¦rica". Este a?o se han vendido entradas a 36 pa¨ªses, entre ellos M¨¦xico, Argentina, Venezuela, Colombia, Indonesia, Australia y Jap¨®n.

"Supongo que esto tiene mucho que ver con qu¨¦ es lo que lo rodea. Playas, naturaleza, la r¨ªa. Es un sitio impresionante y marca definitivamente la experiencia musical que se vive aqu¨ª. La gente se viene como de vacaciones y cada uno de los habitantes de Viveiro est¨¢ volcado con el festival". Fue ese ambiente familiar, y una foto subida a las redes sociales, lo que termin¨® de abrir la cita musical: hace tres a?os comenz¨® el ResuKids.

En 2013, subieron a las redes sociales una imagen de una madre con su hijo: "Era entra?able, ella ten¨ªa tatuajes y el ni?o llevaba algo pintado en los brazos. Tuvo una tremenda acogida. Aquello nos hizo pensar y darnos cuenta de que en el perfil del festival ya entraban los que ten¨ªan hijos y no hubo m¨¢s que hablar". Este a?o han agotado plazas (m¨¢s de 100 cada d¨ªa) y est¨¢n convencidos de que es imprescindible: "Inculcar la m¨²sica desde peque?os es necesario, los padres est¨¢n tranquilos mientras se cuida de ellos, porque es como una ludoteca al fin y al cabo. Solo que all¨ª se suben al escenario, escuchan y aprenden m¨²sica, conocen el recinto... se vuelven locos".

Los que vayan este a?o podr¨¢n volverse locos con Iron Maiden, la m¨ªtica banda brit¨¢nica que M¨¦ndez reconoce que les ha supuesto llegar a un p¨²blico que hasta ahora no los conoc¨ªa. "Siguen siendo uno de los mejores conciertos rock que te puedes encontrar". Lo vieron como un reto: "?Estamos preparados para esto?", se preguntaron. Y por c¨®mo han ido las conversaciones, parece que s¨ª. "Ellos ya conoc¨ªan el festival, y aunque han sido seis meses de negociaci¨®n, tuvieron voluntad y pusieron las cosas f¨¢ciles desde el minuto uno". As¨ª que este s¨¢bado, Steve Harris y su banda se subir¨¢n al escenario principal del Resurrection Fest, atronaran Viveiro y, antes o despu¨¦s, comer¨¢n pulpo, o unas navajas con arroz.