Matt Damon: ¡°Los paparazis no pierden el tiempo conmigo¡±

A?o tras a?o. En los restaurantes, los aeropuertos, por la calle. Matt Damon viv¨ªa en un d¨¦j¨¤ vu: ¡°Mucha gente se me acercaba y me dec¨ªa: ¡®Por favor, ?haced otra pel¨ªcula!¡±. A Paul Greengrass, el director, le pasaba lo mismo. ¡°Est¨¢bamos abrumados por un p¨²blico tan leal. He hecho filmes que no ha visto nadie¡±, asegura el actor (Cambridge, 1970). Hasta un esp¨ªa de voluntad inquebrantable hubo de ceder ante tama?a presi¨®n popular. He aqu¨ª la principal raz¨®n del regreso de Bourne, cuya quinta pel¨ªcula ¡ªla cuarta con Damon¡ª llega el 29 de julio a las salas.

El otro motivo detr¨¢s de Jason Bourne, de la que Damon es tambi¨¦n productor, es que por fin ten¨ªan ¡°una historia que mereciera la pena contar¡±. El actor se hab¨ªa bajado de la franquicia ante la ausencia de Greengrass y por guiones poco convincentes ¡ªfue sustituido por Jeremy Renner en la cuarta entrega¡ª. Pero ahora Bourne est¨¢ de vuelta con sus sellos habituales: persecuciones, dobles juegos y un periplo por todo el planeta, de Atenas a Las Vegas. El filme est¨¢ adem¨¢s atado a la actualidad, de ah¨ª que el agente se cruce con protestas en Grecia o en la CIA hablen de las filtraciones de Snowden. ¡°Estoy agradecido de que esas informaciones se hayan hecho p¨²blicas. La cuesti¨®n principal de nuestros tiempos y de esta pel¨ªcula es la relaci¨®n entre derechos civiles y seguridad¡±, asegura Damon.

Junto con el mundo, su personaje tambi¨¦n ha cambiado. En 2002, El caso Bourne arrasaba en la taquilla con una versi¨®n con m¨¢s rabia y menos glamur de James Bond, un tipo atormentado en busca de su pasado. El triunfo del filme confirmaba la tesis de Doug Liman, director del primer episodio y luego productor. ¡°Fue el primero que vio claro que hab¨ªa un hueco m¨¢s all¨¢ de 007¡±, relata Damon. En estos 14 a?os, Bourne ha recuperado la memoria, pero no el alivio: ¡°Si quieres resucitar la franquicia tienes que pensar que su vida se volvi¨® a torcer. Si todo le ha ido bien, no hay pel¨ªcula¡±.

Matt Damon: ¡°Los paparazis ni pierden el tiempo conmigo¡±

?Y Damon en qu¨¦ es distinto respecto a 2002? ¡°Ten¨ªa 29 a?os, era casi un estudiante. Hoy tengo 45 y cuatro hijas¡±. De ah¨ª que la misi¨®n de ponerse en forma a lo Bourne tambi¨¦n fuera m¨¢s complicada: el actor no recomendar¨ªa ¡°a nadie¡± el r¨¦gimen que ha seguido. Su carrera tambi¨¦n ha evolucionado: a la saz¨®n, empezaba a brillar gracias a El indomable Will Hunting o Salvad al soldado Ryan. Hoy en d¨ªa es un divo, que fue nominado al Oscar por Marte, ha trabajado con Scorsese y se plantea hacer de superh¨¦roe, siempre y cuando sea su amigo Ben Affleck quien le dirija.

Pese a todo esto, Damon se define como una ¡°mala estrella de Hollywood¡±. ?Por qu¨¦? ¡°Los paparazis no pierden el tiempo conmigo. Soy un padre suburbano que va a entrenamientos de f¨²tbol. No soy ninguna historia, pero eso me permite disfrutar de una vida relativamente normal¡±. Lo cierto es que los fot¨®grafos dejaron hace a?os de acampar ante casa Damon.

Tal vez su normalidad contribuya a otra de sus etiquetas: ¡°rentable¡±. Forbes calcul¨® hace a?os que por cada d¨®lar cobrado por Damon sus filmes ingresaban 29. Y muchos cr¨ªticos creen que el p¨²blico se identifica con ¨¦l. Pero el actor encuentra otra clave: ¡°El cine es un medio de directores. No es que yo sea rentable, son ellos. Cuanto m¨¢s trabajes con buenos cineastas, har¨¢s mejores filmes, que son los que el p¨²blico tiende a ver¡±. De hecho, el nombre detr¨¢s de la c¨¢mara es su criterio para aceptar un proyecto. Su otra regla f¨¦rrea, por cierto, es no estar nunca m¨¢s de dos semanas separado de su familia.

Al repasar su carrera, el actor vuelve a referirse a Bourne: ¡°Me ha ayudado para todos los trabajos que he hecho. Ahora estoy en esa peque?a lista que miran los estudios y piensan: ¡®Hagamos una pel¨ªcula con ¨¦l¡±. Eso s¨ª, cree que ni su alter ego podr¨ªa con Donald Trump: ¡°Me da miedo. Y no tanto por sus pol¨ªticas como por su car¨¢cter¡±. Para explicarse, relata la siguiente historia: en los ochenta el periodista Graydon Carter escribi¨® que Trump ten¨ªa las manos peque?as. Desde entonces, el magnate no ha parado de enviarle fotos de sus manos, para convencerle de lo contrario. Y en ello sigue. ¡°Imagine que esto se junta con el poder que da la presidencia de los Estados Unidos¡±, agrega. Todo lo contrario que Obama, al que el actor defiende como uno de los tipos ¡°m¨¢s brillantes¡± que se haya sentado nunca en la Casa Blanca.

En todo caso, el futuro de su pa¨ªs se resolver¨¢ en las elecciones de noviembre. El de Damon prev¨¦ un filme con Alexander Payne, uno con Zhang Yimou y, alg¨²n d¨ªa, la direcci¨®n. ?Y Bourne? ¡°Cada vez que Paul [Greengrass] me lo pida, estar¨¦ encantado de retomarlo¡±. Y si no, ya se encargar¨¢ el p¨²blico de convencerles.