El Bronx contrapone flores reales con las pintadas en cuadros
El Jard¨ªn Bot¨¢nico de Nueva York se inunda de luz, sombras y colores
Estados Unidos tambi¨¦n tuvo a sus impresionistas entre finales del siglo XIX y principios del XX. John Singer Sargent, conocido por pintar a hombres poderosos (John Rockefeller o Theodore Roosevelt), su amigo William Merritt Chase, asiduo viajero a Europa que pint¨® Soleada Espa?a, o Frederick Childe Hassam, autor de varias obras populares sobre Central Park. Sus trabajos sobre jardines, un elemento permanente en la pintura impresionista, se pueden visitar estos d¨ªas en el Bronx.
El Jard¨ªn Bot¨¢nico de Nueva York, 250 acres de naturaleza y paisaje en la ciudad estadounidense m¨¢s populosa, ha organizado una exposici¨®n bajo el t¨ªtulo Impresionismo. Jardines Americanos sobre lienzo que busca mezclar las flores reales con las pintadas en los cuadros. Francisca Coelho, dise?adora y conservadora del parque, ha sido la encargada de interpretar y emular en la vida real los tapices de amapolas, dalias o malvarrosas que inspiraron a Hassam, Singer Sargent y sus contempor¨¢neos. La muestra, que se puede visitar hasta el 11 de septiembre, re¨²ne adem¨¢s una veintena de cuadros y esculturas a la captura de la luz, las sombras y los colores.
El auge del impresionismo en Estados Unidos coincidi¨® con el gusto por la jardiner¨ªa en un pa¨ªs cada vez m¨¢s industrial, la formaci¨®n de los grandes n¨²cleos urbanos y los suburbios. Central Park, en Nueva York, se cre¨® a mediados del XIX y el propio Jard¨ªn Bot¨¢nico, un pulm¨®n gigantesco en el Bronx, que precisamente este a?o celebra su 125 aniversario.
Los impresionistas estadounidenses tambi¨¦n sol¨ªan reunirse para pintar en lo que llamaban ¡°colonias¡± de artes, comunidades rurales en zonas como Long Island o Connecticut. Otros artistas ¡ªMaria Oakey Dewing, Hugh Henry?Brackenridge o John H. Twachtman¡ª crearon sus propios jardines como piezas art¨ªsticas en el exterior.
Lienzo y pintura
El resultado de aquellas reuniones es lo que se representa estos d¨ªas en Nueva York, en lienzo y en naturaleza. Como dijo el New York Post, ¡°si su idea de un jard¨ªn es la magnificencia formal de Versailles o las majestuosas fuentes de Boboli, vaya a Francia o Italia. Si busca algo ¨ªntimo con un tono nost¨¢lgico, no puede hacer nada mejor que tomar la l¨ªnea D hasta el Bronx¡±.
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