Salto de p¨¢gina: La literatura o el caos
En estos diez a?os, los chicos de Salto de P¨¢gina han contribuido a algo que se conoce como ¡®bibliodiversidad¡¯, es decir, la diversidad cultural aplicada al mundo del libro
En las mejores lecturas ya hay impl¨ªcito un salto. La tercera acepci¨®n de este t¨¦rmino en el Diccionario Real de la Academia Espa?ola habla de un ¡°despe?adero muy profundo¡± y la novena se refiere a ¡°una palpitaci¨®n violenta del coraz¨®n¡±. Pocos lectores que hayan sido heridos por p¨¢ginas que han cambiado su vida -es decir, pocos lectores genuinos- podr¨¢n desmentir cualquiera de estas dos acepciones. El buen lector se abisma ante determinadas historias, se deja caer furiosamente por la espiral de ese otro mundo que anida entre cientos de p¨¢ginas; del mismo modo, el coraz¨®n de un lector acreditado palpita de modo violento ante una frase que todo lo explica. Cualquiera de estas dos explicaciones hubiera servido a Pablo Mazo, Daniel Mart¨ªnez y sus socios cuando hace casi diez a?os crearon su propia editorial. Sin embargo, la elecci¨®n de ese nombre ¨CSalto de P¨¢gina- tiene un origen mucho m¨¢s f¨²til: ¡°Era un nombre f¨¢cil de recordar y era fresco y adem¨¢s todos los socios coincidimos en que nos gustaba y eso era lo m¨¢s dif¨ªcil¡±, confiesa el editor Pablo Mazo. Les sirvieron de inspiraci¨®n el rigor y calidad de trabajos editoriales como los ejecutados por Lengua de Trapo o 451 Editores.
El cat¨¢logo de Salto de P¨¢gina se asienta en tres colecciones: ¡®Narrativa Contempor¨¢nea¡¯ (de color p¨²rpura) donde han encontrado acomodo algunas de las voces en espa?ol m¨¢s importantes de la actualidad. Juan G¨®mez B¨¢rcena, Aixa de la Cruz, Mat¨ªas Candeira, Jon Bilbao o Emilio Bueso son s¨®lo alguno de ellos. La colecci¨®n ¡®Rescatados¡¯ (tintada de color azul) pretende recuperar obras en castellano de autores de culto. Una minuciosa labor editorial ha permitido recuperar joyas de nuestra literatura como El golpe de Estado de Guadalupe Lim¨®n, una poderosa y ¨¢cida novela de Gonzalo Torrente Ballester en la que resulta complicado discernir entre los h¨¦roes y las marionetas. Tambi¨¦n en esa colecci¨®n decidieron salvar la obra hist¨®rica de Vicente Blasco Ib¨¢?ez, ?Viva la Rep¨²blica!, donde los personajes inventados por el valenciano convivir¨¢n con otros hist¨®ricos como Godoy, Dantos o Marat. Por ¨²ltimo, la reciente colecci¨®n de ¡®Poes¨ªa¡¯ incorpora algunos de los t¨ªtulos m¨¢s interesantes y arriesgados, pues se trata de autores muy conocidos dentro del mundo de la narrativa que flirtearon con la poes¨ªa en m¨¢s de una ocasi¨®n: La mentira que siempre dice la verdad (Jean Cocteau), Vivo en lo invisible (Ray Bradbury), El truco preferido de Sat¨¢n (Walter Benjamin) o Ardores, cenizas, desmemoria (Juan Goytisolo)¡ ¡°El que siga nuestro cat¨¢logo ver¨¢ que tenemos cierta simpat¨ªa por el g¨¦nero fant¨¢stico pero no el convencional, sino m¨¢s bien aquel al que se le puede dar la vuelta a trav¨¦s de versiones m¨¢s heterodoxas o bizarras. Se trata de utilizar el g¨¦nero para hablar de otras cosas pero hacerlo con buena prosa y eficacia¡±, explica Mazo.
En estos diez a?os, los chicos de Salto de P¨¢gina han contribuido a algo que se conoce como ¡®bibliodiversidad¡¯, es decir, la diversidad cultural aplicada al mundo del libro y tambi¨¦n a un activismo cultural que han ejercido con compa?eros a los que admiran: P¨¢ginas de Espuma, Valdemar, Candaya o Min¨²scula. Salto de P¨¢gina es, adem¨¢s, una de las editoriales independientes que m¨¢s originales recibe, aproximadamente medio centenar al mes. De entre los muchos t¨ªtulos de otra editorial que Pablo Mazo podr¨ªa elegir, La ins¨®lita reuni¨®n de los nueves Ricardo Zacar¨ªas del Colectivo Juan de Madre, publicado en Aristas Mart¨ªnez es el escogido, pues se trata de una obra que apuesta por las t¨¦cnicas narrativas posmodernas aplicadas a la ciencia ficci¨®n.
¡°En los momentos jodidos es fundamental tener la literatura como un recurso, para dotar de sentido a las cosas. La literatura permite ordenar la experiencia¡±, sostiene Pablo Mazo ante la pregunta que da nombre a esta secci¨®n. El editor cree que los libros son terap¨¦uticos; todav¨ªa m¨¢s: ¡°sin ellos, todo ser¨ªa caos¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.