13 chicas yey¨¦s
Entre la seducci¨®n y la impertinencia, las yey¨¦s francesas aportaron una sensibilidad ¨²nica al pop de los 60
Como estilo, el yey¨¦ suele ser ignorado en las enciclopedias del pop (que pecan de anglocentrismo). Ellos se lo pierden, claro: fue la desinhibida respuesta francesa ¨Cy luego, europea- a los sonidos que ven¨ªan desde Londres, Nueva York, Detroit o Los ?ngeles, durante los a?os sesenta.
Inicialmente, el yey¨¦ era mim¨¦tico: se nutr¨ªa de versiones de ¨¦xitos anglosajones, que eran apropiados por un santoral de j¨®venes artistas franceses, encumbrados por aquella fabulosa m¨¢quina publicitaria llamada Salut les Copains (programa de radio y revista).
Pronto, el yey¨¦ gener¨® un repertorio propio (y aqu¨ª deben incluirse las adaptaciones con letras y arreglos irreconocibles). Muchas de esas canciones se amodorraban en el limbo de la adolescencia (amores tiernos, problemas en el colegio, vacaciones de verano) pero tambi¨¦n surgieron temas m¨¢s adultos: la sexualidad, los conflictos generacionales, el derecho a la diferencia, la cr¨ªtica social.
Mensajes que adquir¨ªan una fuerza extra al ser vehiculadas por vocalistas femeninas. Obviamente, tambi¨¦n hubo mucho cantante y¨¦y¨¦ masculino (Claude Fran?ois, Jacques Dutronc, Michel Polnareff, el camale¨®nico Johnny Halliday) pero el mercado franc¨¦s demostr¨® una voracidad insaciable por ¡°les filles y¨¦-y¨¦¡±, fueran dulces Lolitas o criaturas impertinentes
Y la industria respondi¨® fichando a toda cantante atractiva, preferiblemente con personalidad y algo que contar. Las inversiones eran modestas ¨Cel formato preferido era el Extended Play, disco con cuatro canciones- y la m¨¢quinaria parisina funcionaba a tope: compositores, arregladores, instrumentistas, estilistas, fot¨®grafos. Todos ellos estaban tan solicitados que, a partir de mediados de los sesenta, las figuras con mayores presupuestos saltaron a grabar a Londres.
Debido a su frescura, a sus excelentes producciones y su (relativa) inocencia, bastantes de los discos yey¨¦ han aguantado bien el paso del tiempo. De hecho, inspiraron posteriores movimientos, como la new wave y el indie. En los ¨²ltimos tiempos, se ha rescatado pr¨¢cticamente todo lo editado durante los a?os sesenta, en discos legales o no tan legales¡
El programa de hoy incluye algunos tubes (¨¦xitos, en la jerga del negocio) pero se basa esencialmente en cantantes poco conocidas o que no llegaron a triunfar, a pesar de contar con una imagen memorable y una discograf¨ªa abundante: pienso en Stone, con su aire a lo Brian Jones y su media docena de EPs entre 1966 y 1968. En general, todas ellas ten¨ªan historias fascinantes y facturaron m¨²sica potente. Disfruten.
- SERGE GAINSBOURG Chez les yé-yé (1963)
- SYLVIE VARTAN Le locomotion (1962)
- EVY Une question qui se pose (1965)
- PUSSY CAT Aucune fille du monde (1968)
- MARIE LAFORET Marie douceur-Marie Colère (1966)
- STONE Seul (1966)
- BRIGITTE BARDOT Tu veux ou tu veux pas (1970)
- MONIQUE THUBERT Avec les oreilles (1968)
- CHRISTIE LAUME Agathe or Christie (1967)
- ELIZABETH Je suis sublime (1967)
- FRAN?OISE HARDY Tous les gar?ons et les filles (1962)
- FRAN?OISE HARDY Only friends (1964)
- VIRGINIE Tu crois toujours (1966)
- DELPHINE La fermeture èclair (1967)
- ELSA C´est bizarre (1967)
- EDDIE VARTAN ET SON ORCHESTRE I got you babe (1965)
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