Nadia ?lvarez: desde la ciudad de los p¨¢jaros grises
Con su primer disco, 'Salto al vac¨ªo', ha conseguido traspasar las fronteras del circuito cantautoril de la capital y llegar hasta grandes escenarios acompa?ada de su banda
Bandas de punk chatarrero, tributos a los Rolling, a Dylan, a los Beatles... Para Nadia ?lvarez cualquier excusa era buena para colgarse la guitarra y pasar un buen rato tocando entre colegas. Sin embargo, ?lvarez no se hab¨ªa atrevido con el mundo de la composici¨®n hasta hace unos a?os. Fue en 2012 cuando un programa de mecenazgo realizado por Cerveza Alhambra la empuj¨® a dejar su ciudad natal, Le¨®n, y comenzar una andadura por Madrid que a d¨ªa de hoy contin¨²a. ¡°Eramos doce guitarristas de toda Espa?a haciendo la beca y adem¨¢s de las clases ten¨ªamos que dar conciertos una vez al mes. En uno de ellos present¨¦ una canci¨®n que hab¨ªa compuesto, parece que gust¨® y segu¨ª componiendo¡±. El resultado de esa inquietud fue Salto al vac¨ªo (Cabana Media Records, 2015), un proyecto casi accidental que comenz¨® siendo una maqueta y acab¨® convirti¨¦ndose en un disco de once canciones en el que convive la esencia ac¨²stica con la que fue concebido el proyecto y la fuerza de una banda.¡°Yo ten¨ªa miedo porque mis canciones son muy personales, muy ¨ªntimas, y no quer¨ªa que perdiesen ese toque. Suerte que los chicos que me acompa?an saben respetarlo y adornarlo hasta el punto que no pierda eso¡±.
Canciones como La ciudad de los p¨¢jaros grises son ejemplo de esa conjunci¨®n entre la sensibilidad po¨¦tica de la autora y la vitalidad que aporta la banda que lleva detr¨¢s. ¡°La canci¨®n habla de Le¨®n. Hubo un incendio tan grande en un pueblo de al lado que la nube de humo lleg¨® hasta Le¨®n y llen¨® todo de ceniza. Un d¨ªa levant¨¦ la persiana y vi todo gris: las nubes, las ventanas, los coches... Yo estaba a punto de irme de all¨ª, y me iba por algo. Aprovech¨¦ para escribir la canci¨®n y decir que los p¨¢jaros all¨ª eran grises, que estaban llenos de ceniza¡ pero es justo como yo ve¨ªa la ciudad antes de que ese incendio llegara. La ciudad ya estaba as¨ª, o yo dentro de la ciudad me ve¨ªa as¨ª. No estaba en mi sitio¡±.
Precisamente otra ciudad, Madrid, y una cadena de televisi¨®n, Telecinco, pusieron en el camino de Nadia ?lvarez la que es su actual banda. ¡°Empec¨¦ a trabajar de guitarrista en un programa de apuestas que hab¨ªa por la noche en Telecinco, y mis compa?eras eran m¨²sicas, The Clams. A ra¨ªz de ah¨ª empec¨¦ a conocer a gente de su entorno que ahora es mi banda¡±. El circuito de cantautores madrile?o y sus micros abiertos hizo el resto.
Pese a tener m¨¢s que trillado el oficio de m¨²sico, hay qui¨¦nes a¨²n se extra?an cuando la ven tocar ¡°muy bien¡± la guitarra. ¡°Seguimos sin respetar a la mujer en el trabajo, en la m¨²sica. Nos sorprendemos cuando una mujer toca bien un instrumento. Por suerte no he tenido un comentario ofensivo contra m¨ª por ser mujer, pero s¨ª notas c¨®mo se sorprenden cuando te ven tocar¡±. Una situaci¨®n que, asegura ?lvarez, se repite incluso en los c¨ªrculos m¨¢s cerrados, con los amigos. ¡°Tengo un grupo de amigos, todos tocan la guitarra, la bater¨ªa, el bajo... y cuando formaban bandas lo hac¨ªan entre ellos y a m¨ª nunca me llamaban. Y a lo mejor tocaban igual de mal que yo¡¡±, bromea Nadia, ¡°Eso s¨ª, para cantar s¨ª que se acordaban de m¨ª¡±, finaliza.
Hija de padre andaluz, la guitarra espa?ola y el flamenco siempre ha estado muy presente en casa. Hecho que no impidi¨® que durante su juventud, Nadia cayera en las garras de la radiof¨®rmula: algo que cuenta sin sonrojarse ¡°Las conversaciones de m¨²sica me las tomo a cachondeo¡ Quiero decir, yo hablo de m¨²sica con mis amigos y qu¨¦ les voy a ocultar a ellos. Igual que a ti, ?qu¨¦ sentido tiene? Ahora no escucho La? Oreja de Van Gogh, de hecho no s¨¦ si siguen juntos, no he escuchado el ¨²ltimo disco de Amaral, pero he escuchado los anteriores y me gustan. No me pongo Pablo Albor¨¢n en casa, pero escucho una o dos canciones de ¨¦l en la radio y me encantan. Todo lo contrario te puedo decir de Mal¨², por ejemplo¡ no es lo que escucho, pero no voy a mentir si algo me gusta¡±, explica.
Fue justo en esa adolescencia cuando Nadia comenz¨® sus estudios en la Escuela de M¨²sica de su ciudad. All¨ª aprendi¨® a degustar el jazz y el blues de los grandes y a diferenciar la m¨²sica que le gustaba de la que no ¡°Mi profesor era amante del blues y del jazz y ah¨ª descubr¨ª a los m¨ªticos: tocaba est¨¢ndares de jazz con ¨¦l, ten¨ªamos agrupaciones de jazz¡ me llegaban cosas de muchos sitios¡±.
Quiz¨¢s es de ah¨ª, de ese blues, de d¨®nde surge la adictiva melancol¨ªa que desprenden las canciones de Nadia ?lvarez ¡°Cuando estoy alegre estoy haciendo otras cosas, o salgo de fiesta¡ Cuando estoy triste me apetece quedarme en casa y si me quedo en casa pues tengo una guitarra y una libreta ?qu¨¦ mejor plan?¡±.
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