Anna Bella Geiger: una cita entre la pol¨ªtica y la po¨¦tica

La imaginaci¨®n no tiene buena prensa. La tratamos como Plat¨®n a los poetas: la admiramos pero le negamos la palabra, si hay que hablar de cosas serias. Hubo sin embargo un pensador, Kant, para quien la imaginaci¨®n fue decisiva por su capacidad de producir, inventar, crear. Es esa imaginaci¨®n que, partiendo, de unos pocos elementos logra enunciar una hip¨®tesis. La necesitan el cient¨ªfico y el artista, el m¨¦dico que rastrea un diagn¨®stico y el narrador que anda tramando una historia. De esa imaginaci¨®n, adem¨¢s, no habla Kant cuando trata del arte sino al estudiar la ciencia.

Tal imaginaci¨®n creadora es tambi¨¦n cr¨ªtica. Puede enunciar en positivo pero tambi¨¦n disolver y subvertir: desarticula conceptos y apreciaciones, mostrando su cara oculta. Si la imaginaci¨®n positiva es t¨ªpica del var¨®n, las mujeres son expertas en la dimensi¨®n cr¨ªtica. Anna Bella Geiger (Rio de Janeiro, 1933) no es una excepci¨®n. Por ello dice que la imaginaci¨®n es arte en libertad y en sus obras cr¨ªtica y poes¨ªa confluyen.

Un mapa concreta una imagen del mundo. Con ¨¦l, los rasgos imprecisos del paisaje de un territorio adquieren formas exactas. Quedan as¨ª de-finidos, esto es, con fronteras, que cierran puertas, y caminos que facilitan su colonizaci¨®n. Lo se?al¨® Michel Foucault en una c¨¦lebre entrevista, pero Geiger lo muestra con duras y claras im¨¢genes: la navaja barbera que corta, el mapa dividido en trozos, como una tarta, o troquelado en una rebanada de pan para que no alimente a quien lo habita.

Este rev¨¦s de la trama que conocemos y silenciamos se convierte para Geiger en obsesi¨®n que traduce en dibujos y (anti)ecuaciones en la exposici¨®n Anna-Bella Geiger, Geograf¨ªa f¨ªsica y humana. En los v¨ªdeos, Mapas elementales, trabaja en unos y otras. Los resultados, en papel, muestran la imposibilidad de sumar America del Norte y la del Sur: son heterog¨¦neas. Mientras, el mapa del Cono Sur cambia de figura y nombre: Am¨¦rica latina, Am-uleto, A mulata, A muleta. Mapas bordados completan la propuesta.

Un v¨ªdeo, casi una autobiograf¨ªa, denuncia el colonialismo revestido de paternal benevolencia, pero para combatir esa atribuida minor¨ªa de edad hay que abordar tambi¨¦n los problemas de identidad: Geiger, nacida en Brasil pero en una familia polaca de origen jud¨ªo, sabe muy bien qu¨¦ significa la pluralidad de culturas, c¨®mo se complica con los mitos agresivos del nacionalismo y con la exclusi¨®n por razones de g¨¦nero. Unas fotograf¨ªas peque?as pero convincentes, algunos libros de artistas y un divertido fotomontaje (Encuentro de la novia con Duchamp) ofrecen elementos para pensar la identidad e inician un espacio donde la imagen sustituye al mapa, porque pasamos de la geograf¨ªa f¨ªsica a la humana.

?Esta nos ense?a que miramos al otro pa¨ªs, a la otra cultura, a trav¨¦s de los estereotipos de la industria cultural. Los collages y postales de Geiger son tan sencillos como eficaces. Tambi¨¦n lo es la iron¨ªa con que mira a la alta cultura. En unas fotos, Arte y decoraci¨®n, la misma chica aparece sucesivamente rodeada de arte cl¨¢sico (s¨®lo asequible a la jet), cuadros pompier, remedos de Mondrian y objetos como los del c¨¦lebre collage de Hamilton. ?Pluralismo y sensibilidad art¨ªstica, o identidad falseada, af¨¢n est¨¦ril de pisar tierra firme aunque no sea la propia?

?Frente a eso el humor de un brev¨ªsimo sketch, Ideolog¨ªa, critica dos falsas identidades, las que ofrecen el consuelo del arte y el calor s¨®rdido de la naci¨®n. A ellas se oponen silenciosas mujeres que caminan sin parar (Pasos). As¨ª sugieren que carecer de un lugar en el universo es tambi¨¦n un modo de estar en el mundo, como afirma un aforismo de Geiger. Para ello quiz¨¢ sea necesario ejercitarse en la imaginaci¨®n cr¨ªtica, que se?al¨¦ al principio y vivir en ese espacio donde poes¨ªa y pol¨ªtica se encuentran.

Anna-Bella Geiger, Geograf¨ªa f¨ªsica y humana. Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo. Sevilla.? Hasta el 23 de octubre.