Godzilla vuelve para recrear el accidente nuclear de Fukushima

Godzilla, el monstruo fabuloso que sirvi¨® de met¨¢fora a Jap¨®n para mostrar al mundo las consecuencias de las explosiones at¨®micas de Hiroshima y Nagasaki, vuelve para recrear la triple tragedia originada por el terremoto, el tsunami y la fuga radiactiva de Fukushima en marzo de 2011. La pel¨ªcula n¨²mero 29 de la serie producida por los estudios Toho se llama en japon¨¦s Shin Godzilla (Nuevo Godzilla) y con el t¨ªtulo ingl¨¦s Godzilla Resurgence inaugura hoy la Semana de Cine Fant¨¢stico y de Terror de San Sebasti¨¢n.

Al festival donostiarra asistir¨¢ uno de sus codirectores, Shinji Higuchi, acompa?ado de Daniel Aguilar, traductor, autor y especialista espa?ol en kaiju-eiga (pel¨ªculas de monstruos gigantes) que sigui¨® la gestaci¨®n del filme y aparece en una breve pero significativa escena. La nueva historia del mutante de dinosaurio con aliento radiactivo ha sido vista por m¨¢s de cinco millones de personas en Jap¨®n, lo que la sit¨²a entre las diez cintas m¨¢s taquilleras del a?o en el pa¨ªs.

El argumento tiene lugar en un futuro cercano, cuando un descomunal monstruo aparece frente al mar de un Jap¨®n gobernado por un gabinete de hombres mayores desconcertados e indecisos. En una referencia directa a la incertidumbre causada en 2011 por las confusas declaraciones oficiales, el jefe del Ejecutivo lee un comunicado para tranquilizar a sus ciudadanos sin saber que Godzilla acaba de iniciar su mort¨ªfera incursi¨®n en los barrios costeros de Tokio.

Aunque las producciones comerciales niponas evitan por lo regular la pol¨ªtica, Shin Godzilla revive la grave crisis que provoc¨® el entonces primer ministro Naoto Kan, acusado de un mal manejo de la informaci¨®n tras el accidente nuclear de Fukushima. La incapacidad inicial de los altos funcionarios de la pel¨ªcula para hacer frente a la crisis desatada por el ind¨®mito monstruo recuerda las cr¨ªticas a la administraci¨®n nipona por no prever las consecuencias de haber sembrado con m¨¢s de 50 centrales at¨®micas un archipi¨¦lago volc¨¢nico de actividad s¨ªsmica constante.

Las secuencias de destrucci¨®n y p¨¢nico que los directores Shinji Higuchi y Hideaki Anno recrean en los primeros minutos de la cinta podr¨ªan pasar por material de los telediarios de 2011. En esta ocasi¨®n, sin embargo, las fuerzas de la naturaleza tienen la forma de un monstruo de casi 120 metros de altura que vomita radiactividad. El ejercito japon¨¦s interviene con todo su arsenal tras descartar la radical sugerencia de Washington de eliminar la criatura dejando caer una bomba at¨®mica en medio de Tokio.

La participaci¨®n de los militares para luchar contra Godzilla es habitual en la serie iniciada en 1954. Ese mismo a?o Jap¨®n inauguraba un nuevo ej¨¦rcito llamado Fuerzas de Autodefensa y limitado por la Constituci¨®n pacifista ¡ªredactada en la inmediata posguerra¡ª a acciones defensivas que nunca tendr¨ªan lugar fuera del archipi¨¦lago. El actual primer ministro japon¨¦s, Shinzo Abe, se ha propuesto anular las cl¨¢usulas pacifistas de la Carta Magna para fortalecer al ej¨¦rcito y potenciar las exportaciones de armas. En consecuencia, el despliegue tecnol¨®gico mostrado por los soldados en los momentos m¨¢s heroicos de Shin Godzilla deja un fuerte gusto a propaganda militarista.

La productora Toho no ha hecho p¨²blico el presupuesto oficial que adem¨¢s de un elenco de 328 actores ¡ªr¨¦cord para Jap¨®n¡ª, incluir¨ªa el coste de crear en gr¨¢ficos de ordenador un monstruo excepcional que se hizo famoso en sus inicios por ser un disfraz de latex manejado por un actor de estatura promedia. La recaudaci¨®n hasta septiembre iba por unos 68 millones de euros, seg¨²n la revista Variety.

Parte del ¨¦xito de taquilla se atribuye a los incondicionales de Godzilla que repiten la pel¨ªcula para buscar los innumerables gui?os y referencias a ediciones anteriores, incluidos los dos filmes no japoneses de la serie, rodados por productoras de Estados Unidos y en uno de los cuales se culpa a Francia de la aparici¨®n del monstruo.

Seg¨²n Daniel Aguilar, los directores japoneses han querido dar una ¡°revancha moral¡± al pa¨ªs europeo haciendo que sea Francia la que facilita la soluci¨®n final en Shin Godzilla. El primer ministro se inclina agradecido ante el embajador franc¨¦s cuyo papel, como un homenaje de los directores al primer especialista espa?ol del g¨¦nero, es interpretado por el propio Aguilar.