El empaste absoluto de The New Raemon y McEnroe

La idea fue de Ram¨®n Rodr¨ªguez y supuso algo tan sencillo como una llamada. Le pidi¨® el tel¨¦fono a un amigo, marc¨®, y despu¨¦s de unos cuantos tonos y una brev¨ªsima introducci¨®n, Ricardo Lez¨®n dijo s¨ª. No hicieron falta argumentos ni excusas, se hab¨ªan conocido a?os antes en la alicantina Elche, teloneando McEnroe a The New Raemon, despu¨¦s se encontraron en un Sonorama, y en alguna otra ocasi¨®n. Ambos se gustaban. Se gustaban en sus sonidos y en sus letras, en sus formas y en el avance de sus caminos

A Lez¨®n (Zaragoza, 1969), de McEnroe, le sorprendi¨® que el vocalista de The New Raemon le llamase. ¡°Cuando admiras profesionalmente a alguien, es raro. Y fue un honor¡±. Para Rodr¨ªguez de rareza, nada: ¡°Me gusta desde que empez¨®, escuchaba sus discos, y me gustaban sus canciones y su sensibilidad, la forma en la que escribe. Pensaba siempre ¡®si yo escribiese como ¨¦l, con su voz y su manera de interpretarlo¡­¡¯¡±.

Despu¨¦s de aquel s¨ª que Lez¨®n tard¨® un segundo en pronunciar, pas¨® un a?o. Ambos estaban en aquel momento con la tolvanera de sus ¨²ltimos trabajos (Rugen las flores y Oh, Rompehielos), as¨ª que, en octubre de 2015, se pusieron con la fusi¨®n. McEnroe viv¨ªa ¡°perdido¡± en una aldea de Soria, as¨ª que funcionaron de la forma m¨¢s f¨¢cil: notas de voz por el m¨®vil. ¡°Ram¨®n me las devolv¨ªa en un d¨ªa, con alg¨²n arreglo, alguna bater¨ªa, todo le gustaba y te ven¨ªas arriba¡±. Apunta Rodr¨ªguez que, desde el principio, esas primeras maquetas que le enviaba a Lez¨®n fueron muy parecidas al sonido final.

Tardaron poco m¨¢s de cuatro meses en tener las 12 canciones de Lluvia y truenos (Subterfuge Records, 2016). Seis y seis. Aunque las 12 encajan en ambos. Rodr¨ªguez escribi¨® las canciones pensando en que le gustasen a Lez¨®n: ¡°Ten¨ªa que intentar escribir o componer de una forma que me pareciera interesante, entonces cambi¨¦ la afinaci¨®n de la guitarra, solo para ir hacia otro sitio¡­ Y dije ¡®voy a escribir una que no hable de personas¡¯. Sus canciones tienen muchos motivos de fauna y naturaleza. Pens¨¦ en la imperfecci¨®n de las cosas, que nos olvidamos de cosas sencillas de las que disfrut¨¢bamos hace muchos a?os, como el que va al campo y ve unos ciervos y vivir ese momento como una cosa muy bonita sin que la mierda de alrededor te intoxique¡±.

Y despu¨¦s del periplo v¨ªa WhatsApp, se fueron a La Mina, en Sevilla. ¡°Una semana, sin estr¨¦s, fluido. Estar all¨ª con Ra¨²l P¨¦rez fue un placer; es una persona con la que puedes empezar a las diez de la ma?ana y acabar a las doce de la noche y no pasa nada. Y la convivencia fue total, era todo muy c¨®modo, a veces como si nos conoci¨¦semos de hac¨ªa mucho¡±. All¨ª fueron para redondear lo mejor posible a ese primer hijo com¨²n, y que no se notara ¡°padre y madre¡±. Y es inevitable que se entrevea. Ambos saben que es imposible ¡°que no suenes a ti mismo¡±. Lo complicado es que aquello no fuera excesivo, y el empaste es absoluto. Y calmo.

Aunque cualquier opini¨®n les importa m¨¢s bien poco. Se quedan con el placer de haber trabajado y de haberlo hecho juntos.