Antonio y Cleopatra: cuando amar radicalmente tambi¨¦n es pol¨ªtica
Tiago Rodrigues lleva a Temporada Alta una visi¨®n muy personal de la tragedia de Shakespeare
¡°El tiempo no puede marchitarla, ni la costumbre secar su infinita variedad¡±, dice de Cleopatra Enobarbo, el amigo y ayuda de campo de Marco Antonio inventado por Shakespeare. Una nueva Cleopatra nos visita junto a su amado, ambos en un formato muy distinto al usual. Ant¨®nio e Cle¨®patra, del reconocido director y actor portugu¨¦s Tiago Rodrigues (Lisboa, 1977), que se representa en Temporada Alta el s¨¢bado (Teatre de Salt, 21 h), es una original aproximaci¨®n a la tragedia de Shakespeare que reduce una de las obras m¨¢s concurridas del Bardo (37 personajes sin contar las serpientes) a solo los dos protagonistas, y hace que los interpreten dos bailarines y core¨®grafos, Sofia Dias y V¨ªtor Roriz, pareja en el mundo real.
El espect¨¢culo -que dura una hora y cuarto y pudo verse en el festival de Avi?¨®n del a?o pasado (2015-), parte de Shakespeare pero no duda en emplear tambi¨¦n otros mimbres, incluso de la Cleopatra de Mankiewicz. ¡°Es una pieza de nueva creaci¨®n inspirada en la tragedia de Shakespeare ¨Ccomo el mismo Shakespeare se inspir¨® en materiales previos, en Plutarco, en otras obras sobre la pareja- pero no la propia tragedia¡±, explica Rodrigues a este diario. ¡°Es de alguna manera como una memoria de la tragedia, de alguien que la hab¨ªa visto y se decide a intentar contar lo que recuerda de la obra. Ese es el punto de partida. Me parec¨ªa tambi¨¦n interesante ofrecer esa tragedia, una de las m¨¢s monumentales de Shakespeare con solo dos actores, que adem¨¢s son bailarines y core¨®grafos y en un escenario muy austero¡±.
El director, en la actualidad al frente del Teatro Nacional D. Maria II de Lisboa (que produce el montaje, de la compa?¨ªa Mundo Perfeito), recalca que en Antonio y Cleopatra de Shakespeare ¡°hay algo que nos toca mucho: esos dos amantes maduros, nada ingenuos, tan diferentes a Romeo y Julieta, que no entienden a¨²n los mecanismos del amor. Aqu¨ª, muy lejos de esa pureza primera, tenemos a dos personas que lo han vivido todo, que conocen el gobierno y el poder, han gobernado, mentido, manipulado, son c¨ªnicos y crueles, y saben que en ¨²ltima instancia arriesgan perderlo todo. Y entre ellos surge una forma muy radical de amor, en un mundo de ambici¨®n y pol¨ªtica¡±.
Solo dos actores, que adem¨¢s son core¨®grafos y bailarines, interpretan el montaje del conocido director portugu¨¦s
Rodrigues considera que esas circunstancias acercan mucho a Antonio y Cleopatra a nuestro tiempo, ¡°muy c¨ªnico, racional, premeditado¡±. En ese contexto, subraya, ¡°amar radicalmente tiene tambi¨¦n un significado pol¨ªtico¡±. Al director le gusta adem¨¢s que Marco Antonio y Cleopatra intercambian sus visiones, son capaces, dice, de ver uno a trav¨¦s de los ojos del otro, un hombre capaz de adoptar la visi¨®n de una mujer y viceversa, y un occidental que mira como una oriental y al rev¨¦s. ¡°Me parece una dicotom¨ªa muy interesante, y, una vez m¨¢s, algo que transforma el amor en gesto pol¨ªtico¡±.
?Qu¨¦ aporta que los actores sean core¨®grafos y bailarines? ¡°Tiene un impacto visual muy claro, por la forma de moverse y gesticular. Hay un h¨¢bito, una fisicidad, en ellos que imprime un dinamismo, un ritmo y una est¨¦tica al espect¨¢culo. Su presencia es muy exacta, muy matem¨¢tica, con una parte de repetici¨®n (¡°Antonio inspira, Cleopatra expira, Antonio inspira, Cleopatra expira¡±), que evidencia la obsesi¨®n de los personajes uno por el otro¡±.
Para Rodrigues, es muy interesante ver c¨®mo Antonio y Cleopatra se liberan de las redes de la tragedia: ¡°Lo hacen entreg¨¢ndose a ella con todo el libre albedr¨ªo, como Ant¨ªgona o Ifigenia, podr¨ªan sobrevivir, sobre todo Cleopatra, pero la verdadera victoria del h¨¦roe tr¨¢gico es mostrar que es due?o de su propio destino. Eso me interesa mucho¡±.
El director recalca la gran responsabilidad de los actores de hacer unos Antonio y Cleopatra que no son los de Shakespeare. ¡°Me interesaba dialogar con la obra de Shakespeare pero tambi¨¦n con otras fuentes. Hay referencias al presente pero no actualizo la tragedia, no son un Antonio y una Cleopatra de hoy. Son dos actores que explican algo que pas¨® hace tiempo y que se van metiendo en la piel de los amantes. El acto encantatorio de contar la historia contamina a los propios contadores y configura un doble plano. El presente est¨¢ tambi¨¦n porque nos alimentamos no solo de Shakespeare y Plutarco sino de otras fuentes menos puras como la m¨²sica de la pel¨ªcula de Mankiewicz (de Alex North), la figura de Elizabeth Taylor, y otras presencias de la cultura popular: no hay que olvidar que Cleopatra es una idea de mujer, de exotismo y de poder intemporales, un arquetipo casi¡±.
Sofia Dias actu¨® embarazada en Avi?¨®n. ?No tuvieron la tentaci¨®n de ponerle al ni?o Alejandro Helios o ¨Cimagino que menos- Ptlomeo Filadelfo, los nombres de los dos hijos varones de Cleopatra y Antonio? (tuvieron tambi¨¦n una chica, Cleopatra Selene, gemela del primero). ¡°No¡±, r¨ªe el director, ¡°?se llama Artur!¡±.
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