Doble diana
Barenboim y Lisa Batiashvili logran un prodigioso emparejamiento de los 'Conciertos para viol¨ªn' de Chaikovski y Sibelius
El emparejamiento de los Conciertos para viol¨ªn de Chaikovski y Sibelius recuerda inevitablemente a un disco legendario protagonizado en su d¨ªa por Eugene Ormandy y David Oistrakh. M¨¢s de medio siglo despu¨¦s, otro director jud¨ªo y otra violinista llegada del Este obran un prodigio similar. La pieza de Chaikovski conoce una versi¨®n marcadamente l¨ªrica, muy alejada casi siempre de las exhibiciones de fuerza y vigor de los grandes virtuosos. Ayudan unos tempi por lo general pl¨¢cidos para permitir el fraseo de altos vuelos en que se recrean solista y director por igual. Es una lectura muy personal, aunque en las ant¨ªpodas del experimento con gaseosa, de una pretenciosidad que roza lo insoportable, propuesto muy recientemente por Teodor Currentzis y Patricia Kopatchinskaja, que consiguen el extra?o prodigio de convertir una obra tan familiar en una partitura casi irreconocible. Batiashvili y Barenboim, en cambio, transforman una obra habitualmente te?ida de hero¨ªsmo y pujanza en una m¨²sica delicada, introvertida y a ratos casi camer¨ªstica. Las cosas mejoran a¨²n m¨¢s si cabe en el Concierto de Sibelius, estrenado en su versi¨®n definitiva justamente en Berl¨ªn con Richard Strauss al frente de la misma orquesta que dirige ahora Barenboim, quien ya lo hab¨ªa grabado con Pinchas Zukerman, mientras que Batiashvili hab¨ªa hecho lo propio con el finland¨¦s Sakari Oramo. Con 16 a?os, fue la m¨¢s joven participante de la historia en el Concurso Sibelius de Helsinki y se percibe de inmediato su afinidad natural con esta m¨²sica, recreada con un aliento po¨¦tico incesante. La t¨¦cnica de la georgiana le permite sortear con tersura todos los escollos, no menos temibles aqu¨ª que en Chaikovski: pocas veces, por ejemplo, se han escuchado las escalas ascendentes en terceras del ¨²ltimo movimiento tocadas con semejante limpieza y precisi¨®n. Barenboim le presta un acompa?amiento lleno de empat¨ªa, reforzando la presencia de las maderas, siempre esenciales en Sibelius. Parece claro que ninguno se ha plegado al otro, sino que los dos han cedido y se han enriquecido mutuamente. Uno de los mejores discos de los ¨²ltimos meses.
Chaikovski /Sibelius. Conciertos para viol¨ªn. Lisa Batiashvili (viol¨ªn). Staatskapelle Berlin. Director: Daniel Barenboim. Deutsche Grammophon.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.