El arte argentino contempor¨¢neo sale a su encuentro en las calles de Madrid
La exposici¨®n 'En el ejercicio de las cosas', repartida en 8 sedes, inaugura el circuito paralelo a Arco
Partiendo de un cuadro verdoso y rectangular, la artista argentina Mariana Ferrari interviene el muro de Casa Am¨¦rica sobre el que el lienzo descansa, prolongando su pintura m¨¢s all¨¢ de los l¨ªmites del ¨®leo y transformando toda la pared en un mural. Es una buena met¨¢fora de lo que el arte argentino pretende hacer desde hoy en Madrid: "Desparramarse", en palabras de Mariano Mayer, uno de los comisarios de la exposici¨®n En el ejercicio de las cosas, que da el pistoletazo de salida a las actividades paralelas a Arco, la feria del arte que arranca el 22 de febrero y de la que Argentina es el pa¨ªs invitado esta edici¨®n.
La de Casa Am¨¦rica es una de las ocho sedes que acoger¨¢n la exposici¨®n colectiva, que engloba el trabajo de 50 artistas de distintas generaciones. Uno de los platos fuertes all¨ª es la actuaci¨®n lum¨ªnica que sobre el Ayuntamiento y la Plaza de Cibeles desplegar¨¢ Karina Peisajovich al anochecer. Pero hasta que caiga la noche pueden verse c¨®mo las fotograf¨ªas de rinocerontes de Umberto Rivas (fot¨®grafo del Instituto Di Tela en los 60) dialogan con las instant¨¢neas que capturan letreros entre plantas y esquinas de patios de Bruno Dubner, ¡°que ejerce de fot¨®grafo del Buenos Aires de hoy¡±, explica Mayer. ¡°El hilo conductor de la muestra en Casa Am¨¦rica es el contacto de los j¨®venes artistas con la tradici¨®n¡±, resume Sonia Becce, la otra comisaria de la exposici¨®n.
Cada una de las ocho sedes en las que se reparte?En el ejercicio de las cosas gira en torno a una idea art¨ªstica. As¨ª, las obras expuestas en Tabacalera versan sobre el cuerpo, las del Retiro juegan con la idea del artista como arque¨®logo de sus esencias, las del Museo Cerralbo reflexionan sobre lo decorativo. Esta ma?ana se organiz¨® un recorrido, un peque?o tour guiado por los comisarios, entre tres de esas sedes.
De Casa Am¨¦rica los comisarios saltaron a la vecina Biblioteca Nacional, donde ¡°la literatura, y las fuentes literarias del arte, la relaci¨®n con el papel y el objeto libro¡±, explicaba Becce, son los ejes de la exposici¨®n. All¨ª pueden verse las fotograf¨ªas de gran tama?o de Nicol¨¢s Mastracchio (trampantojos coloridos que m¨¢s bien parecen ¨®leos) enfrentadas al ladrillo devenido ficha de domin¨® de Claudia del R¨ªo, o las fotograf¨ªas de esculturas y manos de Cecilia Szalkowicz.
¡°Una de las razones que me impulsaron a esta manifestaci¨®n es la convicci¨®n de que la vida es una obra de arte, por lo que en vez de 'pintar' una comida, di una comida¡±. Cuando, en 1968, el simpar Federico Peralta Ramos gan¨® la beca Guggenheim, dilapid¨® el dinero en un banquete para sus amigos en el Hotel Alvear. Cuando las autoridades quisieron retir¨¢rsela, el artista escribi¨® una carta justificando sus actos. Fragmentos de esa carta, adem¨¢s de grabaciones del artista, pueden verse y escucharse en el tercer punto del recorrido, la casa museo de Lope de Vega, donde los comisarios cerraron la presentaci¨®n de la exposici¨®n. En la casa de Lope, una submuestra llamada Flotando, la obra de cuatro artistas se enfrenta a la del escritor del Siglo de Oro.
¡°La forma que ten¨ªa Lope de vivir la literatura, esa convulsi¨®n que le hac¨ªa ser tan prol¨ªfico y a la vez estar todo el d¨ªa defendiendo sus obras es similar a la que tienen varios artistas argentinos¡±, explicaba Mayer. Tras ¨¦l, un cuadro de rombos multicolor insertado en un marco de ca?a trenzada, obra de la artista (y tambi¨¦n poeta) Fernanda Laguna. Y delante, ejemplares del libro 44 novelas que comienzan, del artista Gast¨®n P¨¦rsico.
La carta de Peralta, por cierto, consigui¨® convencer a las autoridades de la Fundaci¨®n Guggenheim de que le conservaran la beca. Es m¨¢s, desde entonces los estatutos fueron modificados y los artistas a los que se les concede no tienen que justificar de ning¨²n modo en qu¨¦ gastan el dinero. Para cambiar instituciones y remover conciencias est¨¢ el arte, y el argentino, m¨¢s all¨¢ de que termine Arco, conquista las calles de Madrid hasta el 16 de abril.
Babelia
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