Muere Chuck Berry, el creador del lenguaje del ¡®rock and roll¡¯
El cantante estadounidense, uno de los grandes pioneros de la m¨²sica popular, fallece a los 90 a?os
Si dentro de un milenio llegasen los extraterrestres a la Tierra, necesitar¨ªan ver una pir¨¢mide para saber qu¨¦ fue la cultura egipcia, la Mona Lisa para apreciar el valor de la pintura, aventurarse en El Quijote o Hamlet para explicarse el acontecimiento de la literatura o recrearse en la Novena Sinfon¨ªa de Beethoven para conocer la magia de la m¨²sica cl¨¢sica. A esos mismos alien¨ªgenas les bastar¨ªa el explosivo riff de ¡®Johnny B. Goode¡¯ para saber qu¨¦ fue el rock¡¯n¡¯roll, ese sonido liberador, electrizante, que puso patas arriba al mundo occidental a mediados del siglo XX.
Los extraterrestres, como toda la humanidad, no podr¨ªan evitar mover el esqueleto, o lo que sea que tuviesen, gracias al creador de la canci¨®n: Chuck Berry, muerto este s¨¢bado a la edad de 90 a?os en el condado de Saint Charles, en Misuri (EE UU). Los agentes del servicio de emergencias recibieron una alerta por una emergencia sanitaria a las 12.40 hora local (las 18.40 hora peninsular espa?ola) en la calle Buckner y al llegar a la casa hallaron a un hombre inconsciente. Intentaron reanimarlo pero no pudieron hacer nada por su vida. Su muerte fue certificada a las 13.26 hora local (19.26 hora en la Espa?a peninsular). Un rato despu¨¦s confirmaron la noticia en Facebook.
M¨¢s que el mism¨ªsimo Elvis Presley, fue este m¨²sico, nacido en St. Louis, quien invent¨® el lenguaje del rock¡¯n¡¯roll. Bajo una sutil y vibrante base de rhythm and blues, Berry desarroll¨® un idioma excitante y fresco que, all¨¢ por 1955 en la puritana Norteam¨¦rica de Eisenhower, sonaba como si viniese de otro planeta. Era en¨¦rgico, sexual, moderno, imparable. Era el rock¡¯n¡¯roll, que, junto a otros grandes pioneros norteamericanos, dio forma y sentido a partir de sus primeras grabaciones en Chicago en el sello Chess Records, al que acudi¨® por recomendaci¨®n de Muddy Waters. No guardaba el poder seductor ni visceral de Little Richard, ni el ritmo endiablado de Fats Domino, ni el toque primitivo de Bo Diddley, ni el magnetismo ni la voz llena de alma de Elvis Presley, pero en ¡®Maybellene¡¯ o ¡®Roll Over Beethoven¡¯ se edific¨® todo el canon futuro del rock¡¯n¡¯roll, una m¨²sica juvenil ¨Ccon la paradoja de que Berry era el mayor de aquella gloriosa pandilla de padres fundadores - pilotada desde la importancia capital de la guitarra el¨¦ctrica.
Berry nunca supo escribir ni leer bien, pero con la guitarra se comunic¨® como nadie. A diferencia de muchos coet¨¢neos, compon¨ªa y cantaba su propio material, que luego defend¨ªa en actuaciones trepidantes llenas de espect¨¢culo. Con su voz edulcorada y clarividente que emulaba a la de su ¨ªdolo Nat King Cole, incorpor¨® en sus conciertos gestos y movimientos nunca vistos sobre un escenario, haciendo c¨¦lebre el conocido duckwalk (baile del pato), que terminar¨ªa por convertirse en el baile m¨¢s ic¨®nico del rock¡¯n¡¯roll imitado por decenas de artistas. De adolescente, cultiv¨® una gran afici¨®n por la fotograf¨ªa, algo que de alguna manera le sirvi¨® para desarrollar una l¨ªrica de potentes im¨¢genes. Sus canciones estaban plagadas de coches, chicas y carreteras. Eran como fotograf¨ªas sociales llenas de ritmo, que crearon todo el universo l¨ªrico del rock¡¯n¡¯roll.
Todas estas cualidades, impulsadas por su car¨¢cter arrollador, sirvieron para que consiguiese los primeros ¨¦xitos del rock¡¯n¡¯roll, un estilo subterr¨¢neo que termin¨® por transformar a la sociedad estadounidense y, posteriormente, a la brit¨¢nica. Incluso ten¨ªa aires de estrella problem¨¢tica y pas¨® por segunda vez por la c¨¢rcel bajo las acusaciones de prostituir a una menor.
Su cat¨¢logo en Chess Records entre 1955 y 1965 es digno de estudio, pero tambi¨¦n su paso por Mercury con ¨¢lbumes como From St. Louie to Frisco. Durante a?os vivi¨® de la nostalgia de su nombre escrito con letras de oro en la historia de la m¨²sica popular y de los homenajes que recib¨ªa de todas las generaciones. Su ¨²ltimo trabajo en estudio data de 1979 pero, a finales del 2016, anunci¨® su primer disco con material in¨¦dito, que hac¨ªa coincidir con su 90 cumplea?os. Este ¨¢lbum de estudio, llamado Chuck, est¨¢ previsto que salga este a?o y est¨¢ compuesto por nuevas canciones originales escritas, grabadas y producidas por ¨¦l mismo.
Sobre sus incisivos riffs y sus letras se levant¨® todo un mundo, el fascinante mundo del rock. Bob Dylan le admiraba, los Beatles lo versionaron en su segundo disco, los Rolling Stones ¨Cy especialmente Keith Richards- no existir¨ªan sin ¨¦l, Bruce Springsteen siempre le tuvo como referencia compositiva, Led Zeppelin o AC/DC le citaban en su santoral¡ y as¨ª hasta nuestros d¨ªas, cuando un ej¨¦rcito de bandas y m¨²sicos todav¨ªa intenta conseguir un himno tan irrepetible, tan lleno de futuro pese a que representa el sonido de otra ¨¦poca ya extinta, como es Johnny B. Goode.
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