Mota sin gracia

Vistas las dos primeras entregas de El Acabose, el nuevo programa del humorista Jos¨¦ Mota en La 1 de TVE, ya ha habido tiempo de sobra para aburrirse, y eso que cada una apenas roz¨® los 45 minutos. Con la excusa de que el mundo fue destruido por Donald Trump en 2017, Mota traslada a su invitado a un futuro posapocal¨ªptico, el de unos pocos supervivientes entre chatarra.

En sus mon¨®logos y escenas, Mota suele recurrir a un humor na¨ªf, blanco, pero sin apenas gracia: ¡°Los mayas se reg¨ªan por el calendario de la abeja, de la abeja Maya¡±. A veces, el actor recuerda a ese t¨ªpico compa?ero de instituto que hac¨ªa gracietas ante las que uno sonre¨ªa para no ser antip¨¢tico. Solo cuando saca algo de punta a lo pol¨ªtico, pincha lo suficiente como para dibujar una sonrisa. Con un p¨²blico reducido y de risotada f¨¢cil, Mota eleva su puntuaci¨®n como imitador, que es lo que mejor se le da, ya sea de Trump, Jordi Hurtado o Pedro Almod¨®var, pero de ah¨ª a provocar la carcajada hay un mundo.

Por ahora, el formato de entrevista con el invitado en supuesta clave de humor no ha funcionado, derivando en di¨¢logos con poca chispa. El primer d¨ªa fue el cantante David Bustamante. Uno no sabe si fue peor ver al exconcursante de Operaci¨®n Triunfo entrar en el juego de Mota para intentar agradar, o escuchar sus gorgoritos. No obstante, el estreno del programa logr¨® un 11% de audiencia y dos millones de espectadores, solo superado por el poderoso Bert¨ªn Osborne, que invit¨® ese d¨ªa al presidente de Cantabria, Miguel ?ngel Revilla.

Para qu¨¦ rebuscar. El segundo cap¨ªtulo de El Acabose cont¨® con el verborreico Revilla, quien record¨® cuando, en un restaurante, orin¨® codo con codo con el rey Juan Carlos y este le dijo: ¡°Pasa, pasa, as¨ª ver¨¢s dos reyes¡±. Y, claro, el hombre se cort¨® y no echaba ni gota. Empiezo a temer que el omnipresente Revilla aparezca en breve preparando un cocido monta?¨¦s en MasterChef o como tronista en Mujeres y hombres y viceversa.