Una antigua f¨¢brica de bombas producir¨¢ arte y solidaridad

Carlos Gens ten¨ªa buen gusto. Le iba bien el negocio de peque?a maquinaria agr¨ªcola, v¨¢lvulas industriales y bombas hidr¨¢ulicas. Y decidi¨® ampliarlo en una zona de huertas y alquer¨ªas de Valencia. Para ello encarg¨® la construcci¨®n de una f¨¢brica en 1930 a Cayetano Borso di Carminati, un arquitecto audaz, hoy muy apreciado, que erigi¨® un edificio racionalista con motivos de art dec¨®. Bombas Gens se llamaba.

Su fachada, serena con detalles decorativos de fuentes, llam¨® la atenci¨®n desde el principio. Incluso cuando estaba muy deteriorada, tras un incendio y a?os de abandono. Desde fuera, apenas se pueden intuir las espl¨¦ndidas naves fabriles que cobijan y por las que caminan Susana Lloret y Nuria Enguita, las dos mujeres que llevan la voz cantante de un atractivo y singular proyecto que est¨¢ recuperando el espacio para convertirlo en un foco de arte moderno y contempor¨¢neo, un centro social de atenci¨®n a ni?os vulnerables del barrio y un punto de referencia en las investigaciones de enfermedades raras, especialmente la de Wilson. Adem¨¢s, contar¨¢ con el a?adido de acoger el restaurante de Ricard Camarena, un cocinero en boga con una estrella Michel¨ªn.

¡°Me gustar¨ªa dejar bien claros los tres fines de servicio p¨²blico de la Fundaci¨® Per Amor a l'Art: art¨ªstico, social e investigador. Y lo importante que es transmitir que con una enfermedad gen¨¦tica como la de Wilson, por ejemplo, en la que el h¨ªgado no puede deshacerse del cobre adicional, se puede llevar una vida normal si se diagnostica precozmente¡±, apunta Susana Lloret, vicepresidenta de la citada fundaci¨®n que promueve todo el centro de la que es directora.

La apertura por fases de Bombas Gens Centre d'Art se ha retrasado para, previsiblemente, finales de esta primavera. El motivo obedece, sobre todo, al hallazgo de una bodega del siglo XV, que oblig¨® a modificar el proyecto para conservar y hacerla accesible esta estancia subterr¨¢nea del pasado, que inclu¨ªa una vasija casi completa, valiosas piezas de azulejos y de vajillas de la antigua alquer¨ªa. Tambi¨¦n se han hallado bombas explosivas, adem¨¢s de hidr¨¢ulicas, que han desactivado los T¨¦dax, metralla y carcasas. Las instalaciones fueron incautadas por los republicanos en la Guerra Civil para fabricar bombas. Por eso, era objetivo del bando franquista y se construy¨® un refugio antia¨¦reo, que se ha conservado casi intacto. ¡°F¨ªjate en el muro para evitar las ondas expansivas¡±, comenta Nuria Enguita, conservadora de arte, exdirectora de la Fundaci¨® T¨¤pies y directora del Centre d¡¯Art de Bombas Gens. ¡°La rehabilitaci¨®n est¨¢ siendo una clase de historia de nuestra ciudad. Hemos encontrado elementos que adem¨¢s, nos unen al barrio, y pensamos establecer itinerarios y actividades con la alquer¨ªa municipal del parque de Marxalenes, que est¨¢ aqu¨ª al lado y que tiene, adem¨¢s, vestigios del antiguo esplendor del comercio de la seda en la Valencia. Y ofrecer apoyo, tambi¨¦n de comedor, a los alumnos m¨¢s desprotegidos del colegio del barrio¡±, apunta Lloret.

Iniciativa privada

Muy sensibles y activos en el fomento de la visibilidad e investigaci¨®n de las enfermedades raras (un familiar muy cercano padece una), ella y su marido, Jos¨¦ Luis Soler, presidente de la Fundaci¨® per Amor a l'Art y uno de los fundadores de Ubesol, proveedora de Mercadona bajo las marcas de Delipl¨²s (productos de higiene personal y belleza) y Bosque Verde (productos de limpieza), empezaron tambi¨¦n a coleccionar obras de arte abstracto y de fotograf¨ªa hace a?os. Les asesor¨® un amigo, el exdirector de la Tate Modern, Vicent Todol¨ª, y fueron conformando unos importantes fondos, entre los que destacan desde las obras de fot¨®grafos del siglo XX ya cl¨¢sicos, como los fallecidos Walker Evans y Garry Winogrand, hasta las obras de fot¨®grafos recientes, pasando por piezas de los pintores Anna-Eva Bergman, Esteban Vicente o Juan Usl¨¦, los escultores Juan Mu?oz o Cristina Iglesias. ¡°Nos interesa hacer talleres con los artistas y el p¨²blico y que se involucren en la marcha del centro¡±, explica Enguita.

Las exposiciones permanentes de la colecci¨®n ¡°rotar¨¢n cada ocho meses y habr¨¢ tres exposiciones temporales al a?o¡±, a?ade la experta en arte, debajo del techo de viguetas de madera de una de las naves. Hay espacio para m¨²ltiples actividades en los cerca de 6.000 metros cuadrados del centro, de los cuales unos 2.600 ser¨¢n para espacio expositivo en un proyecto cuyo coste asciende a entre 9 y 10 millones de euros, incluyendo la compra del inmueble, que pudo ser un entro comercial m¨¢s o un hotel antes de ser adquirido.

La financiaci¨®n del proyecto es completamente privada y la pretensi¨®n es no cobrar entrada a las instalaciones arte dec¨® que contar¨¢ tambi¨¦n con zonas ajardinadas. El proyecto es ambicioso: pretende convertir en un foco de arte, cultura y solidaridad, de alcance internacional, un espacio donde antes se fabricaban bombas de agua y de matar.