¡®El cuento de la criada¡¯ : llega la distop¨ªa de la nueva generaci¨®n
HBO estrena en Espa?a la serie basada en la novela de Atwood. Una pesadilla futurista llena de claves sobre el presente
Un grupo de fascistas teocr¨¢ticos aprovechan la coartada del terrorismo islamista para hacerse con el poder en EE UU, disolver el Congreso, suprimir la libertad de prensa y cualquier derecho de las mujeres, convertidas desde entonces en objetos, regalos para la clase alta, m¨¢quinas reproductoras o simples desechos intercambiables. A pesar de los escalofriantes paralelismos con la realidad actual, este es el planteamiento de El cuento de la criada (The Handmaid¡¯s Tale), una novela escrita por Margaret Atwood en 1984, s¨ª, han le¨ªdo bien, y que HBO estrena ahora en Espa?a en una serie producida por Hulu.
AVISO: Este art¨ªculo contiene alg¨²n SPOILER de los dos primeros cap¨ªtulos.
¡°En 1984 la premisa parec¨ªa- incluso a m¨ª- m¨¢s bien excesiva. ?Iba a ser capaz de convencer a los lectores de que en EE UU se ha producido un golpe de Estado que hab¨ªa transformado la democracia liberal existente hasta ahora en una dictadura teocr¨¢tica que se tomaba todo al pie de la letra?¡± cuenta Atwood en el pr¨®logo a la edici¨®n que Salamandra lanz¨® ayer en Espa?a y con la que se recupera un libro esencial en la literatura dist¨®pica y lleno de claves sobre el presente.
La novela est¨¢ perfectamente adaptada, algo en lo que se nota la mano de Atwood. En las primeras escenas, una aterrada mujer, (Elisabeth Moss), huye con su marido y su hija por los bosques del norte de EE UU. No sabes lo que pasa, pero sientes el miedo, convertido en p¨¢nico cuando aparecen las furgonetas negras del r¨¦gimen; sientes la agon¨ªa cuando pierde a su hija, convertida en desesperaci¨®n cuando poco despu¨¦s es llevada a un Centro Rojo para aprender a ser una esclava, un vientre de alquiler al servicio de la teocracia, en Offred, Defred, propiedad del Comandante, su posesi¨®n, su ¨²nico camino para tener un hijo en un mundo en el que la fertilidad se ha reducido alarmantemente.
Los creadores han acertado al meter en el primer cap¨ªtulo, por ejemplo, la ejecuci¨®n de un violador a manos de una turba de criadas puestas en c¨ªrculo. En un c¨ªrculo est¨¢n tambi¨¦n en el segundo episodio, cuando una de ellas da a luz un ni?o que ser¨¢ de otra, de una Esposa, se?ora yerma, altiva y mustia. Tambi¨¦n cuando en el Centro Rojo se?alan a una v¨ªctima de violaci¨®n y le gritan que se lo merece. O ella o ellas, ese es el juego. Otro fascismo, el mismo escalofr¨ªo, la distop¨ªa perfecta . Asimismo, resultan impecables los flashback de Offred con su amiga Moira, en los que se percibe la p¨¦rdida, ese aspecto tan presente en la novela, ese ¡°en el pasado est¨¢bamos mal, pero era el para¨ªso comparado con esto¡±. Y hay mucha sabidur¨ªa narrativa en ese final del segundo episodio.
La fotograf¨ªa, en un atemporal azul gris¨¢ceo a veces, en un amarillo casi da?ino en otras; la apuesta por el intimismo en las escenas y, por encima de todo, los ojos de Moss te hacen sentir en el centro de la distop¨ªa. Las criadas visten h¨¢bito rojo, pasean de dos en dos para que la una vigila a la otra, tienen prohibido leer, poseer algo o disfrutar de cualquier cosa y llevan una especie de cofia que les tapa la cara por los lados y limita su visi¨®n. Han de ir con la vista baja, sumisas y saludar con frases hechas, peque?os salmos. Pero cuando est¨¢ sola o en compa?¨ªa de alguna mujer de la que se puede fiar, Moss levanta la vista y vemos dos ojos verdes que nos transmiten miedo, sumisi¨®n, y ese ¡°har¨¦ lo que sea para mantener viva la llama de la esperanza de volver a ver a mi hija¡±. Son dos ojos que valen una serie, que revuelven el est¨®mago del espectador, que nos recuerdan, tambi¨¦n, que ni el peor r¨¦gimen puede acabar con todo el pensamiento independiente.
Cuando una serie capta a la perfecci¨®n el esp¨ªritu de un gran libro y ambas narraciones se retroalimentan, no se puede pedir mucho m¨¢s. El casting es excelente. Moss est¨¢ perfecta como Offred; Joseph Fiennes es un Comandante que sabe ser fr¨ªo y anodino al principio, casi una sombra, e ir abri¨¦ndose seg¨²n transcurre el relato; Samira Wiley (Poussey Washington en Orange is the new black) clava el papel de Moira; Ofglen, la compa?era de paseos de la protagonista, todo mirada e idealismo, est¨¢ luminosamente llevada por Alexis Bledel; nunca habr¨ªa pensado que la fan¨¢tica T¨ªa Lydia podr¨ªa estar tan bien reflejada en Ann Down (la inolvidable Patti Levin de Leftovers) .
La escena del segundo episodio en la que tres Esposas, todo apariencia, prepotencia y esnobismo, le dan una galleta a Offred y le tratan mucho peor que si fuera un perro; el muro con los opositores ejecutados y exhibidos; las iglesias derruidas por un r¨¦gimen al que la antigua religiosidad no le es suficiente o la esperanza de una salvaci¨®n que se va dejando ver, muy poco a poco, en la serie y en la novela son solo tres ejemplos que completan un relato audiovisual y literariamente sobresaliente. Bienvenidos a la distop¨ªa de la nueva generaci¨®n
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Vientres alquiler
- Margaret Atwood
- The Handmaid's Tale
- Hulu
- Gestaci¨®n subrogada
- Series ciencia ficci¨®n
- Series americanas
- HBO
- Reproducci¨®n asistida
- Paternidad
- Maternidad
- G¨¦neros series
- Embarazo
- Familia
- Plataformas digitales
- Reproducci¨®n
- Televisi¨®n IP
- Series televisi¨®n
- Programa televisi¨®n
- Programaci¨®n
- Internet
- Empresas
- Televisi¨®n
- Medicina
- Econom¨ªa
- Quinta temporada