Una esperanza en las acrobacias

La revelaci¨®n que le cambi¨® la vida lleg¨® en una expedici¨®n a la Ant¨¢rtida hace once a?os. As¨ª lo cuenta Mariano L¨®pez, psic¨®logo argentino especializado en tratamientos con menores. "Fueron muchos d¨ªas de oscuridad en los que te da tiempo a pensar mucho. Estando all¨ª llam¨¦ a Cirque du soleil para decirles que quer¨ªa unirme a su programa social", cuenta en una visita a Madrid para participar en una conferencia. As¨ª empez¨® a formar parte de Cirque du monde, un proyecto dirigido a j¨®venes en riesgo de marginaci¨®n de entre 8 y 25 a?os que combina t¨¦cnicas de circo con t¨¦cnicas de educaci¨®n social.

"El objetivo no es que acaben siendo grandes artistas de circo, que tambi¨¦n puede pasar, sino que tengan al menos una oportunidad de sentir que pertenecen a un grupo positivo". L¨®pez y sus compa?eros trabajan codo a codo con los agentes locales. El equipo de Cirque du soleil se traslada a los diferentes pa¨ªses para asesorar a comunidades o asociaciones y ense?ar el programa pedag¨®gico dise?ado por los profesionales de la compa?¨ªa canadiense. "Es un sistema que a¨²na los calores circenses: trabajo en equipo, inclusi¨®n, creatividad en el sentido de capacidad de adaptaci¨®n, comunidad y diversidad", resume L¨®pez.

Desde su fundaci¨®n en 1995, el proyecto ha sido implantado en m¨¢s de 80 comunidades. Brasil supuso el germen de esta iniciativa. El 90% de los educadores formados en ese pa¨ªs por Cirque du monde proceden de las favelas. "All¨ª por ejemplo el circo es algo pol¨ªtico, se convierte en una oportunidad para hacer justicia social", se?ala L¨®pez, quien sostiene que estos j¨®venes en riesgo de exclusi¨®n est¨¢n "inactivos art¨ªsticamente". "Lo bueno de este sistema es que hay una tarea para todo el mundo", explica, "el que no hace acrobacias, hace malabares, otro puede ser payaso y otro ayudar montando el escenario". El pedagogo sostiene adem¨¢s que el programa concede un lugar muy importante al desarrollo de la mujer, aunque haya pa¨ªses en los que esto suponga "un desaf¨ªo a¨²n mayor".

L¨®pez acaba de regresar de Italia donde ha sopesado con grupos art¨ªsticos de ese pa¨ªs la posibilidad de llevar el programa pedag¨®gico a los campos de refugiados. "Esperamos convertirnos all¨ª en una oportunidad para jugar, porque ante todo nuestro proyecto debe ser un espacio l¨²dico", detalla.

Cada vez que uno de los espect¨¢culos del Cirque du soleil visita una ciudad en la que funciona una asociaci¨®n colaboradora de su programa social, se le ceden entradas para que las venda y poder invertir los beneficios en sus programas. Los chavales inscritos en el proyecto tambi¨¦n tienen la oportunidad de ir a ver estos espect¨¢culos que en la mayor¨ªa de los casos no se podr¨ªan pagar de otro modo y tambi¨¦n conocen a los artistas. Eso es lo que suceder¨¢ cuando la compa?¨ªa levante su gran carpa a partir de noviembre en Espa?a con su nuevo espect¨¢culo Totem.