La serie a la que un d¨ªa quisiste
Hay se?ales inconfundibles que denotan que tu relaci¨®n ideal con una ficci¨®n est¨¢ alcanzando un punto sin retorno
Cuando conoces a una serie, todo es amor. Un mundo por descubrir. Personajes con los que encari?arte. Misterios por escudri?ar. Pero cuando la relaci¨®n dura demasiado -entre cinco o siete a?os-, es inevitable notar que algo se est¨¢ resquebrajando. Las tramas comienzan a ser repetitivas. Ves fallos que antes no notabas. Y, aunque hagas lo posible para mantener esta cita semanal, se nota la desgana. Solo te queda el consuelo de ver terminar aquel viejo romance. Ya lo haces por rutina. Ahora pones a otras por delante. Ni siquiera te divierte.
Hay se?ales inconfundibles que denotan que aquella relaci¨®n ideal est¨¢ alcanzando un punto sin retorno. Las series entran en el hogar regularmente y se vuelven un miembro de tu familia, y les debes un adi¨®s. Quiz¨¢s deber¨ªamos haber roto hace tiempo, Los Simpson. Lo nuestro ya pas¨®, Anatom¨ªa de Grey. Tom¨¦monos un descanso, ?rase una vez.
Esta ¨²ltima, una c¨®ctel de los m¨¢s granados cuentos de hadas, ha ca¨ªdo este a?o en todos los clich¨¦s de las producciones moribundas: un superepisodio musical, una boda y dram¨¢ticas muertes. Y ahora salta en el tiempo para cambiar su reparto protagonista. Solo faltaban invitados famosos y un capitulo en directo. Cuando se unen tantos golpes de efecto, algo ha dejado de funcionar. Hasta que termine, la serie vivir¨¢ como un paciente en coma, un engendro irreconocible que espera cualquier impulso publicitario para romper la rutina.
Esta temporada tambi¨¦n sufrir¨¢n importantes cambios los elencos de Quantico (que suma al modelo bilba¨ªno Jon Kortajarena), Taken o Mentes Criminales. Todas est¨¢n heridas de muerte. El caso m¨¢s sangrante es, aun as¨ª, el de Hawaii 5-0, que deja marchar a sus actores de origen asi¨¢tico, Grace Park (Gal¨¢ctica) y Daniel Dae-Kim (Perdidos), por un problema salarial de calado. Seg¨²n ha trascendido, cobraban un 15% menos que sus colegas blancos, menos famosos al inicio. Este remake de acci¨®n nunca fue brillante, pero esta espantada saca a la luz verg¨¹enzas mucho m¨¢s profundas de una televisi¨®n que quiere presentarse como inclusiva. Tenemos que hablar.
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