Yo quer¨ªa a Garbi?e

Madrid. S¨¢bado a las 3 de la tarde. 40 grados en la calle. Tarde de sof¨¢ y peli. O mejor, tarde de sof¨¢ y Wimbledon. Garbi?e Muguruza se enfrenta a una diosa del tenis, Venus Williams. Pero muchos espa?oles no podemos ver la final y no porque no nos interese, sino porque solo la emiten en la televisi¨®n de pago. Yo quer¨ªa (y mucho) ver a Garbi?e.

Hace muchos a?os que los derechos de la televisi¨®n influyen en c¨®mo vemos el deporte. En este caso, una cadena de pago adquiri¨® todo el torneo en exclusiva. Ok, entiendo. Aunque hay mecanismos para que un partido tan importante se vea en abierto. Otras veces se ha hecho. Un mes antes, Roland Garros tambi¨¦n se hab¨ªa emitido por televisi¨®n de pago, pero la semifinal y la final de Rafa Nadal se pudieron ver por Cuatro y Telecinco. Tal vez alguien pens¨® que Garbi?e no traer¨ªa tanta audiencia.

Las tenistas ganan t¨ªtulos aunque las c¨¢maras no las miren. Venus Williams y Andy Murray reclamaron que se disputaran m¨¢s partidos femeninos en las pistas centrales, que son los que retransmiten las televisiones. Lo mismo ocurre con otros deportes en los que las espa?olas despuntan, a pesar de que no tengan hueco en las parrillas.

Un informe del Consejo Superior de Deportes recoge esas cifras rid¨ªculas. En una investigaci¨®n realizada en 108 pa¨ªses, las mujeres solo protagonizan el 11% de las noticias de deportes. Los hombres lo hacen en el 89% de los casos. En Espa?a, las noticias sobre mujeres deportistas fueron solo el 6%.

Normal que despu¨¦s se nos olvide que ellas tambi¨¦n juegan. Y ganan. De hecho, la ¨²ltima vez que un espa?ol jug¨® una final de Wimbledon, tambi¨¦n fue Garbi?e Muguruza.

Este a?o, Murray reivindic¨® los logros de las tenistas cuando un periodista le dijo: ¡°Sam [Querrey] es el primer jugador estadounidense que llega a semifinales de un grand slam desde 2009¡±. ¡°Jugador masculino¡±, tuvo que recordarle Murray. Dos veces.

Al menos, que no nos vendan que el deporte femenino no nos interesa.