Imbatible

No tiene la inmediatez de la radio ni la capacidad reflexiva de los diarios, pero la televisi¨®n es imbatible en las retransmisiones deportivas y, probablemente, entre todos los deportes posibles, el atletismo es el que sale mejor parado. Pocas veces el espectador podr¨¢ acercarse tanto a la grandeza, y en ocasiones las miserias, del esfuerzo humano por alcanzar la meta. Las retransmisiones que realizan los brit¨¢nicos del Campeonato Mundial de atletismo que se celebra en Londres, y que en Espa?a se ven en Teledeporte, son la prueba de lo dicho.

Ocurre, adem¨¢s, que el deporte es en s¨ª mismo un microcosmos extrapolable al conjunto de la sociedad. En un sistema que hace tiempo equipara la cantidad con la calidad, ser el m¨¢s r¨¢pido, el m¨¢s resistente o el m¨¢s fuerte equivale tambi¨¦n a ser el mejor. Vales lo que vale tu marca. Y cuando no logras el triunfo te podr¨¢n despedir con una gran ovaci¨®n, pero el mito ya no es el mismo. De eso lo sabe ya todo Usain Bolt.

Naturalmente, en todo Mundial siempre hay escenas inolvidables. Una de ellas fue la clasificaci¨®n de Isaac Makwala para los 200 metros en un d¨ªa con lluvia. El botsuano tuvo que correr en solitario por una decisi¨®n federativa. Verle en un estadio repleto con ocho de las nueve calles vac¨ªas, luchando contra s¨ª mismo, fue impactante. Lo consigui¨®. La final fue, tambi¨¦n, espectacular: ni Makwala ni el favorito, el surafricano Van Niekerk, pudieron vencer al turco Ramil Guliyev.

Menci¨®n aparte merece la realizaci¨®n televisiva: excelente y de una neutralidad impecable, algo al parecer incompatible con los comentaristas espa?oles en los que se entremezclaban la wikipedia con el ardor patrio. Repeticiones oportunas, primeros planos de rostros, c¨¢maras lentas, a¨¦reas, toda la tecnolog¨ªa al servicio del espect¨¢culo: sobriedad e informaci¨®n visual. Diez d¨ªas que finalizan hoy, en los que el esfuerzo, las condiciones naturales y la preparaci¨®n explican el ¨¦xito.